H. G. W. I. A S. |3|

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La situación actual era que tanto Iris como el hombre estaban sosteniendo la caja del pastel porque él se negó a dejarla ir de inmediato, Iris mantuvo la sonrisa en su rostro, era normal para ella encontrarse con admiradores como este. 

Había personas que querrían prolongar el contacto directo con ella al negarse a dejarla ir durante los apretones de manos, abrazos o, en este caso, regalos.

Como regla general, Tang Yiyi le dijo que no dijera no a sus fanáticos, sería el trabajo de su séquito interpretar a los malos y ahuyentar a cualquier fanático persistente que fuera demasiado sensible con ella, especialmente cuando los fanáticos eran hombres. 

Y, de hecho, el guardaespaldas más cercano a ella inmediatamente bloqueó al hombre y le advirtió que se fuera.

El hombre finalmente liberó la caja y dio un paso atrás, sin resistirse al guardaespaldas, pero siguió hablando con Iris. 

-Mi nombre es Tian Kong, por favor recuérdalo, soy un gran admirador.

Un ligero surco se formó entre sus cejas cuando sintió el peso de la caja después de que la soltó, sin embargo, no pudo pensar mucho en eso porque Tian Kong la distrajo con sus palabras.

-Te he apoyado desde tu primer regreso al mundo del espectáculo. ¡Fuiste increíble! Inmediatamente me convertí en un gran admirador, fui uno de los primeros miembros de Black Stars, compré todos tus álbumes y mercancía, incluso pude comprar uno de sus sets de cuidado facial Orchidia Beauty antes de que se agote en 5 segundos.

-Muchas gracias por su apoyo, Sr. Tian Kong, se lo agradezco ―le dijo.

-También te envié muchas cartas de admiradores y regalos antes, pero nunca recibí una respuesta tuya.

-Perdón por eso, recibo muchos, te tendré en cuenta la próxima vez que revise mis cartas de admiradores, Gracias.

Uno de sus guardaespaldas bloqueó a Tian Kong aún más y ladró: 

-Muévete.

Tian Kong, sin embargo, inclinó la cabeza hacia un lado, ignorando por completo al guardaespaldas para continuar mirando y hablando con Iris. 

Ahora estaba empezando a sentirse incómoda con este persistente fan.

-¡Eres el mejor músico para mí, Boss Iris! ¡Todavía eres muy joven y tienes tantos años por delante para experimentar más éxito! ¿Por qué te comprometerías tan temprano? No creo que sea aconsejable casarse cuando todavía eres tan joven.

La sonrisa de Iris desapareció y ella retrocedió, otro guardaespaldas se abrió paso entre la multitud para ayudar a su colega a bloquear a Tian Kong. 

Los otros Black Stars ahora lo reprendían.

-¡Eso no depende de ti! ¡¿Cómo te atreves a dirigirte así a nuestra jefa?! ¡No tienes derecho!

-¡Estoy de acuerdo con usted hasta cierto punto, pero tenga en cuenta sus propios asuntos! ¡Nosotros, los Black Stars, siempre apoyamos a nuestra Jefa Iris, pase lo que pase! Si no respaldas su decisión de casarse con el CEO Jin, entonces no eres un ¡verdadero Black Stars!

La expresión de Tian Kong se volvió oscura, miró a los fanáticos que lo regañaban.

Iris se sintió conmovida cuando sus otros fanáticos comenzaron a defender su relación con Jin Liwei, pero aún pensaba que la situación se estaba yendo de las manos.

-Todos, por favor, cálmense, no hay necesidad de pelear entre nosotros, mantengamos la paz y el orden, ¿de acuerdo? ―ella les dijo.

-¡Kyaaaaah! ¡La Jefa Iris me preguntó algo! ¡Sí, jefa! ¡La paz y el orden son ahora mis máximas virtudes en la vida!

-¡Lo siento, jefa! ¡Ya no pelearemos entre nosotros!

Los fanáticos de los alrededores asintieron, solo Tian Kong tenía una expresión de ridículo en su rostro mientras veía a los demás obedecer a Iris, sus dos guardaespaldas pudieron hacerlo retroceder, pero justo en ese momento, su expresión se transformó en una presumida.

Iris lo estaba observando, la sensación molesta que sentía antes solo se hacía más fuerte con cada segundo que pasaba, cuando vio su expresión engreída, las campanas de alarma comenzaron a sonar en su mente. 

Él la miró de nuevo y miró la caja de pastel que sostenía antes de apartar la mirada, si ella no lo estuviera observando, se lo habría perdido.

Levantó la caja cerca de su cara y la olisqueó, al principio, solo podía oler el leve aroma a cartón, ella no podía oler ninguna dulzura de pastel o pasteles en absoluto. 

Además de su peso inusual, ella comenzó a tener un mal presentimiento, fue solo entonces que su nariz registró otro olor.

Fue muy débil pero la golpeó como un rayo, ella se congeló y su expresión se convirtió en alarma, su alarma se convirtió en miedo cuando vio la mano de Tian Kong metida en el bolsillo de su pantalón donde se podía ver un bulto rectangular de su teléfono.

No había tiempo, sus instintos se hicieron cargo.

-¡Todos, al suelo!

Luego lanzó la caja al aire tan fuerte como pudo, durante dos segundos, las personas a su alrededor estaban confundidas, solo unos pocos la escucharon. 

La mayoría vio la caja de la torta volar en el aire, preguntándose qué estaba haciendo Iris.

La expresión de Tian Kong se puso furiosa cuando vio lo que hizo Iris, ella lo fulminó con la mirada mientras agarraba a Dom y Tang Yiyi al suelo.

¡¡¡EXPLOSIÓN!!!

Un destello de fuego rojo y naranja se iluminó en el aire, la onda expansiva hizo que la gente cayera al suelo, todos no podían escuchar la cacofonía de sus propios gritos sobre el fuerte sonido de la explosión.

El centro comercial descendió al caos, convirtiéndose en una escena del infierno.

***

Al mismo tiempo en Jin Corporation.

Jin Liwei estaba en una reunión con sus colegas ejecutivos y personal clave cuando un fuerte sonido de sirena comenzó a sonar dentro de la sala de conferencias.

Todos se refugiaron automáticamente debajo de las mesas, sus cuerpos se movieron por instinto de los simulacros de emergencia que la compañía les obligó a hacer. 

Rose Young se movió un par de veces más lento en comparación con los demás porque era la más nueva en trabajar en la compañía entre el grupo.

-¿Q-qué está pasando? ¿Hay un incendio? ¿No deberíamos correr afuera? ―preguntó con voz ligeramente aterrada antes de mirar a Jin Liwei.

Si no hubiera Xu Tian bloqueando su camino, ya se habría arrojado a Jin Liwei debajo de la mesa y fingiría tener miedo para buscar consuelo en él.