Cazadores de sombras: ciudad de los recuerdos guardados

53. Primera guerra

Viva las 8.000 lecturas VIVA!!! Decirme si mañana queréis que suba cap y que EMPIECE LA GUERRA!!!

Estábamos en el Gard esperando a abrir el portal. Cuando vino la cónsul, Clary se preparó poniéndose el traje de combate y equipándose con un montón de armas. Llevaba dos vainas de espadas, la forrada en guilis y Heosphoros, también llevaba unas cuantas dagas y un par de cuchillos serafines y en mi bota llevaba mi estela por si acaso. Todos los nefilims estaban por todo el Gard, algunos andando con nerviosismo, otros midiendo estrategias y otros parecían bastante relajados. Simon, Clary y Magnus estaban apoyados en una pared viendo el panorama. A la distancia vimos a los Lightwood, Robert estaba delante de Jace, Maryse, Izzy y Alec. Los chicos miraban con frenesí y cuando les vieron fueron a su lado.
-Clary.-dijo Jace mientras la abrazaba, Clary notaba que Jace estaba muy cariñoso, no le molestaba pero notaba que le ocultaba algo, al instante los demás se unieron.
-Ganaremos.-dijo Edward con seguridad y Carla sonrió.
-Pues claro, vamos a patear algunos traseros de hada.-exclamó con fiereza Carla y sonreí, en la distancia apareció Jia.
-Jace, Clary tenéis que atravesar primero.-dijo Jia haciendo un ademán con la mano para que la siguieran y ellos lo hicieron, mientras pasaban por la horda de cazadores de sombras que le miraban muy fijamente Clary se sintió intimidada y bajo la cabeza, cuando llegamos al portal lo observe durante un segundo, estaba lista, miro a Jace que también miraba el portal, silenciosamente me cogió la mano y ambos saltamos dentro del portal.

Impacte fuertemente en el suelo cubierto por musgo, la quemadura ya había desaparecido pero aún le dolía bastante, cerré los ojos fuertemente y me levante, reconocí el lugar como uno de los túneles que llegaban a la sala del trono, había enredaderas decoradas en las paredes y el aire olía a sabía de árbol. Me gire y vi a Jace impactando en el musgo del suelo, se incorporó mientras se levantaba y miraba el lugar en silencio, nefilims empezaron a salir en un fantasmal silencio. Jia en cuanto nos vio se acercó a nosotros y nos habló en susurros.
-Ir vosotros primero, hacer vuestro plan y luego atacáremos.-dijo, mire a nuestros amigos que nos dieron una sonrisa de ánimo. Asentí y junto a Jace nos dirigimos a la cortina de enredaderas, al principio sólo vimos un grupo de hadas, pero al entornar un poco los ojos vio que también había elfos, nixies... Todo el pueblo mágico y en el trono yacia la reina seliee, cuando la vi se me helaron las venas, era la misma reina seliee que había visto la última vez pero había algo diferente en ella. Mire a Jace, el tenía la espada forjada en además y yo empuñada la forjada en guilis, nos dedicamos una última mirada antes de salir. El reino mágico se puso alerta, la tensión se respiraba en el y ambiente nada más vernos y la reina seliee sonreía con malicia.
-Hola queridos nefilims, que alegría teneros aquí.-exclamó con una sonrisa y yo seguía empuñando alerta mi espada savia que veníamos pensó, tiene algo preparado.
-Clarissa, Clarissa.-dijo la reina bajando de su trono y acariciando un mechón color fuego, Clary se apartó poniendo su espada ante ella, la reina seguía sonriendo, había algo raro en ella.
-Crees que no se vuestro plan? Pretendéis desterrarme por mi gente?-se río.-Estupidos mortales.-mascullo.-Pero si tu y tu noviecito pasáis dos pruebas yo iré a donde vosotros queráis.-dijo ladeando la cabeza, creía que una guerra era más fácil que hacer unas pruebas que la reina había creado para ellos, especificamente si no sabían que era, mire a Jace que tenía la mandíbula tensa y los dientes apretados, miró fijamente a la reina.
-De acuerdo.-dijo entre dientes y yo le mire sorprendido y la reina lució una sonrisa burlona mientras hacia un ademán con la mano para que un caballero hada se acercara, le susurro algo, el caballero hada asintió y se fue.
-Como sabéis el fuego celestial puede moldear cualquier metal, incluido el adamas.-dijo mientras un caballero hada ponía un bloque de adamas del tamaño de una mano puesta en una pequeña mesita.-Quiero que hagáis desaparecer este bloque de adamas.-sonrió.-mediante agua.-dijo y abrí la boca sorprendida, ni siquiera sabía que el adamas podía oxidarse, sabía que no se lo pondría fácil.
-Eso es imposible.-dijo Jace y yo concorde con el, eso era prácticamente imposible, la reina ladeó la cabeza.
-Ya os rendís?-preguntó burlona y en ese momento supe que no había nada que perder, se dijo y empezó a acercarse al bloque, Jace parecía que me lo impediría pero se quedó clavado en su sitio. Cuando ya estuve frente al bloque puse una mano sobre el y una descarga eléctrica le recorrio todo su brazo y casi ahogó un grito, cerré los ojos he intente que el dolor no se reflejará tras mis quejidos, la cabeza empezó a dolerle infermalmente y un dolor punzante le atravesó el estómago, no dejes que esto te pare dijo la voz de Crelina en su cabeza, sus rodillas iban perdiendo fuerza y me desplome de rodillas al suelo apretándose la otra mano en el estómago con fuerza, sentía que no podía más que la oscuridad se la tragaría en cuestión de segundos, de repente abri ojos y era como si todo se tornará en silencio. Todos los nefilims habían salido y empezaron a pelear mientras Jace luchaba contra unos caballeros hadas que intentaban sujetarle y en cuanto abrí los ojos era como si todo se hubiera pausado, me miraban muy finamente y mire mi mano echa un puño cerrada fuertemente, lo abrí y un polvo cobre cayo de mi mano, se había oxidado!! La euforia recorrió mi cuerpo, los guardias soltaron a Jace que se agachó junto a mi y me estrecho entre sus brazos mientras me susurraba palabras tranquilizadoras, mire a la reina seliee que parecía nerviosa, ahora sería peor, seguramente ahora nos pondría algo imposible de hacer, cerré mis ojos y me acurruque en Jace.