One-Shots • Harry Potter saga || Libro #1

43- Scamanders

Nota rápida: hace unos días actualicé mi fanfic de Sirius (Finge que me quieres).

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Newt Scamander - Theseus Scamander

La segunda opción

LEAH 

Theseus sonríe coqueto antes de besarme con ansias y rapidez. Su beso es mejor de lo que esperé, intenso y húmedo. Sus manos en mi cintura alborotarían a cualquiera, y su mirada lujuriosa no profetiza una noche tranquila...

—Te amo, Leta.

¿Leta?

Oh.

No es a mí a quien besa, ni mi cintura la que rodean sus brazos sino a Leta, mi hermana.

—Yo también, Theseus —responde ella acomodándole el cabello. Y recién entonces reparan en mi presencia—. Leah, llegaste.

—Sí. La puerta estaba abierta, decidí entrar porque está lloviendo. Disculpen la interrupción.

—No es ninguna interrupción, estábamos esperándote —dice Theseus acercándose, tomando mi mano y dejando un beso sobre mis nudillos cual caballero que me hace suspirar—. Es un placer que nos acompañes esta noche. Tú y Newt, claro.

Miro a mi alrededor esperando encontrar al hermano menor de Theseus, Newt, pero no lo veo por ningún lado.

—¿Él no ha llegado?

—Temo que hoy tampoco vendrá. Me pregunto qué excusa me dará esta vez.

Theseus mueve la cabeza decepcionado y Leta simplemente desvía la mirada. Si Newt rechaza sus invitaciones a cenar es por simple incomodidad, ¿qué no es obvio? El pobre sigue tan enamorado de Leta como yo de Theseus y le duele verlos juntos y a punto de casarse.

Minutos después pasamos al comedor donde la cena transcurre de forma tranquila, sin incidente alguno.

—¿Sigues viéndote con Abraxas Malfoy, Leah?

—No, Theseus. Claro que no.

—Es una pena, él era un buen partido para tí —comenta Leta—. Guapo, con dinero...

—Con dinero o no, es un imbécil que le da demasiada importancia a la pureza de sangre y a su apellido. Si algún día me caso, será con alguien que me ame, no que me convenga, Leta. Que seas mi hermana mayor no significa que tengas que buscarme marido así que por favor, no vuelvas a presentarme chicos.

Theseus ríe, y su sonrisa me tranquiliza, eliminando cualquier atisbo de enojo que amenazaba con aparecer.

—Me gusta tu carácter, Leah, lo admito.

Y a mí me gustas tú.

—Por cierto, recuerda hacerte un tiempo libre la otra semana porque debemos ir a probarnos los vestidos —dice Leta—. El tuyo está listo, Leah, y créeme que quedó precioso. Se te verá espectacular y serás la dama de honor más hermosa del mundo.

—Sí, yo lo ví y está lindo —agrega Theseus—. Mi traje y el de Newt también están listos, pero dudo que pueda convencerlo de probárselo antes del matrimonio. ¿Habías escuchado de un padrino así de desinteresado, Leah?

—Newt es tu hermano, ya deberías conocerlo. Yo nunca fui cercana a él, pero recuerdo que era muy distraído. Tal vez olvidó que ustedes van a casarse, ¿no crees, Leta?