(2°) 23.Pillados

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Fuego, agua, ángeles, es lo único que mi mente procesaba, me estremecí, que significaba todo esto?? Un hueco negro y profundo, otra vez no, no de nuevo, sueño pensé, otro sueño.

Una habitación, paredes lilas y humedad haciendo que la pintura se cayese a tiras. Una cortina de seda muy fina color azul se batía a la par de las corrientes de aire, observe mejor esa habitación, había estanterías de madera blanca cochambrosa donde las baldas no parecían muy estables, bueno, en realidad nada de esa habitación parecía estable. Se oía un llanto, el llanto de un bebe, temblé de arriba abajo. Al lado de la ventana un pequeño bulto estaba envuelto en una mantita blanca de lana y lloraba y lloraba, pero que...? Se estaría congelando!!! Fui a cerrar la ventana pero cuando retire la cortina había una pared de ladrillo con el mismo color que las paredes del cuarto, todo el cuarto se volvió oscuro y volví a temblar, una pequeñita luz iluminaba la poca penumbra que había en la sala, dos ojitos dorados me miraban con tristeza y sufrimiento, el bebe, mi bebe, no estaba, donde estaba?? Cerré los ojos y cuando los abrí un gran pasillo se abría ante mi, el pasillo de los cuadros Herondale, al final del pasillo se encontraba una cuna amarillo pálido, sollozos, llantos de un bebe es lo que me hizo correr por el pasillo pasando por todo los cuadros familiares pero cada vez que avanzaba el pasillo se hacia mas largo haciendo que la cuna quedara mas alejada de mi, una pared de fuego se interpuso en mi camino. Mire a todos lados, Edom. La anterior cuna estaba rodeada por un circulo de fuego celestial, me gire, un cuadro, eramos yo y Jace abrazados, una incrispcion debajo, Clarissa Herondale viuda de Jace Herondale viuda?? Que? Jace? Que le había pasado a Jace? Empezaba a sudar y lágrimas picaban en mis ojos, una gran lapida se alzó a mis pies, era de 5 metros y las palabras me perforaron la mente
Jonhatan Herondale

Asesinado por su mujer al querer quitarle su primer hijo

Que estaba pasando?? Mi respiración se aceleraba, una fina capa de agua haciendo un muro se puso ante mi antes de que una inundación me arrastrara, me ahogaba no podía respirar cerré mis ojos, los volví a abrir. Mi cuerpo estaba hecho de agua, una luz, me gire y un Jace hecho especialmente de fuego apareció en mi campo visual, extendió su mano y yo también extendí la mía con el fin de tocarla, cuando nuestras llemas de los dedos se rozaron un corazón hecho mitad fuego mitad agua apareció entre nuestras manos que fue desvanecido al instante por una nube de vapor. Jace se fue desvaneciendo.
Ante mi se encontraba el lago Lyn, el cielo estaba envuelto en chubascos y el agua se movía intranquilamente. En la orilla estaban Valentein, Sebastian y Jack sonriendome torcidamente, sin darme cuenta grite, grite con todas mis fuerzas. En un remolino de agua un ángel se alzo sobre el lago. Jace, tenia alas de ángel y una sonrisa escalofriante. Me miro y dijo un es mio con una sonrisa, llevaba un bebe de ojos dorados y unos mechones pelirrojos en brazos, intente ir pero otro muro de fuego se interpuso, empecé a llorar, mi respiración era acelerada. Observe como Jace con el bebe en brazos se daba la vuelta desvaneciéndose en una cortina de fuego y agua.

Me desperté, mis manos sudaban y mis lágrimas caían por mis ojos, sentí unas manos en mis hombros, abrí mis ojos que me escocian infernalmente, Jace, estaba mirándome preocupado, trague saliva y rodee mis brazos en su cuello en un abrazo, el me envolvió mi cintura y oculto su rostro en mi cuello, lo apreté mas a mi sin parar de llorar, el apartó su rostro de mi cuello y me miro a los ojos. Alzo una de sus manos y me acaricio mi mejilla húmeda y con su pulgar me aparto las lágrimas.
-Shhh, solo ha sido un sueño.-susurro y un llanto se abrió paso en mi garganta quebrandome la voz, quería que eso parara, no quería desmoronarme, pero mi cuerpo no tenia el mismo plan.
-No llores por favor, me parte el alma.-dijo con voz apagada, tampoco soportaba ver a Jace así, siempre parecía animado e indiferente y eran pocas veces en las que se mostraba vulnerable.

Cada vez me iba calmando mas, cerré los ojos y los volví a abrir.
Estaba en una de las camas de la enfermería del instituto, Jace estaba tumbado a mi lado, mi rostro estaba oculto en su cuello y el me rodeaba los hombros mientras yo le rodeaba la cintura. Había dejado de llorar solamente porque su cercanía me reconfortaba. Echaba de menos estar así con el. Alce mi cabeza de su hombro y le mire a sus ojos, dorados, brillantes y hermosos. Se me encogió el corazón y cerré los ojos, me beso la frente y mi cuerpo se tranquilizo.
-Que has soñado?-pregunto con la barbilla sobre mi cabeza, trague saliva, si le contaba lo que había soñado que pensaría? Mi cabeza estaba a punto de explotar ante las imágenes de mi sueño.
-Con un bebe.-le dije, no quería mentirle, pero tampoco tendría que decirle toda la verdad. Sus ojos brillaron.
-Un... bebe?-carraspeo y me volvió a mirar.-Que pasa quieres tener un nuevo hermanito.-me susurro y le di un golpe en el hombro, siempre tan irónico, pero me saco una sonrisa.
-Ojala fuera algo asi.-susurre con una sonrisa mirándole, le acaricie la mejilla con las llemas de mis dedos.
-El sueño era algo extraño, las imágenes son borrosa, pero recuerdo...-dije acariciando la comisura de sus párpados entrecerrados recorriendole toda la forma de sus ojos como si lo estuviera dibujando.-ojos dorados, pequeños y brillantes ojos dorados llenos de curiosidad y vulnerabilidad.-dije y acaricie su sien derecha. El me miraba muy directamente y con una intensidad que parecía estar partiendome por la mitad, acuno mi rostro en sus manos.
-Que he hecho para merecerte?-me pregunto cerrando los ojos y volver a abrirlos, le sonrei y gire mi rostro para besarle la palma de la mano.
-Has convertido mi vida en un cuento de hadas.-le dije sonriendo y una pizca de ironía cubrió mis palabras, Jace sonrió.
-Un mundo de cazadores de sombras.-dijo y le mire a los ojos, me acerque a su rostro hasta que estuvo a milímetros de el mio, se inclino y me beso, agarraba los puños de su jersey mientras movía sus labios a sincronización de los mios, me apegue mas a el y Jace profundizo el beso y exploro mi boca que ya la conocía cada rincón, hice lo mismo y ambos nos estremecimos en los brazos del otro.
El ruido de la puerta hizo que nos separemos.
-Pero que..?-pregunto alguien ambos nos giramos y vimos a Magnus2 entrar en la estancia con los ojos abiertos de par en par.

Cazadores de sombras: ciudad de los recuerdos guardadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora