Tras una noche de largo descanso, Amelia habló con Dumbledore, que fue a la enfermería en la mañana para ver cómo estaban ella y Harry. El niño seguía inconsciente. Amelia aprovechó la visita para preguntarle al director por lo que había ocurrido. Este le explicó que la Piedra iba a ser destruida esa misma tarde y que ya no tenían nada que temer. La niña seguía conmocionada por lo ocurrido.
—¿Señor? —dijo Amelia—. Aunque la Piedra ya no esté, Vol... quiero decir Quién-usted-sabe...
—Llámalo Voldemort si quieres, Amelia. El miedo a un nombre aumenta el miedo a la cosa que se nombra.
—Bien—asintió Amelia, complacida y completamente de acuerdo con la afirmación—, Voldemort intentará volver de nuevo, ¿no? Quiero decir... No se ha ido, ¿verdad?
—No, Amelia, no se ha ido. Está por ahí, en algún lugar, tal vez buscando otro cuerpo para compartir... Como no está realmente vivo, no se le puede matar. Él dejó morir a Quirrell, muestra tan poca misericordia con sus seguidores como con sus enemigos. De todos modos, Amelia, ustedes tal vez has retrasado su regreso al poder. La próxima vez hará falta algún otro preparado para luchar y, si lo detienen otra vez y otra vez, bueno, puede ser que nunca vuelva al poder.
—Señor, hay algunas cosas más de las que quisiera hablar... Si es posible...
—Bueno, siempre que sea algo de lo que pueda hablar...—Dumbledore suspiró—. Contestaré tus preguntas a menos que tenga una muy buena razón para no hacerlo. Y en ese caso te pido que me perdones. Por supuesto, no voy a mentirte.
—Bien... Quirrell dijo que me necesitaba para Voldemort. Pero ¿qué quería de mi exactamente?
Aquella vez, Dumbledore suspiró profundamente.
—Bueno, creo eso ya lo sabes. Te quería por la misma razón que te quiso hace diez años.
—Por... ¿mis poderes? ¿Por eso mató m-mi padre a mi madre?
—Tu madre murió tratando de que él no te encontrara. Protegiéndote de él y de tu padre. Voldemort quería poder y tú, Amelia, tienes un poder increíble. Pero es peligroso e inestable. Él sabía que contigo a su lado podía llegar a ser invencible. Y si quiere volver tú eres la mejor herramienta para conseguirlo.
—¿Y por qué Quirrell no podía tocar a Harry?
—Su madre murió para salvarlo. Si hay algo que Voldemort no puede entender es el amor. No se dio cuenta de que un amor tan poderoso como el de su madre hacia él deja marcas poderosas. No una cicatriz, no un signo visible... Haber sido amado tan profundamente, aunque esa persona que nos amó no esté, nos deja para siempre una protección. Eso está en su piel. Quirrell, lleno de odio, codicia y ambición, compartiendo su alma con Voldemort, no podía tocarlo por esa razón. Era una agonía el tocar a una persona marcada por algo tan bueno.
—Y el espejo... lo que vi... ¿No se supone que el espejo de Oesed muestra lo que más deseamos?
—¿Por qué? ¿Crees que lo que viste no se correspondía con tu mayor deseo?
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El secreto de Amelia Black
Fiksi PenggemarAmelia Black ha vivido toda su vida sabiendo que era diferente. Nunca supo el porqué ni el cómo pero sabía que era distinta. Lo que nunca pudo imaginar fue lo que era. Una escuela de magia y hechicería, magos, varitas y escobas. Todo parece encaj...