𝗺𝗶𝗻𝗱𝗯𝗿𝗲𝗮𝗸𝗲𝗿 ⸺ pietro maximoff

2.4 - Safe

Varias horas después, estaban de vuelta en el complejo, y un equipo de doctores ya los esperaba en la entrada.

Ally fue trasladada a una camilla, y de inmediato la llevaron a una de las habitaciones de la sala de emergencias.

Mer estaba al borde del llanto, aunque quisiera esconderlo, todos podían notarlo.
Le dolía ver a su hermana así, y lo peor era no saber por qué se encontraba en ese estado.

En el pasillo de la sala de emergencias, esperaba junto al equipo a que les dieran noticias de su estado, hasta que un doctor salió a hablar con ellos.

— La señorita Hawkins se recuperará pronto, esperamos que despierte para confirmar si no tiene lesiones cerebrales. —explicó el doctor, con total seriedad— Encontramos una herida profunda cerca de su oreja izquierda, puede ser que hayan extraído algún tipo de chip, tal vez quieran agregarlo a su reporte. Las heridas de su pierna son moretones que indican que forcejeó con alguien. También hicimos pruebas, como lo pidió Mer, y, Ally había estado tomando sus medicinas. Estamos en espera de más resultados, pero les avisaremos cuando puedan entrar a verla.

Los vengadores asintieron, y el doctor se retiró.

Mer le dedicó una mirada a sus compañeros, que la observaban con demasiada atención.

— Oigan, creo que deberían ir a ducharse, hacer los reportes o lo que sea que tengan que hacer —sugirió, tratando de sonar tranquila— Me quedaré aquí, y les avisaré en cuanto sepa algo más

— ¿Estás segura? —cuestionó Steve, preocupado

— Sí. Estaré bien, y estoy segura que Ally también.

— Bien —asintió el capitán, para luego acercarse y envolverla en un abrazo de aliento— Revisaremos el escaner de Red Wing, espero que encontremos algo. Te mantendremos al tanto.

Se dedicaron una sonrisa a medias, y luego los vengadores se retiraron del lugar, a excepción de Pietro, quien miraba a su novia con preocupación.

— Tú también deberías irte a descansar —sugirió la castaña, con una mueca

— No, gracias —negó suavemente, mientras se acercaba a ella— Estaré aquí hasta que tú te vayas de aquí

— Pietro, no has dormido en quién sabe cuántos días, estuviste despierto todo el viaje hasta aquí, golpeaste a muchos hombres y recibiste varios golpes ¿y aún quieres quedarte aquí a verme llorar? —cuestionó con un puchero

— Ay, corazón —soltó una risita suave— Parece que no me conoces. Nunca te dejaría sola. No importa si no he dormido en semanas, o si estoy más herido que tú, mientras yo siga de pie, tú siempre vas a tenerme para apoyarte.

Mer frunció los labios, en un puchero, y no pudo evitar soltar una lágrima, para luego lanzarse a los brazos de Pietro, quien la apretó hacia él con fuerza.

— Te amo, ¿lo sabías? —murmuró la castaña cerca de su oído

— Ya lo sabía —sonrió ampliamente dejando un beso sobre su cabeza

Cuando Pietro bajó sus manos por sus costados, pudo sentir algo húmedo sobre el traje de Mer, y de inmediato se separó de ella para revisar.

— Demonios, Mer, estás sangrando —anunció, asustado

— No, debe ser sangre de Ally, cuando la cargué yo...

— Tu traje está roto, esta sangre es tuya —afirmó, y de inmediato la cargó entre sus brazos, para entrar a la sala de emergencias.

— Está sangrando de su costado izquierdo —explicó a la enfermera que se acercó a ellos

— Pero, no me duele —Mer frunció el ceño