One-Shots • Harry Potter saga || Libro #1

52.2- Harry Potter

Quédate

BLAIR

Lo siento, Draco. Prefiero verte encerrado en algún cuartel seguro de la Orden del Fénix antes que torturado y muerto en el suelo de nuestra mansión. Incluso si eso significa que nunca más volverás a confiar en mí. Puedo vivir con tu indiferencia. No con tu muerte.

—Es un día hermoso, Blair —escucho una voz a mis espaldas cuando me encuentro frente a la gárgola de la entrada—, ¿no crees que deberías sonreír, en lugar de llorar?

—Profesor Dumbledore —me limpio las lágrimas con rapidez y él se detiene a mi lado—, yo... necesito hablar con usted. A solas. Es... importante.

Mis labios tiemblan, el nudo en mi garganta apenas me deja hablar. El viejo profesor asiente y me guía hacia su oficina, donde me ofrece asiento y unos caramelos que rechazo.

—Entonces... —en lugar de sentarse en su silla al otro lado del escritorio, se sienta en la que está junto a mí—, ¿en qué puedo ayudarte?

—Es... es sobre mi hermano...

Y le cuento todo.

Comienzo a hablar y no me detengo, así como tampoco oculto mis lágrimas, ni mi tristeza. Necesito su ayuda. Estoy poniendo toda mi confianza en él y espero que no me falle.

—No parece sorprendido. ¿Por qué no está sorprendido?

Él me dedica una sonrisa que me parece llena de lástima.

—Porque ya lo sabía, Blair. Voldemort no es el único con gente leal a él. Supe que tu hermano había recibido la Marca la misma noche en que la obtuvo, y supe de su tarea aún antes.

—Pero cómo...

Los únicos en la mansión aquella noche éramos mamá, tía Bellatrix, el señor Tenebroso y yo. Y a mí ni siquiera me dejaron estar presente cuando ocurrió la ceremonia.

—No importa quién. Ese no es el punto. Aunque, entenderás que debo preguntar, ¿por qué me pides ayuda ahora? ¿Por qué no antes?

—Anoche confirmé que mi hermano estuvo detrás de lo que ocurrió con Katie Bell. No podía venir ante usted sin estar segura.

—¿Eso es todo?

Me observa con esos ojos azules pálidos que parecen barrer mi alma, desearía que tía Bella me hubiese enseñado oclumancia tan bien como a Draco.

—Harry —susurro—. Hemos estado viéndonos... Se ha vuelto... importante para mí. No quiero que le pase nada. Y saber que hoy estuvo a punto de beber de esa botella...

—Entiendo —tampoco parece sorprendido de saber que entre Harry y yo hay algo—. Entonces, ¿debo suponer que tu lealtad cambió, Blair?

Me pregunto lo mismo. Y todo parece apuntar que sí.

—El mundo mágico que el Señor Tenebroso promete está muy lejos a lo que había imaginado. Dejó que se llevaran preso a mi padre, dejó que sus mortífagos entraran a nuestra casa y que mataran sobre nuestra mesa... No le importan las personas que son fieles a él. En cambio Harry... él se preocupa por todos a su alrededor. Se preocupa por mí, me quiere.

—Blair, ¿sabes qué trama tu hermano? ¿Sabes de qué forma intenta asesinarme?

—No... No quiere decirme. He intentado seguirlo algunas noches, pero siempre logra escabullirse.

—Mientras no sepamos qué planea, no podemos detenerlo

—Pero...

—Blair —me interrumpe—, si confrontamos a Draco ahora, Voldemort podría enterarse, y mataría a tus padres al saber que Draco fue descubierto y ya no le sirve.