YOVANA MONTECARLO
Me muevo bajo las sábanas. Me duele mucho la zona de las costillas. Me giro y una mano tapa mi boca. Abro los ojos y veo un hombre enmascarado. Le muerdo la mano y empiezo a gritar. Daniel sale del baño y al verlo lo aparta. Se golpean y el castaño consigue quitarle el pasamontañas. Al ver el rostro de Sergio me paralizo. El ríe y Dani lo golpea, de seguir así su brazo no sanará nunca.
-¿Qué esta pasando? -Pregunta el guardia.
-Eso quiero saber yo, ¿cómo diablos entró? Este hombre es uno de los que la secuestró, ya debería estar encerrado.
-En este momento nos encargamos de el. –Se lo llevan.
-Tu brazo –Susurro. –Niega.
Daniel cierra la puerta y suspira. Se da la vuelta y camina hasta mi cama. Despacito agarra mi mano, comienzo a llorar y el me abraza. Me aferro a el mientra las lágrimas caen. El besa mi cabeza y alzo la cabeza. Rato después el dolor de mis costillas cesa y Dani acaricia mi pelo hasta que voy cerrando los ojos. El se acuesta en ese incómodo sofá.
-Dani, ven aquí. –Se acerca.
-¿Necesitas algo? —Asiento.
-¿Por qué no duermes conmigo? Hay sitio de sobra y ese sofá no se ve nada cómodo.
-Cómodo no es, pero no quiero incomodarte.
-Por favor, asi me sentiré mas segura.
-Esta bien. –Sonríe.
Se tumba a mi lado y con su brazo sano me abraza. Sonrío y apoyo mi cabeza sobre su pecho, al final se puso la camiseta. Acaricia mi brazo y poco a poco me voy quedando dormida. Abro los ojos al escuchar varias voces, entre ellas la de Daniel. Abro los ojos viendo a Jesús y ami hermana sentados en el sofá. El castaño esta sentado en la cama y yo sigo abrazada a el.
-Buenos días, morenita. –Besa mi frente.
-Buenos días idiota. –Río y se hace el ofendido.
-Oh, voy a lavarte la boca con detergente. –Toca mi nariz.
-Aun estoy esperando a que me la laves con legía. –Ríe y me hace cosquillas.
-¿Nos hemos perdido algo? -Pregunta Jesús.
-Dani, por favor para. –Digo como puedo.
-Repite conmigo "No volveré a insultarte, tampoco diré que no estas bueno"
-Daniel eres un idiota, pero te quiero. No estas bueno, si no buenísimo para comerte todito –Río y me besa.
-Mucho mejor.
-¿Que diablos pasó entre ustedes? -Ríe mi hermana.
Ambos nos miran sin entender nada y comenzamos a reír. Ellos siguen sin entender nada y les explicamos lo que sucedió anoche, con Sergio. Jesús trata de llevar a su gemelo a la cafetería para que coma algo, pero el se niega ha dejarme sola. Al final lo consigo y va, pero se que no tardará mucho.
-Ahora si cuéntamelo todo. –Ríe y se sienta ami lado.
-No sabía que estabas despierta. Buenos días. -Mi madre besa mi frente.
-Buenos días –Sonrío.
-¿Te sucede algo?
-No ¿por qué?
-Ayer estaba toda deprimida y ahora estas diferente.
-No puedo pasarme la vida llorando no ir que unos miserables abusaron de mi. Tengo que ser fuerte y darles guerra. No pararé hasta que paguen por lo que me hicieron ami y a mi hermana.
-¿De que hablas?
-Ellos me dijeron que fueron quienes te secuestraron aquella vez.
-¿Qué dijiste?
-Dani. –Susurro.
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Dos Almas Y Un ¡Te Odio! ©
Teen FictionYovana es una adolescente de dieciséis años, alegre y muy risueña. Sus padres se divorciaron hace unos años y ella se fue con su padre a Barcelona, mientras que su hermana gemela; Zaira, se quedó en Sevilla con su madre. Antes de marcharse a Barcel...