𝗺𝗶𝗻𝗱𝗯𝗿𝗲𝗮𝗸𝗲𝗿 ⸺ pietro maximoff

2.42 - Inquietud

Tres semanas después

Las últimas tres semanas habían sido una montaña rusa de emociones, desde discusiones, hasta llanto, y algunas veces risas sin sentido.

Los vengadores estaban atrapados en su propia culpa, y aún así, se intentaban convencer entre ellos de que no eran totalmente responsables de lo que había ocurrido.

"La guerra del infinito", así le llamaban a aquel suceso.

Se le había nombrado así entre la gente de redes sociales, y luego se había vuelto el nombre oficial en cada lugar del mundo.

Su significado comenzó refiriéndose a las gemas del infinito, pero algunas personas prefieren creer que es por el infinito dolor que dejó.

Allá afuera, la vida como se conocía ya no era la misma, y la gente se esmeraba por demostrárselo a los vengadores, quienes claramente, ya lo sabían.

Salir a las calles no era una opción para ninguno, sin embargo, alguien necesitaba hacer las compras de la semana, o se quedarían sin comer, y esa persona, era el más rápido de todos ellos: Pietro.

No era una complicación para él, aunque tuviera que dar varias vueltas para poder traer suficientes cosas para llenar la gran alacena del complejo.

Era un poco envidiado, porque era el único de los vengadores que podía salir a respirar otro aire que no fuera el mismo de siempre, aunque, para él, no era algo que lo llenara de satisfacción.

Normalmente llegaba, y en menos de un minuto, ya tenía todos los artículos de la lista acomodados en el carrito de supermercado, y luego de pagar, solía retirarse de ahí antes de que alguien lo reconociera.

Sin embargo, una de esas tantas veces, escuchó una conversación que desearía no haber escuchado.

Dos mujeres jóvenes, que se desconocían entre ellas, hablaban de cómo habían perdido a sus familias, y, antes de llegar a pagar a la caja, ambas se destrozaron en lágrimas.

Aquello estrujó el corazón de Pietro al grado de sentir como sus ojos se aguaban, sintiéndose contagiado por aquel sufrimiento.

Gracias a su velocidad, podía salir de esos momentos en un segundo.

Algunas cosas que Pietro había notado en las calles, era esos grandes letreros de protestas colgados en las paredes, y los folletos donde invitaban a las personas afectadas a grupos de apoyo emocional.

De pronto, se sentía atraído por aquella idea de asistir a alguna de esas sesiones de apoyo cerca de Central Park, hasta que se daba cuenta que podría ser incómodo para esas personas ver a un vengador llegar.
Después de todo, para las personas, ellos eran los culpables.

Sin mucho que poder hacer, todos los días, Pietro llegaba al complejo, intentaba contactar nuevamente a sus vecinos de Escocia, y luego de fracasar, iba a descansar junto a Mer después de un largo día lleno de pensamientos intrusos y mucho papeleo.

La última semana, Mer había añadido un artículo a la lista de compras, sin decirle a nadie para quién era.

Simplemente lo escribió con su mano izquierda, esperando que Pietro no distinguiera su caligrafía, aunque fue un poco difícil, debido a que era ambidiestra.

Cuando Pietro leyó "una prueba de embarazo" al final de la lista, su corazón casi se salía de su pecho, y su cabeza dio un vuelco cuando imaginó todas las posibilidades.

Trató de no hacerse ideas erróneas, pero es que, las cosas estaban casi claras.

Natasha era quien normalmente hacía la lista, pero ella había dicho abiertamente que no había posibilidad de tener hijos propios alguna vez, así que estaba descartada del radar de Pietro.