Dos Almas Y Un ¡Te Odio! ©

Capítulo-64: "Aitana y Stefan"

YOVANA MONTECARLO

Entro en casa y voy directa a la cocina. Saco una jarra de agua y me sirvo una vaso. Mi hermana entra y se sienta en una de las sillas que rodean la isla.

-¿Desde cuando sales a correr por las mañanas?

-Desde los 14, es lo que hay si quiero estar en forma.

-Sube a ducharte que yo hago el desayuno hoy.

-¿Dónde están mamá y papá?

-Salieron temprano.
Subo a mi cuarto y me baño. Me visto y dejo la ropa sucia en el cesto. Cuando termino recojo el baño y salgo de el. Al instante doy un salto al ver a Daniel sentando sobre mi cama. El sonríe y cierro la puerta del baño.

-Tienes el pelo mojado. –Río y se levanta.

-Si mal no recuerdo ya tuvimos esta conversación. –Agarra mi cintura.

-Buenos días. –Besa mi mejilla.

-Contigo aquí buenísimos. –Beso su nariz.

Dani me coge en brazos y me deja sobre mi cama. Se sube sobre mi, sin dejar peso, y me llena la cara de besos. Río como una loca mientras el me hace cosquillas. Se detiene y aprovecho para coger aire. Se sienta y yo hago lo mismo.

-Tenemos que hablar, sobre lo de anoche. –Me levanto.

-No me lo recuerdes, que vergüenza dios mio. –Agarra mi mano.

-Tampoco fue para tanto, todos nos hemos liado con nuestra pareja en medio del bosque. –Ríe y me tapo la cara con las manos.

-Si no hubiera sido por que la policía llegó hubiera pasado. –Agarra mis manos y me sienta sobre sus piernas.

-El sexo es normal en una pareja, no tiene nada de malo. Además fuiste tu quién me "raptó" yo solo obedecí. –Lo empujo y me besa.

-¿Creés que pueda hacerlo?

-Por lo que ví noche, estoy seguro de que si. No te presiones cuando pase pasará, tu tranquila. –Asiento.

Me siento frente al tocador y Dani agarra mi cepillo. Muerdo mi labio para contener la risa y a través del espejo lo miro. Agarro mi móvil y lo grabo. Después bajamos a la cocina. Mi hermana esta de espldas, sentada en la isla y Jesús, a su lado pero en la silla.

-Ya pensé que no iban a desayunar.

-Lo mismo desayunaron, pero otra cosa. -Suelta mi cuñado y lo miro.

-Si cuando el niño nazca dices esas cosas delante de el te castro.

-¡Ni de coña! Eso no se toca. -Grita mi hermana y reímos.

-Cariño, con las cosas de comer no se juegan. –Ríe y nos sentamos.

Desayunamos entre risas y chistes malos por parte de ambos gemelos. Recojemos todo y salimos al jardín, Jesús y mi hermana pasean mientras Daniel y yo jugamos con peluche. El cachorro corre hacia mi chico y le lanza una pelota. Nos sentamos en una de las amacas que hay frente a la piscina.

-En dos semanas tengo cita con la Doctora, para la ecografía del primer mes ¿quieres venir?

-Pues claro que si. –Besa mi mejilla.

-¿Cómo te gustaría que se llamara?

-Si fuera niña Aitana.
YO: Me gusta, Aitana Oviedo Montecarlo. Suena bien. ¿Y si fuera niño? –Me sienta sobre sus piernas.

-No lo se. –Ríe y beso sus labios.

-¿Te gusta Stefan? –Río y me mira.

-¿Stefa? ¿Como el de "The Vampires Diaries? –Asiento y ríe.

-Prometo no enseñarle la serie hasta los 3 años.

Los dos reímos a la vez y acordamos que si es niña se llamará Aitana y si es niño Stefan. Rato después mis padres llegan e invitan a los chicos a comer. Papá nos dice que ha conseguido que lo trasladen aquí. Mi hermana y yo nos lanzamos sobre el y lo llenamos de besos.

-Hay algo mas. –Me siento.

-¿Pasa algo? –Asiente.

-En unos días será la primera vista. Tienes que declarar ante el juez.

-¿Tendré que verlos? -Trago saliva.

-Me temo que si.

-Nosotros estaremos contigo. –Mi novio agarra mi mano.

-¿Nos vamos ya? Se nos va a hacer tarde. –Miro a Dani.

-¿Dónde váis? -Pregunta Jesús.

-Al centro comercial. Quiero comprar el primer juguete para mi bebé, antes de que alguien se me adelante. –Ríe.

-Tener mucho cuidado.