Cap 94 Excepciones

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Punto de vista de Dimitri

Todo mi cuerpo temblaba de rabia. Vi el puto rojo y deseé poder rodear el cuello de ese cabrón con mis manos y apretar.
¿Por qué coño estaba Maddie tan asustada? ¿En qué estaba pensando el cabrón?
¿Podéis venir Ellie y tú a mi despacho? Me conecté mentalmente con Will mientras veía salir a esos tres cabrones.
¿Va todo bien? preguntó Will preocupado. ¿Ha terminado ya la reunión?
No. Ven aquí.
Corté nuestro enlace mental y me centré en Maddie. La subí a mi regazo y la abracé con fuerza.
—Princesa...—, hablé, pero ella me interrumpió.
—Lo siento mucho—, murmuró. —No podía soportarlo más. No podía seguir escuchando eso. No quería estropear la reunión. No quería...-.
La interrumpí levantándole la cabeza y depositando un suave beso en sus labios.
—No has estropeado nada, princesa—, le dije. —Deberías habérmelo dicho antes. Deberías habérmelo dicho en cuanto ocurrió. Habría terminado la reunión inmediatamente—.
Le acaricié la mejilla y le besé la punta de la nariz.
—Tú eres lo primero, Madeline—, añadí. —Tú siempre eres lo primero, mi amor-.
Me importaba una mierda aquella reunión. Maddie estaba asustada y yo haría absolutamente cualquier cosa para quitarle ese miedo.
La puerta de mi despacho se abrió y Will y Ellie entraron. Ambos tenían caras de preocupación.
—¿Qué ha pasado?— preguntó Will, mirando de mí a Maddie.
¿Están delante de mi despacho? le pregunté a Will a través de nuestro enlace mental.
Sí. Dijo él.
Cierra la puerta y siéntate. Le dije.
Hizo lo que le dije y se acercó a mi escritorio. Ellie ya estaba sentada en un sillón y miraba a Maddie preocupada.
—¿Qué demonios ha pasado?— Preguntó Will mientras se sentaba.
Besé la sien de Maddie y respiré hondo.
—Maddie podía oír los pensamientos de Kendrick—, dije en voz baja.
Mi despacho estaba insonorizado, pero aun así no quería arriesgarme.
Los ojos de Ellie se abrieron de par en par. Will jadeó en voz baja.
—¿Qué? murmuró Will. —¿Cómo? Pensaba que no podía oírlos cuando estaba contigo—.
—¿En qué estaba pensando?— preguntó Ellie al mismo tiempo.
Miré a Maddie y vi que cerraba los ojos y tragaba saliva. ¿En qué coño estaba pensando? ¿Estaba pensando en hacerle daño? Si la respuesta a esa pregunta era afirmativa, iba a matar al cabrón.
Skol gruñó y sentí su ira palpitando en mi interior.
Pregúntale a Skye—, le dije. Maddie probablemente no me lo dirá. Querrá protegerme.
'Estoy en ello', murmuró Skol.
—¿Cómo es eso posible, Maddie?—. preguntó Will. -¿Es la primera vez que pasa algo así?—.
Maddie suspiró y negó con la cabeza. Todo mi cuerpo se congeló.
—¿Qué?— murmuré. —¿Pasó antes? ¿Podías oír sus pensamientos antes?—.
Maddie me miró y negó con la cabeza.
—No—, dijo en voz baja. —Ésta era la primera vez que podía oír sus pensamientos—.
Arrugué las cejas, confundido.
—¿Pero podías oír los de otra persona mientras estabas con Dimitri?—. preguntó Ellie, haciendo que Maddie la mirara.
Maddie asintió y mi sangre empezó a hervir. ¿Por qué no me lo había dicho? ¿Los pensamientos de quién podía oír mientras estaba conmigo?
—¿De quién?— le preguntó Will.
Estaba demasiado enfadado para hablar. Maddie me miró y respiró hondo.
—De Janet—, dijo en voz baja.
¡¿De mi madre?! ¡¿Cuándo?! ¿Por qué no me lo dijo?
Lo siento mucho, Dimitri. Me vinculó mentalmente y pude oír el miedo en su voz. Por favor, no te enfades. Por favor, no te enfades.
Mi corazón se apretó dolorosamente y tiré de ella hacia mi pecho.
No estaba enfadado con ella. Estaba enfadado con toda la jodida situación en la que nos encontrábamos. Ella temblaba y al instante quise arrancarme el corazón. La había asustado.
Lo siento, princesa. Le dije. No estoy enfadado contigo, ¿vale? Por favor, no me tengas miedo.
Me rodeó con sus brazos y sentí que se relajaba un poco.
No te tengo miedo. me dijo. Sólo odio cuando te enfadas.
Le besé la sien y le pasé la mano por la espalda.
-¿Cuándo pasó eso, Mads?— preguntó Will, interrumpiendo nuestro momento.
Maddie levantó la cabeza y lo miró.
—Cuando Dimitri y yo fuimos a hablar con nuestros padres—, dijo.
—Yo quería hablar con Mike y Janet. Quería empezar de nuevo.
Ella empezó a gritar y entonces Skol se hizo cargo de Dimitri y nos fuimos—.
Recordé aquel día. Skol estaba jodidamente cabreado. Apreté la mandíbula e hice que me mirara.
—¿Por qué no me lo dijiste?—. Pregunté, intentando mantener la calma.
Se encogió de hombros y enarcó las cejas.
—No lo sé—, dijo. —Han pasado muchas cosas desde entonces y lo había olvidado por completo. Ni siquiera lo recordaba hasta que escuché los pensamientos de Kendrick y pensé que era la primera vez que ocurría algo así.—
—Así que Kendrick y Janet son excepciones a la regla—, murmuró Will, haciendo que lo mirara. —Me pregunto por qué será-.
—¿Sus pensamientos tenían algo en común, Maddie?— preguntó Ellie.
Maddie se estremeció un poco. Apretó los puños y tragó saliva.
—¿Skol?—, llamé a mi lobo. ¿Te lo ha contado?
Skol guardó silencio. Ni siquiera me había dado cuenta de que no podía sentirlo tan bien.
—¿Skol?—, volví a llamarlo cuando no respondió.
Dame un momento para calmarme', murmuró. Voy a matar a ese cabrón-.
Debió de apartarse para evitar que se apoderara de mí.
Sí-, murmuró Skol. Necesito un momento.
¿En qué coño estaba pensando?
Skol gruñó y yo respiré hondo. Realmente necesitaba dejar que se calmara un poco porque lo mataría si tomaba el control. Me impresionó su capacidad para contenerse y pensar racionalmente.
Sabía que matar a Kendrick provocaría el caos. Me impresionó que pudiera apartarse para calmarse y controlarse así. Era un animal, después de todo.
Eres un animal', dijo gruñéndome. Puede que sea un lobo, pero también soy un alfa. Tengo más control del que crees.
Lo siento -dije-, ¿podrías decirme lo que te dijo Skye?
Skol gruñó y empezó a hablar. La ira que sentía hacia él crecía con cada palabra que Skol pronunciaba. Palpitaba en mi interior y amenazaba con explotar. La rabia me cegaba.

Mi hermanastro es mi mate Donde viven las historias. Descúbrelo ahora