Lexi:
Ruedo los ojos al leer un nuevo post en el dichoso blog.
Hola neoyorkinos del Este es esa época del año otra vez. Cuando el simple acto de descender de una escalera significa que eres mujer. Así es, el baile de las debutantes. Y por lo que hemos oído, ha habido cambios en la alineación.
Odio esta maldita ceremonia o lo que sea, lo peor es que viene la abuela por lo que debo participar si o si. No tengo opinión, al menos no en esto.
Lo más trágico, tampoco tengo pareja porque no iba a asistir hasta esta mañana cuando Lily prácticamente me rogó que lo hiciera.
Sorpresa, Chuck ya esta reservado. Aunque se ofreció a botar su pareja por mi, no le haría eso a otra chica.
Siento como si fuera a ser subastada al mejor postor, malditas tradiciones de gente rica. Odio el baile de debutantes, es como si dijera "hola, estoy desesperada por encontrar un marido".
Cuento hasta tres mentalmente antes de ingresar al salón donde están todos los estudiantes bailando al ritmo del piano.
—¡Ahí esta mi magnífica nieta!
Volteo para encontrarme a CeCe caminando en mi dirección, una sonrisa radiante en sus labios antes de envolverme en un gran abrazo que me deja sin oxígeno.
No me había dado cuenta que Lily, Serena y Dan se estaban acercando, mamá rueda los ojos antes de alejarse por la falta de atención de CeCe. La abuela sujeta mi mano y con la otra acaricia mi cabellera rubia, es algo demandante pero aún así la amo.
—Hola, Serena —la saluda antes de voltearse para hablarle a una mujer pelirroja—. ¿Este lugar tiene un bar?
—No —responde ella horrorizada, evito soltar una carcajada.
—Debí saber que tenía que traer mi propia fiesta —ríe antes se fijar su mirada en el chico al lado de mi hermana—. Él debe ser Daniel.
Cierto, había olvidado que mi querida hermana quería presentar a su novio hoy.
—Dan, señora, Dan Humphrey —le tiende la mano—. Hola.
—Mi nieta me dice que estabas encantado cuando ella decidió no hacer su debut esta semana —dice con cautela—. A diferencia de Alexia, quien si se presentará —me mira con cariño—. ¿A todo esto por qué no estás ensayando?
—Hablemos de eso luego —le respondo con calma—. Deja que Serena hable un poco.
—Anda, Dan, dile lo que piensas —anima la rubia—. Ella ama la honestidad, está bien.
—Esto será bueno —digo divertida.
—Los cotillones se me hacen anticuados. Los remanentes de una era —dice, lo anima a seguir—. La gente gasta mucho dinero para que sus hijas bailen frente a otros para llamar la atención. Si se lo pide a Serena apuesto a que lo haría ahora, sin cobrarle.
—Los cotillones enseñan algunas gracias que las mujeres deben tener en su arsenal —le recuerda nuestra abuela.
—Yo creo que las gracias de Serena son espectaculares —menciona él—. Y apuesto que las de Alexia también.
—Además, abuela —hago una pausa—. Tú no has usado tus gracias hace tiempo, ¿o sí?
—Ven conmigo —sujeta mi mano—. ¿Qué pasa con Charles? ¿No iras con él?
—Mi decisión por ir fue a última hora —me encojo de hombros—. Estoy buscando a alguien que no sea Nate.
—¿Qué esta mal con Nathaniel? Siempre he pensado que son el uno para el otro.
ESTÁS LEYENDO
ꜱᴀꜰᴇᴛʏ ɴᴇᴛ | ɴᴀᴛᴇ ᴀʀᴄʜɪʙᴀʟᴅ ✓
FanfictionAlexia Van der Woodsen vuelve a Nueva York después de dos años en Italia y debe enfrentar de una vez por todas los sentimientos que tiene hacia Nate Archibald. Puede que al final, el deseo de ambos se haga realidad y su historia deje de ser un amor...