2.6 - Hope

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Mer desayunaba en la cocina, sola.
Era casi el medio día y ella apenas despertaba.

Apenas y había podido dormir, pensando en por qué sus poderes no funcionaban. No sabía a quién recurrir, y comenzaba a aterrarse.

Estaba muy desconcentrada, que no se dio cuenta cuando Pietro entró a la habitación.

— Hola, preciosa — saludó felizmente, y se acercó a depositar un beso en su mejilla — ¿Cómo dormiste?

— Bien — asintió — ¿Qué tal tú?

— Bien. Desperté a las 7 de la mañana, y estabas muy dormida, así que no te desperté.

— Gracias por eso — sonrió ampliamente

Pietro se acercó, y suavemente colocó un mechón castaño detrás de la oreja de su novia, recargandose en la barra, para observar su rostro fijamente.

Sus miradas se conectaron, y una sonrisa boba se dibujó en los labios de Mer.
Dibujó un camino con sus dedos desde el hombro de Pietro hasta su rostro, y acarició su mejilla suavemente con su pulgar.

El ojiazul se inclinó hacia ella, y depositó un suave y lento beso sobre sus labios, para luego regalarle una sonrisa.

— ¿Cómo te sientes? — cuestionó el velocista

Mer sólo soltó un suspiro, y se encogió de hombros.

— Me siento tranquila porque sé que Ally estará segura aquí — explicó la castaña — Pero, culpable porque nada de esto hubiera sucedido si yo la hubiera ayudado desde la primera vez.

— No es tu culpa — negó suavemente — La primera vez ella te amenazó, y puso en peligro a muchas personas

— Lo sé, lo sé. Pero aún así, no podemos negar que pude haber hecho más por ella. — se encogió de hombros, y desvió su mirada a otro lado

Se sentía culpable y no lo podía negar. Aunque Ally parecía no ser la misma persona que hace casi un año la había tratado de matar para curarse, Mer sabía que ese tinte psicópata quedaba dentro de ella, y le aterraba que se saliera de control.

— Apenas tiene 21 años, y ya estuvo en la cárcel, y la mitad de los delitos de los que fue acusada, ella no los cometió — soltó Mer, cabizbaja — Todo esto se hubiera evitado si mis padres no la hubieran presionado tanto. Si tan sólo yo me hubiera quedado, tal vez hubiera sido diferente.

— ¿Tú crees? — inquirió Pietro, ladeando la cabeza hacia un lado — Porque yo creo que si te hubieras quedado con ellos, hubieran hecho contigo lo mismo que hicieron con Ally, y en ese caso, tendrían a dos pequeñas niñas haciendo el mal, convenciendolas de que están haciendo lo correcto.

— Tal vez, pero, al menos una de nosotras no estaría condenada de por vida.

— ¿Preferirías eso? — frunció el ceño, confundido

Mer lo pensó un segundo, y luego negó con la cabeza.

No. No preferiría cambiar nada.

— Tal vez no pudiste ayudarla al principio, pero, esta vez tienes la oportunidad de hacer lo correcto — habló Pietro con tranquilidad

— ¿Estoy haciendo lo correcto? — cuestionó, con inseguridad

— Yo creo que sí — asintió, y estiró su mano para tomar la de su novia, entrelazando sus dedos

Mer sonrió, y Pietro se acercó para dejar un beso en su frente.
La castaña intentó leer la mente de su novio, por curiosidad, pero simplemente no pudo hacerlo, y comenzó a preocuparse, más de lo que ya estaba.

𝗺𝗶𝗻𝗱𝗯𝗿𝗲𝗮𝗸𝗲𝗿 ⸺ pietro maximoff Donde viven las historias. Descúbrelo ahora