Un año de primavera

Extraño sentimiento

- ¿Él hizo algo como eso? - preguntaba decepcionada Rin.

Era tarde, la demostración de soldados había terminado no hace mucho tiempo y ahora Seina acompañaba a Rin en su habitación, ambas sentadas sobre unos caros cojines y al lado de ellas Jaken. Seina le contó lo que pasó al final del espectáculo, sobre la propuesta de Sesshomaru al Lord del norte que este terriblemente terminó aceptando. Rin pensó en lo difícil que habría sido para Seiwa ver algo como eso. Él estaba tan emocionado por este día, pero ahora su soldado había muerto... El joven Seiwa apreciaba mucho a sus soldados...

Sintió mucha pena por él.

- Sí, eso dijo. Pero no puedo culparlo... - decía Seina - Mi padre tuvo la opción de negarse. Aunque era muy obvio que no lo haría... -

Seina hablaba de una manera algo triste, ella también parecía sentir algo de tristeza por lo que pasó. Rin se percató de esto ¿Ella también sentía el mismo aprecio por los soldados al igual que su hermano?

- Usted también se ve un poco afectada, Señorita Seina - le mencionó.

- Es por Seiwa, puedo sentir... cuando él está triste... - sus palabras parecían tener algo de nostalgia. Seina bajó un poco la mirada - Es una conexión de hermanos que tenemos solo los dos... -

Rin se extrañó de esas palabras

"¿Conexión... de hermanos?..." preguntó en su mente.

- Yo no le veo ningún problema a lo que hizo mi amo Sesshomaru. Él no se equivoca. Si el amo bonito lo hizo seguro es porque ese loco se lo merecía - renegaba Jaken. Rin le frunció el ceño.

- No diga eso Señor Jaken. Nadie merece morir por entretenimiento de otros - se quejó. Jaken desvió la mirada de ambas molesto. Rin volvió a mirar a Seina. Hace un tiempo que tenía curiosidad por saber qué ocurría entre Seiwa y el Señor Sesshomaru. Tal vez, por conocerlos desde hace mucho, la señorita Seina debía tener una respuesta.

- Señorita Seina. ¿Por qué el Señor Sesshomaru y el joven Seiwa se odian? - preguntó recordando aquella vez que el príncipe fue a atacarlos. Parecía haber un rencor entre ellos dos o al menos en el joven príncipe.

- Yo no diría que se odian... - respondió - Para Sesshomaru, Seiwa es tan insignificante que ni siquiera se molesta en prestarle atención. Pero... para Seiwa, Sesshomaru es... su más grande rival. Alguien que él quisiera ser. - Seina suspiró como si estuviera resignada. - Mi hermano, a diferencia de mí, nació con mucho poder pero con un carácter considerado por nuestra raza débil. Es... muy sentimental, blando. Siempre fue juzgado por eso incluso por su padre y hermano. Y... desde que éramos niños Sesshomaru se encargó de hacerlo sufrir aprovechándose de esa debilidad. Da igual, no es la primera vez que Seiwa pasa por algo como esto. Lo superará, siempre lo hace. - dijo refiriéndose a la muerte del soldado. Seina se puso de pie - Tuve suficiente por hoy, necesito relajarme. Me iré. Mandaré a que te traigan la cena pronto - le indicó la demonesa.

- Espere... ¿Irá a hablar con Seiwa? - preguntó preocupada.

- No, él necesita estar solo por un rato. Tengo que hacer... algo más importante... Te veo mañana Rin - la demonesa salió del lugar dejando a Rin pensando en todo lo que había pasado.

"¿Cómo algo puede ser más importante que ayudar a un hermano....?"

- Tampoco le pedimos que nos cuente su vida... - Decía molesto en voz baja Jaken. Rin lo miró molesta por lo insensible que sonó su comentario..