Capítulo 83

987 74 187
                                    


NARRA ZULEMA

Como bien lo había deducido Mercedes, esta cita era para la rubia y yo como pareja. Llevábamos cerca de quince minutos hablando de temas en general de cómo llevábamos lo que podíamos denominar como convivencia, sin embargo, por mi parte seguía sin poder soltarme con facilidad. Toda mi vida me había costado abrirme ante las personas y sinceramente muy pocos lo habían logrado, mi madre, mi abuelo, Saray y ahora la rubia. Debía de reconocer que aquel pequeño círculo estaba creciendo, por lo cual debería sentirme bien. Aunque contar sobre temas personales de mi relación con Macarena a una tercera persona desconocida para mí, era pasar a un siguiente level, claro está que se trata de uno que yo misma había dado por iniciativa a empezar, así es que allí estaba.

- Gracias por atendernos a las dos.- uní mi mano con la de mi rubia.- Se que hemos cambiado tus planes de un momento a otro para lo que tal vez ya tenías preparado, pero creo que una terapia en pareja siempre es bueno, ¿no es así?

- Por supuesto, Zulema. Lo es.- mostró una sonrisa educada.- Y aquello no quiere decir que estén mal como pareja o algo por el estilo. Es lamentable que muchas parejas confundan estas citas con ello.

- Claro, nosotras estamos de lo mejor.- miré a la rubia.- Bueno, ya sabes, siempre intentando dar lo mejor y creo que lo estamos haciendo muy bien.

- Así es.- respondió Macarena, apretando levemente mi mano.

- Bien, pues para centrarnos en el tema, empezaré a hablar yo, ya que he sido la de la iniciativa a esto.

La psicóloga solo asintió la cabeza con cierta tranquilidad, que por un momento podía entender cómo es que Macarena le había tomado tanta confianza y respeto durante este tiempo. Parecía saber muy bien lo que hacía y cómo lo hacía, para hacer sentir cómodamente a sus pacientes.

- Como comentabas desde hace unos minutos, conoces varias cosas de nuestra relación por lo que has podido conversar con mi novia. Vale, pues, te confieso que todo esto es también totalmente nuevo para mí, así es que aunque tal vez no es tu labor, te agradecería nos puedas orientar en un tema un tanto delicado.

Sentí los ojos verdes de Macarena mirarme con un reconocido asombro, por lo que me vi obligada a devolverle la mirada y a sostener más fuerte nuestro enlace de manos.

- Mercedes.- hice una breve pausa.- Dentro de poco anunciaré públicamente mi relación con Macarena, y se que aquello será una situación nueva para las dos, pero sobre todo muy difícil para afrontar. Soy consiente que muchas personas empezarán a opinar libremente de ello, pero quisiera tu apoyo para que todo esto no nos afecte negativamente.

Tras lo dicho, creo que como pocas veces en mi vida, bajé la mirada a mis pies que empezaban a querer moverse algo intranquilos a causa del nerviosismo que empezaba a aflorar de mí como consecuencia de mis palabras.

- Por supuesto que me encantaría aportar en ello. A ver, lo primero es saber cuánto se conocen mutuamente. Si tú, Zulema.- me miró.- sabes cuáles son las cosas que pueden desagradar a Macarena o cuáles son las que le gusta, lo mismo en tu caso, Macarena.
Cuando la pareja se conoce, es mucho mejor afrontar cualquier situación por la que atraviesen. Por supuesto que esto lo irán aprendiendo con el tiempo, pero sí es vital que comprendan la importancia de estar abiertas para aprender la una de la otra, no cerrarse en lo que le gusta o le parece bien a una. ¿Vale?

- Sí, con Macarena todo ha sido distintos.- la rubia me miró curiosamente.- Por primera vez en mucho tiempo me he preocupado por el bienestar de alguien más que no sea el mío mismo. Así es que, rubia... Yo siempre me preocuparé por lo que opines o te guste, si algo no es de tu agrado, puedes sentirte con la confianza de decírmelo.

Bajo hipnosis (Zurena AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora