Cazadores de sombras: ciudad de los recuerdos guardados

62.Tentación

La sala de los acuerdos estaba inundada en susurros disipados en la distancia, la luz mágica iluminaba la penumbra de la estancia. Robert Lightwood estaba en el estrado ante la cónsul Jia y los representantes de los subterráneos, Alin y Helen estaban situadas en la primera fila junto a los Blackthorn y Emma Cartairs, Clary no les veía desde su boda con Jace hace más de una semana, me enderece en mi asiento al lado de Jace y respire hondo.
-Queridos nefilims y subterráneos del mundo de las sombras, se que no ha habido ninguna reunión aún habiendo indicios de violencia entre subterráneos de la organización pandemónium. Hemos enviado a algunos miembros del cónclave de Nueva York al club pandemónium para poder infiltrarse dentro de la organización. No había ninguna prueba que indique que hubiera alguna organización. Suponemos, que Jackson ha escapado y se ha ido a algunos de sus locales secretos. Todas nuestras fuerzas están buscándolo y esperó que dentro de poco tengamos noticias.-dijo Robert y una chica de pelo castaño claro con una cicatriz en su cuello se levantó de su asiento.
-Como sabemos que Jackson no es una amenaza sicópata como Sebastian?-preguntó y me tense en el momento, Jace me cogió la mano en señal de tranquilidad pero apenas lo sintió, la sala volvió a inundarse en susurros, me mordí el labio mientras miraba a todos lados, Jia ocupó el sitio donde estaba Robert para poder hablar.
-Eso no tiene nada que ver señorita Fairblood, Sebastian nació con sangre de demonio en su interior y se crió durante toda su vida con Valentine.-dijo Jia y ahora fue Jace el quien se tensó. Las próximas horas de la reunión fue como una resaca para mi, apenas consciente y doloroso. Cuando salimos del Gard tuvo que pasar un rato antes de que pudiera enfocar del todo la vista de Alacante, mire a Jace y entendió de que quería irse a casa, asintió y me cogió la mano.

Cuando llegamos abrimos la puerta y dejamos nuestros abrigos en el perchero de la entrada, mire un momento el enorme vestibulo con una preciosa lampara de araña adornando el techo y las grandes escaleras con barandillas doradas, suspire y me dirigí a la cocina junto a Jace, entre y me iba a preparar un café.
-Quieres uno?-dije con una media sonrisa a Jace que asintió sentándose en un taburete de la isla y apoyando sus codos.
-Esperó que esta historia de Jack no dure mucho.-dijo Jace con un suspiro mientras se pasaba una mano por su pelo desordenandolo. Suspire mientras acababa con los cafés y los puse en la isla, Jace tomó uno y me dedicó una sonrisa, me senté a su lado y casi sin evitarlo le coloque mejor su pelo desordenado, disfrutando del tacto suave de su cabellera dorada. Tenía la mirada pérdida mientras removía su café, le entendía, esa persona era su hermano mayor que el nunca había conocido. Entrelaze mi brazo con el suyo y apoye mi cabeza en su hombro, le acaricie el contorno de su fuerte brazo tiernamente y le bese la mejilla para darle consuelo. El sonrio, levante mi cabeza de su hombro y le di un sorbo a mi café, desenrede mi brazo del de Jace y me levante.
-Hoy hago yo la comida.-dije y me miró con reproche.
-Pero hoy me tocaba a mi.-dijo y sonreí.
-A mi no me importa, ya harás la cena, recuerda que después tenemos que ir a matar demonios al bosque de Brocellin.-dije y el sonrió, se levantó de su asiento y le abrazo. Cuando me soltó me gire para ir a cocinar.

La noche de un duro día cayo ensombreciendo el cielo con las estrellas iluminándolo. Despues de ducharme y quitarme el icor de demonio me fui al vestidor para ver que podría ponerme. Jace tenía razón, a penas había algo más largo que no fuera de medio muslo, se maldijo para sus adentros de porque Izzy se tuvo que ocupar de su ropa al preparar la casa, tuvo que ponerse un camisón rosa de seda de medio muslo, suspire y salí del vestidor, Jace estaba en la cama con un pantalón de pijama y su formado torso al descubierto, estaba leyendo un libro y al oír la puerta del vestidor levantó la vista y me miró con ojos saltones, rode los ojos y me tumbe a su lado, me atrajo hacia el y me dio un beso apasionado, lo profundizó pero me separe con una sonrisa coqueta, puse mi cabeza en su hombro.
-Que lees?-le pregunte viendo el libro en su regazo, Jace lo cogió abriéndolo por la página donde estaba.
-Grandes esperanzas de Charles Dickens.-dijo mientras lo observaba, Clary le miró sorprendida al ver la antigüedad del libro, Jace lo cerro y lo puso en la mesita de noche, empezó a acariciarme la pierna suavemente subiendo, me estremecí.
-De que va?-pregunte poniendo mi mano sobre la suya, sus ojos relucieron en los suyos.
- De un aprendiz de herrero cuya aspiración pasa a ser un caballero, describiendo su vida desde su niñez hasta su madurez. Se puede decir que se trata de un Bildungsroman o novela de aprendizaje. No me mires así, es muy interesante.-me dijo y yo sonreí, me recoste en la cama y aparte la mano de Jace para poder taparme con las sabanas, me acurruque en el.
-Podrias contármelo?-pregunte con una sonrisa inocente, el rio y rodeo mis hombros con su brazo, cogió el libro y lo abrió por la primera página. Yo escuchaba atentamente mientras contaba la historia de Pirrit, tan sólo leer el primer capítulo unos escalofríos recorrieron mi cuerpo.
-Que cruel!! Como puede pedirle eso a un pobre muchacho!-dije indignada, Jace sonrió tristemente.
-Creo que Dickens intenta explicar que la desesperación y la soledad puede acabar con el razonamiento de alguien.-dijo Jace, yo bostece y me acomode mejor en el, Jace sonrió con ternura, dejó de nuevo el libro y apagó la lámpara de noche, se tumbo conmigo a su lado y me rodeo con sus fuertes brazos, no paso ni 5 minutos hasta que me dormi.

Awww si si muy tierno pero en el próximo cap sera estresante y abrumador creerme desde el próximo cap las cosas se complican y muuucho. Gracias por vuestro apoyo!!!! Quería deciros que he escrito otra nueva novela llamada Duro pero valioso, esperó que os paséis y nos leemos en el próximo cap. Aio; )