Capítulo 22

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La cena familiar fue bastante tranquila, Ryonosuke habló de su día en la escuela, como siempre, Min So hablaba de los últimos chismes de sociedad, Won-hae compartía opiniones políticas y administrativas con Young Soo... y Miranda comía, escuchando todo sin intervenir a menos que le preguntaran algo directamente.

Young Soo siempre trató de incluirla en las conversaciones... pero su madre la interrumpía, así que dejó de hacerlo para no incomodar a Miranda, no más de lo que ya estaba. Pero esa noche parecía no importarle si la incluían en la conversación o no. Prácticamente resplandecía. Y Young Soo tenía bastante curiosidad sobre eso... porque hasta ese momento ella siempre se mantuvo al margen de todo, su lado leonino aparecía cuando tenía que ver con Ryonosuke, en ese momento era una fuerza de la naturaleza, nada ni nadie podía con ella si se trataba de defender a su hijo.

Apreciaba ese lado leonino, la verdad. Era muy... atractivo.

-¿Me vas a mostrar lo que compraste, mami? Ya terminé mi postre.

-Sí, corazón.-contestó ella con una sonrisa que la hizo resplandecer aún más.

-¡Siii! Te espero en mi habitación, la abuela me regaló otro rompecabezas que podemos armar.

Ella soltó una risita cuando el niño saltó de la silla para dirigirse hasta las escaleras, subiendo los escalones con otros saltitos entusiastas.

-Apreciaría que me informara la próxima vez que salga de la casa, Miranda, especialmente si va a regresar tarde.-dijo Min So, evidentemente esperó a que el niño se retirara para lanzar la bomba.

-Lo haré, señora Park... aunque nunca antes manifestó un interés por mis actividades, por eso no consideré avisarle sobre mi salida esta mañana.

Young Soo se ahogó con su propia saliva, trató de disimularlo con una tos... hasta que vio a su padre, él apretaba los labios con fuerza, con un brillo divertido en la mirada.

Su madre parecía muy dispuesta a inflarse como un sapo enojado.

-Es sentido común, Miranda. No podemos retrasar la cena por usted.

-¿Aunque sólo llegué cinco minutos tarde?

No la provoques, leona, vas a hacer que ella también saque sus garras...

-La puntualidad es un requisito básico en una sociedad decente.

-Cariño...

Min So miró a su esposo, era el único con el poder de aplacarla.

-Creo que te avisé que Miranda regresaría para el horario de la cena, ella me informó de su salida en la mañana... y lo importante es que llegó ¿No? entiendo que quiera explorar la ciudad en soledad-añadió, mirándola con un brillo paternal- pero la próxima vez considere ir acompañada... solo por seguridad. Aunque esta zona es bastante segura... nunca está de más estar prevenidos.

-Lo haré, señor Park, gracias por considerar mi seguridad. Ahora... si me permiten, iré a jugar con mi hijo. La cena estuvo deliciosa, como siempre.

Se retiró con una digna y educada inclinación de cabeza, Young Soo tuvo que apretar los labios igual que su padre para no sonreír.

La leona sacó sus garras esa noche después de mucho tiempo... y no supo por qué, pero quería seguir viéndola por más tiempo...

-Uhm. Yo también me retiro, voy a jugar con Min ho un rato. No armo rompecabezas desde que era un niño... es una actividad interesante.

No supo por qué dijo eso, sólo quería llenar el silencio, uno donde su madre amenazaba explotar contra Miranda en cualquier momento, no obstante, no quería escucharlo. Esa tarea recaía en su padre, lamentablemente, ya que era el único que tenía la paciencia infinita para escucharla... y decir justo y necesario para calmar su ánimo explosivo.

Destinos enlazados ┃Latinas en Asia┃EN EMISIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora