(2°) 10.Test

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Porque subo hoy? porque me apetecía subir este cap y no pude esperar
Estaba sentada en el alfeizar del salón del apartamento viendo a Jace que acababa de salir a las frías calles de febrero en Nueva York, se había subido el cuello de su chaqueta de cuero cubriéndole medio rostro, tenia ganas de bajarle un abrigo o algo que abrigara mas que una estúpida chaqueta. Tenia un humeante café caliente entre mis manos y una chaqueta de lana gruesa, una manta cubría mis piernas y un libro yacía abierto en mi regazo, ahora debería de ser un momento relajante pero el nerviosismo que me aporedaba era mayor que cualquier otro sentimiento o pensamiento de mi mente. La farmacia no abriría en 1 hora y tenia que relajarme, volví mi vista a Cumbres borrascosas y respire hondo, esperaba que no aparecieran Simon o Izzy en sus visitas sorpresas, cerré los ojos y los volví a abrir para continuar con mi lectura.

Sin éxito, no conseguía concentrarme en la historia, creo que llevo media hora leyendo la misma frase una y otra vez, la opresión de mi vientre se intensificó y sin haberme dado cuenta ya había terminado mi café, me levante del alfeizar y coloque la taza en el lavavajillas, apoye mis codos en la encimera y me acune la cabeza con la palma de mis manos, mire el reloj un momento, las 12:45, quince minutos para que abriera, mi estomago se retorció por los nervios que me invadían y me fui a preparar.
Cambie mi chaqueta de lana por un abrigo negro con forro de lana blanca, unos guantes a conjunto con el abrigo y un gorro de lana blanco, entre que llegaba a la farmacia ya estaría abierto, guarde mi estela en mi bota, cogí el bolso, mis llaves, mi móvil y mi cartera antes de salir a las calles de Nueva York.

El cartel en forma de cruz verde parpadeaba en la esquina de la 7 avenida con luz tenue informando que estaba abierto, apresure un poco el paso y llegue a la puerta de cristal con un marco de hierro, apenas se podía divisar el interior de tantos folletos que habían pegados en los cristales, abrí la manilla de la puerta con mi mano enfundada y entre. Un olor a medicamentos, vendas y sustancias medicinales con un toque de menta en el hambiente inundo mis fosas nasales, nunca me habían gustado las farmacias, su aspecto de hospital daba a entender el tienes un problema y odiaba esa sensación, apenas había nadie y no me sorprendía ha estas horas, solo había una anciana tomándose el pulso un hombre comprando unos analgésicos y una niña con su madre en la maquina para saber su estatura y su peso.
La presión se hizo mas fuerte mientras avanzaba a la larga barra de la farmacia, me atendió una mujer de tez pálida, rubia con pelo corto y ojos profundos y marrones, su rostro estaba salpicado de arrugas por la edad, tendría que tener unos 54 años o así.
-En que puedo ayudarte?-pregunto con una sonrisa y voz amable que solían llevar las farmacéuticas, le sonrei mientras desenfundaba mis manos de los guantes, esto sera incomodo.
-He, si he venido.... a por un test... de embarazo.-dije al fin y un pequeño rubor ascendió a mis mejillas, la mujer formo una sorprendida "Oh" con sus labios y me miro de arriba abajo.
-Bien y de que modelo desea comprarlo.-me dijo y yo me mordí el labio, mierda, eso no lo había pensado.
-He... bueno... el mejor que tengan, supongo.-le conteste con una sonrisa nerviosa, ella me volvió a repasar con la mirada y asintió desapareciendo en el almacén a su espalda. Me mordí el labio y vi que la madre que se encontraba junto a su hija me miraba desaprobadoramente, gire mi vista a la pared blanca que había al otro lado pidiendo al cielo que me tragara la tierra, al minuto la dependienta volvió a aparecer con una pequeña caja alargada y estrecha en su mano, la coloco en la mesa de cristal.
-Este test es de ultimo modelo, indica si estas embarazada y de cuantos días, semanas o meses estas, en las instrucciones te pondrá todo lo que quieras saber a no ser que quiera que se lo explique como son sus funciones de uso...-dijo pero yo solamente saque mi cartera y mire a la dependienta ansiosa.
-No, muchas gracias esque tengo un poco de prisa.-le dije y ella asintió, me cobro el test de embarazo y me lo puso en una pequeña bolsita de plástico blanca con la cruz verde de la farmacia, la cogí y me enfunde de nuevo los guantes antes de salir.

Camine con pasos rápidos para volver al apartamento lo mas rápido posible, cada vez que estaba mas cerca de saber si estaba embarazada mi cabeza daba mas vueltas y me mareaba, que pasaría si lo estoy? Jace me seguiría queriendo? Me abandonaría y se iría? Oh no, por el ángel eso no, no soportaría que Jace me abandonara era demasiado sufrimiento, una solitaria lágrima rodó por mi mejilla al pensar en su cara, que haría? Como actuaria? Quisiera siquiera el hijo? Eran muchas preguntas de las que no podía obtener respuesta. Estaba tan enfrascada en mis pensamientos que no oi que alguien me llamaba, mierda, si era algún conocido muy conocido juro que me pongo en medio de la carretera con un cartel que ponga 1.000 dolares por atropellarme me fui girando muy lentamente y pude ver a Alis acercándose hacia mi. Genial!! Lo que me faltaba es que la hermana mayor de Jace apareciera en este mismo instante, y como si el mundo me odiara la cosa no acababa así, si no que Carla iba tras ella pero con pasos mas pausados, no como Alis que parecía correr un maratón, maldeci para mis adentros y escondí la bolsa detrás mio, Alis apareció radiante frente mio, desde que ella y Edward tuvieron a su primer hijo James parecía mucho mas feliz, mi vientre volvió a contraerse.
-Hola Alis.-le dije con una sonrisa nerviosa mordiéndome el labio inferior, ella me dedico una radiante sonrisa.
-Hola, que haces aquí a estas horas de la mañana?-pregunto y me volví a morder el labio inferior.
-Te podría decir lo mismo, que hacéis aquí? No tendríais que estar en Idris o en Toronto?-pregunte, no les veía desde la boda de Carla, ella aun tenia ataques nerviosos por los recuerdos de la muerte de Ana, ahora todos vivíamos en Idris todos en sus casas, Carla aun seguía andando dirigiéndose hacia nosotras sin ninguna prisa y mirándome con curiosidad.
-Si, pero hemos decidido venir hace dos días para veros y para una reunión de nefilims extranjeros de esta noche, ya sabes los que no son de Nueva York.-dijo y soltó una suave risa, observo la bolsa que sostenía tras mi espalda y la intente ocultar mas.-Que traes ahí?-me pregunto y yo hice un ademán con la mano quitándole importancia.
-No es nada solo unas pastillas para el dolor de cabeza.-menti y ella me miro frunciendo el ceño, Carla al fin llego a nuestro lado con una sonrisa burlona en la cara.
-Hey Clary.-dijo y sonrei saludándola.-mmm.-dijo mirando la bolsa con un movimiento ágil de cabeza.-Has escogido una buena marca de test de embarazo.-dijo y yo abrí la boca sorprendida y paralizada.

Cazadores de sombras: ciudad de los recuerdos guardadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora