Fred Weasley
JESSIE
—¡George! ¡¿Has visto a Fred?!
George mueve la cabeza con un gesto negativo mientras le lanza un hechizo aturdidor a un mortífago cercano. Me sorprende que haya podido escucharme con todo el ruido que hay.
Las paredes se desprenden...
El humo y el polvo se elevan...
La sangre se esparce...
Y los cuerpos se amontonan.
—Mierda, Jessie... No creí que esta noche terminaría así.
Yo tampoco.
Fred y George me invitaron a cenar a su departamento pero en cuanto llegué, recibimos un mensaje del castillo llamándonos a luchar. Y como buenos Gryffindor, no dudamos en asistir a la que está resultando ser la mayor batalla dentro de esta guerra maldita.
George y yo nos afirmamos tras un trozo de pared para recuperar el aliento. Siento mi cuerpo adolorido por el impacto de maldiciones y golpes, y la humedad que se extiende en forma de sangre desde uno de mis labios me hace confirmar que mi rostro está hecho un desastre.
—Así que, ¿tú y Fred?
—No es momento para hablar de eso, George. No seas pesado y deja de molestarme.
—¡Pero si te encanta hablar de mi hermano! Y ahora más me aburrirás hablándome de él luego de que te pidió ser su novia.
Me quedo en silencio mirando la risueña expresión de George. ¿De qué demonios está hablando?
—¡Oh, no te hagas la tonta! Fred dijo que te lo diría... en la cena... Mierda, nunca hubo cena.
—¡¿Hablas en serio?! —George asiente apesadumbrado, y de inmediato siento los dolores desaparecen dando paso a una sensación de euforia difícil de describir. Mi corazón late con rapidez y no a causa del peligro, así que comienzo a correr tirando la mano de George y sacándonos de allí.
Tengo que encontrar a Fred.
—¡Vamos! Tengo... Tengo que encontrar a Fred... Tiene que decírmelo él.
Imagino sus labios sobre los míos luego de tantos años deseándolo, imagino la calidez y humedad de su boca abrazándome y llenándome de sensaciones agradables. Luego de años enamorada del pelirrojo más gracioso, inteligente y tierno, al fin corresponderá a mi amor.
Ya no sólo será mi mejor amigo sino también mi novio.
Vamos llegando al vestíbulo cuando un mortífago enmascarado se atraviesa riendo y agitando su varita, creando serpientes en el aire que amenazan con atacarnos con esos colmillos filudos y llenos de veneno.
Pero con un simple movimiento de mi varita, las serpientes se transforman en enredaderas de rosas que envuelven al mortífago hasta su inmovilidad, enterrándolo en el suelo entre los restos de escombro.
—De ahí no se moverá. Los aurores sabrán qué hacer con él más tarde —dice George recogiendo la varita del desconocido y rompiéndola—. Vamos, Jessie, ya casi llegamos a...
La voz de George es absorbida por un silencio abrumante y una tensión cargada de odio me recorre. Entonces, la voz fría y sin piedad del Innombrable recorre los terrenos del castillo en su totalidad:
—Han peleado bien —dice—. Lord Voldemort sabe apreciar la valentía. Sin embargo, han sufrido numerosas bajas. Si siguen luchando, morirán todos, y yo no quiero que eso ocurra. Cada gota de sangre mágica derramada es una pérdida y un derroche. Así que ordeno a mis fuerzas que se retiren. En su ausencia, ocúpense de sus muertos con dignidad, y atiendan a sus heridos. Y ahora me dirijo directamente a tí, Harry Potter: has permitido que tus amigos mueran en tu lugar en vez de enfrentarte personalmente conmigo. Esperaré una hora en el bosque prohibido, y si pasado ese tiempo no has venido a buscarme, la batalla se reanudará y yo mismo entraré en ella. Y mataré a todo hombre mujer o niño que se atreva a ocultarte de mí. Tienes una hora.
El silencio luego de esas palabras se desvanece como una sombra. El aire frío del próximo amanecer golpea mi rostro trayéndome de vuelta a la realidad, y poco a poco George y yo llegamos al comedor junto a un montón de sobrevivientes que cargan heridos y muertos.
Fred... ¿dónde estás?
—Si encuentras a Fred dile que estoy ayudando a Madame Pomfrey —exclamo alejándome de George cuando veo a la enfermera intentando mover a un chico herido para curarlo.
Me enfoco en ayudar a los heridos con mis conocimientos de medimaga en formación. Pasan los minutos y mi corazón se rompe al ver a varios conocidos y amigos fallecidos. No puedo creerlo. ¿Por qué ellos? ¿Por qué...?
—George, no te aparezcas así que me asustaste, ¿qué ocurre? ¿Encontraste a Fred?
Su semblante carente de emoción me preocupa, sus ojos rojos y lágrimas me asustan, y estoy a punto de pedirle una explicación cuando veo a Bill y Charlie cargando un cuerpo delgado cuyo cabello pelirrojo luce sucio y dañado. Y entiendo de inmediato de quién se trata al reconocer su chaqueta: yo se la regalé.
—No... ¡Noo...!
Corro hacia ellos y me detengo cuando dejan el cuerpo en el suelo. Intento tocarlo, pero no puedo. Él no es mi Fred. ¡Él no puede ser mi Fred!
—No, no tú... no tú... —acaricio sus mejillas aún tibias y le doy leves golpecitos esperando hacerlo reaccionar. Fred sólo está inconsciente. Seguramente él... él... recibió un golpe, eso es todo—. Por favor despierta... ¿Fred...? ¡Despierta!
Mis lágrimas caen libres a medida que mi llanto aumenta. Los minutos pasan y Fred no reacciona.
No se mueve.
No respira.
Ya no sonríe.
Y ya nunca más lo hará.
No alcancé a decirle que lo amo.
No alcancé.
—————————
¡Hola a todos!
Estaré publicando distintos one shots especiales y más cortos de lo normal sobre diferentes personajes con la temática de la Batalla de Hogwarts entre hoy y mañana en la noche. Sé que el 02 de mayo pasó hace días, pero no había tenido tiempo de revisar y publicar este contenido antes.
El siguiente es de Draco.
¡Disfrútenlos!
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One-Shots • Harry Potter saga || Libro #1
Fanfiction¡OneShots y mini series de diferentes personajes de la saga de Harry Potter! Las distintas historias de este libro cuentan con protagonistas con nombres específicos; no utilizo "(T/N)" ni "_____". #42 - historiacorta 07/Nov/2019 Todos los derechos a...