One-Shots • Harry Potter saga || Libro #1

18.5- Draco Malfoy

Antes de ir al capítulo, quiero agradecerles por la cantidad de comentarios que tuvo el 18.4 ¡porque fueron más de 60! De todas mis historias, ese es el capítulo que más comentarios ha tenido alguna vez y me hace muy feliz. Siempre los leo y trato de responderlos todos, me motivan y por eso les traje la siguiente parte en menos de una semana. 

Por cierto, el de la foto es Jake. Jeje. 

¡Ahora a disfrutar el capítulo y no duden en comentar!

——————————

—¿April? —preguntó Albus acercándose a su prima, que contemplaba ambas fotografías en silencio mientras Scorpius permanecía sentado en la cama frente a ella—. ¿Qué ocurre...? ¡April! —la rubia lanzó ambas fotos y salió corriendo de la habitación.

Scorpius tomó las fotografías y las comparó. Allí estaban los padres de April, abrazados en una foto, y en la otra sólo estaba Draco, en una posición muy similar a la primera foto, demostrando que ambas habían sido tomadas en el mismo momento, sólo que en una aparecía Hannah y en la otra no.

—Maldición... ¡No puede ser! —susurró Albus—, tu padre...

—Sí —dijo Scorpius con un nudo en la garganta—. Mi padre es también el padre de April.

•

—...y con respecto a las amenazas anónimas que llegan al ministerio, creo que no deberíamos preocuparnos. Todos los mortífagos están en Azkaban. De seguro se trata de algún estúpido haciéndose el gracioso para hacernos pasar un mal rato.

Hannah asintió de forma distraída, jugando con la comida de su plato.

—Has estado callada esta noche —dijo Jake tomando su mano sobre la mesa y dándole un suave apretón—. ¿Está todo bien?

—Sí...

—¿Problemas con April?

—No. Ella no da problemas, es una niña tranquila.

—¿Entonces? Sabes que puedes confiar en mí.

Hannah lo sabía, y confiaba en Jake. Llevaban un año trabajando juntos y conociéndose, desde que él había sido transferido desde MACUSA hasta la oficina de aurores en Londres.

Jake tenía su misma edad, era divorciado y tenía un hijo de diez años. Hannah siempre supo que él tenía sentimientos por ella, era un hombre bueno, amable, inteligente y muy guapo, pero desde el principio Hannah fue sincera y le dijo que no podía ofrecerle más que una amistad porque su prioridad era April.

Jake jamás la presionó, y todo fue una simple amistad entre ellos hasta la noche del cumpleaños de un colega, en el que ambos terminaron besándose en el interior del auto de Jake.

No tenían una relación formal, no aún, pero sí citas esporádicas como la de esa noche, en la cual cenaban en un exclusivo restaurante de Londres.

—El padre de April apareció —confesó Hannah de golpe, y Jake de inmediato se tensó.

—¿El imbécil que te abandonó?

—¿Cómo lo sabes?

—Ron lo dijo una vez, junto con una larga pila de insultos que no voy a repetir delante de ti porque eres una dama.

Hannah sonrió levemente.

—El punto es que apareció, y... trajo consigo un montón de recuerdos que había sepultado en el fondo de mi mente.