Capítulo-73: "No es fácil"

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DANIEL OVIEDO

Continuo buscando casas pero ninguna me convence del todo. Mi hermano entra en el salón con unos papeles en la mano y suspira agobiado. Se sienta a mi lado y lo miro.

-Habla. –Suspira.

-No se que hacer.

-¿Exactamente a que te refieres?

-No estoy seguro de que medicina sea la carrera adecuada.

-¿Y según tu cual sería tu carrera adecuada? –Cierro el portátil.

-Algo relacionado con las empresas o tal vez derecho podría ayudarte.

-Debes escoger algo que te guste ati, no lo que necesiten los demás.

-Zaira me dijo lo mismo.

-Si de verdad te gusta y quieres salvar vidas, no lo pienses más.

Asiente y se levanta. Coge los papeles y sube las escaleras. Mi madre llega cargada con muchas bolsas y la ayudo a dejar todo en la cocina. Mientras guardamos todo hablamos acerca de la casa.

-¿Encontraste alguna?

-Hay algunas, pero no me convencen del todo.

-¿Y un piso?

-Decidimos que sería una casa, así tendría jardín y piscina para cuando los niños sean grandes.

-Pensáis en todo. –Sonríe.

-Supongo que cuando tienes delante a tus hijos, tan pequeñitos y que dependen solamente de ti pues maduras.

-Voy a preparar la comida. –Llaman al timbre.

Me dirijo hacia la puerta pero mi gemelo ya se ha adelantado. Sonrío y beso los labios de mi novia. Mis pequeños lloran reclamando su momento y los sacamos del cochecito. Jugamos con ellos y les damos de comer.

-La comida ya esta lista. -Avisa Jesús.

-Baja un poco la voz, los vas a despertar. -Regaño.

-Son unos dormilones, han salido a ti en eso.

-En eso y en casi todo, mio solo tienen los ojos. –Deja a Stephan en el moises.

-Me da que la princesita no quiere dormir. -Miro a mi pequeña.

-¿Cómo quieres que se duerma si hay que cambiarla? -Ríe.

-¿Te hiciste cacota y no habisas? –Río mirando a mi hija.

-Estáis fatal.

Yovana se lleva a la niña para cambiarla mientras nosotros ayudamos a poner la mesa. Deja a la niña en el moises y se sienta con nosotros. Mientras comemos uno de los bebés se pone a llorar, Stephan. Ella va a levantarse pero niego.

-Ya voy yo. –Cargo al bebé.

-Pero mirar que padrazo está echo mi hermanito.

-No puedo quejarme, me ayuda mucho.

-Si ya lo decía yo; cuando sea padre asentará cabeza.

-Seamos sinceros, tu pensabas que jamás asentaría cabeza. –Río.

-Si mal no recuerdo cuando Zaira y tu nos dijisteis del embarazo yo te dije; sabía que cambiarías.

Zaira se atraganta con el agua y sale al jardin, Jesús va tras ella. Suspiro y dejo al pequeño, ya dormido, de nuevo en el moises. Ellos vuelven y centran su mirada en la morena que esta a mi lado, callada y con la mirada fija en el plato.

-Yovana, de verdad lo siento. Siempre meto la pata. -Se disculpa mi madre.

-No tienes que disculparte por nada. Mi hermana y Dani tuvieron una relación, eso es un echo y todos tenemos que aceptarlo.

-No debí hacer ese comentario, de verdad que lo siento.

-No te preocupes.

-¿Estas bien? –Pregunto y ella ssiente.

-Necesito ir al baño. Permiso.

Suspiro y paso las manos por mi cara. Zaira no dice nada, y es normal. Jesús trata de sacar conversación pero es imposible, el ambiente esta muy tenso. Subo arriba y llamo a la puerta. La escucho llorar y entro. Ella se da la vuelta y la abrazo.

-Cariño. –Beso su cabeza.

-Perdoname. Te juro que trato de aguantarme, pero no es fácil.

-Lo sé, pequeña, lo se. –Me mira y beso su frente.

-¿Cuándo vivamos juntos todo seguirá igual? –Asiento.

-Por supuesto. Te seguire pidiendo citas, te regalaré flores y chocolates. Te robaré besos y te llenaré de caricias. La única diferencia es que al terminar el día no tendré que dajarte en tu casa, por que iremos a la nuestra y dormiremos juntos sin miedo de que alguien nos descubra.

-Te amo. –Sonrío y ríe.

Beso sus labios entre risas y le hago cosquillas. Ella ríe como loca y se sale corriendo del baño. La sigo hasta el salón y cuando la atrapo la beso. Mi hermano aplaude y lo miro mal. Todos reímos y tras terminar recogemos la mesa.

-Hermanita, yo de verdad –La corta.

-Prefiero no hablar del tema. .

Dos Almas Y Un ¡Te Odio! ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora