Cap 145; Calamidades

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Una hora mas tarde, Annie termino de vomitar todo lo que tenia dentro de su estomago vacio. Se sentía fatal y algo débil por haberse despertado tan de repente, pero al mismo tiempo se sentía feliz ya que su bebe aun vivía dentro de su vientre.

- ¡Annie! - escucho su nombre ser llamado detras de la puerta, algo lejano pero cerca, mientras pares de zapato venían corriendo en su dirección. - ¡Annie! - la puerta se abrió de golpe, revelando a su prometido alterado junto al resto de sus parientes.

Como dije antes; Archie estaba alterado, desesperado y preocupado cuando escucho la noticia de que su prometida habia despertado pero al verla allí sentada mientras acariciaba con gentileza su vientre, aquellas emociones negativas desaparecieron.

La piel blanquecina de su cuerpo estaba palida, sus mejillas y ojos estaban un tanto hundidas para revelar algunos huesos de su cara, sus labios estaban secos y partidos mientras que su cabellera negra parecía un nido de aves. Aunque ninguna de esas imperfecciones, le importaban al peli-lila quien corrio de inmediato hacia ella para envolverla con sus brazos.

- Estoy aqui, Archiebald. - la menor le aseguro, también envolviéndolo con sus brazos cuando lo escucho sollozar.

- Estas bien. - dijo entre lagrimas. Extraño esa voz, ese aroma, el hermoso color azul de sus ojos, la extrañaba a ella. - Estas aqui. - inhalo, depositándole un dulce beso sobre la frente de su amada. - ¿Como esta nuestra pequeña? - pregunto, sentándose al lado de la peli-negra mientras depositaba su mano sobre el vientre de su prometida.

- Esta bien, sigue creciendo. - respondio con una enorme sonrisa, acercándose a su novio. - ¿Y porque ustedes están empapados? - le pregunto al resto, la sonrisa aun sin desvanecerse de sus labios.

Las princesas se miraron entre si, ¿y ahora?

Candy aclaro su garganta. - Venimos, del entierro de padre. - respondio en tono apagado.

Annie se quedo en silencio, algo en shock. La enfermera le habia contado sobre el suceso de aquella noche, pero jamás, le informaron de que su padre habia muerto en aquella batalla. - Entiendo. - dijo finalmente, mordiéndose el labio inferior. - Fue lo correcto. - miro a su hermana menor, sabiendo quien fue ella quien decidio aquello.

T/N, viendo que su hermana le veia, desvio la mirada a otro lado mientras se daba regaños internos.

~

Para la hora del medio dia, Archie decidio quedarse junto a su prometida mientras el resto se fue al castillo con la noticia de que su tercera princesa habia despertado.

Tambien, tenían pensado preparles platillos a los tortolos al igual, que también querían celebrar el año nuevo que se aproxima en unas pocas horas.

Un dia oscuro, que logro aclararse en minutos.

Pero otros, no sentían la misma felicidad que los demás, si no que sentían algo de culpa.

- Señora Pony. - llamo Anthony, él y su primo junto a las tres princesas ayudaban a la mayor en la cocina. - ¿Que cree que le ocurre a T/N? - cuestiono, asintiendo en la dirección de la nombrada quien batia claras de huevos con algo de arrechera. - No se ve bien. - trago ondo.

La de mayor edad miro de ojo a la cuarta princesa, para luego soltar un suspiro. - Ya saben como es ella. - volvio su atención al trozo de carne que estaba cortando. - Temperamental. - añadió, hechando la carne dentro de un sarten con hiervas y especias para luego abrir una cerveza y bertirla sobre la carne.

- Eso ya lo sabemos, señora Pony. - respondio el tres ojos, hechando pasta 'e tomate sobre la pasta que acaba de colar para luego comenzar a mezclar. - Pero no se, señora Pony. Esta, algo rara, desde que regresamos del hospital. - comenzo a rallar queso blanco sobre la pasta.

La Pequeña Rebelde Del Grandchester (G. Terry x Lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora