Advertencia: Capítulo largo nuevamente lleno de flashbacks. Gracias por llegar hasta aquí ❤️
- Yo...- susurraba como si fuera peligroso que alguien los escuchara. - Los vi besarse...
Esas tres palabras, solo esas tres fueron suficientes para hacer que una corriente helada recorriera el cuerpo de Sesshomaru. Una combinación de muchos sentimientos comenzaron a invadirlo. Pero... se mantuvo tranquilo en todo momento pensando con calma ¿Rin besándose con Seiwa? Era una idea repugnante pero sabía que no era cierta. Rin jamás lo besaría.
- ¿Los viste? - preguntó con frialdad en su voz. Seina dudó si contarle, sentía que había metido la pata pero era muy tarde. Además ella estaba convencida de que Sesshomaru tendría que entender tarde o temprano que su protegida se había enamorado del sujeto que le desagradaba tanto.
- Así es - afirmó con seguridad - Fue hace... dos noches... - dijo. Sesshomaru recordó que hace dos noches él estuvo con Rin, incluso durmieron juntos. Seina estaba hablando incoherencias, siguió escribiendo en el pergamino. La inuyokai continuó - Los vi en la habitación de música. - Sesshomaru dejó de escribir recordando un detalle. Esa noche... el aroma de Seiwa parecía estar en la habitación de Rin y ella le mencionó algo de música ¿Era acaso una cruel coincidencia? - Sé que puede molestarte, pero piénsalo. Estoy segura... que esos dos se quieren demasiado... -
Sesshomaru se quedó pensando. Empezaba a sentirse molesto, demasiado molesto. Rin tomó el brebaje antes que él llegara... La peste de Seiwa desapareció después de eso.
¿Por qué?
¿Por qué ella tomaría el brebaje cuando fueron claros en que no debía hacerlo?
¿Qué intentaba ocultarle?
Acaso ella y Seiwa... realmente... ¿Se besaron?
Sesshomaru se puso de pie de repente sorprendiendo a Seina.
- Encárgate del resto - ordenó. Seina quiso preguntarle a donde iba pero al ver su rostro evitó hacerlo. El gesto que tenía... era aterrador....
Ya era de noche, Rin se encontraba en su habitación terminando los últimos detalles del ramo que pretendía regalarle al Señor Sesshomaru. Jaken estaba a su lado alcanzándole las pequeñas flores que quedaban. Estaba aburrido y tampoco sabía exactamente por qué ayudaba a la mocosa. Rin, por su parte, tenía una expresión boba en el rostro y sonreía mucho. El pequeño demonio verde se dio cuenta de esa expresión.
- Este es el último... y...¡Ya está! - exclamó con felicidad al terminar el ramo. Miró al pequeño demonio verde - Gracias por ayudarme, Señor Jaken. Espero que le guste al Señor Sesshomaru - decía mientras miraba con mucho cariño esas flores. Jaken suspiró con algo de resignación. Rin estaba completamente embobada por el amo.
La puerta de la habitación se abrió de repente. Tanto Rin como Jaken voltearon casi al instante a ver quien era. Rin sonrió al verlo pero Jaken sintió que algo no andaba bien. Era Sesshomaru.
- ¡Señor Sesshomaru! - exclamó Rin sonriéndole, tomó el ramo de flores hecho y se acercó a él pero a la distancia suficiente. Ya no podían tomar el brebaje así que era demasiado peligroso estar cerca pero... ahora que se ponía a pensar ¿Por qué el Señor Sesshomaru aparecía de repente por la puerta? Él normalmente entraba por la ventana... Decidió ignorar eso y darle su regalo - Tome... yo... hice esto para usted... - dijo algo apenada alcanzándole el ramo de flores. Jaken miraba con atención a su amo. Sabía muy bien que estaba enojado.
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Un año de primavera
RomanceSeis años han pasado desde que Rin y Sesshomaru se separaron para que ella pudiera elegir el camino que desee, continuar viviendo con humanos o finalmente regresar a sus viajes con el gran demonio. Sin embargo, Rin aún no ha tomado una decisión. Est...