Gracias por llegar hasta aquí. Tengo que advertir que este capítulo esta lleno de charla pero con información demasiado importante y problemática. Capítulo largo así que tómense el tiempo de leer UuAh! y algo que quería hacer recordar es que entre Inuyokais no pueden matarse. Osea, por más que Sesshomaru desee hacerlo no puede matar a Seina o a Seiwa. Está prohibido y penado por el clan. Así como concebir hijos híbridos. Por eso Irasue tuvo que intervenir en el enfrentamiento de Seiwa y Sesshomaru. Porque básicamente Sesshomaru estaba cerca de matar a Seiwa.
Toda esta información esta mencionada en el prólogo.
¡Empecemos!
En la aldea los días transcurrían con mucha tranquilidad y alegría. A pesar de que se acercaba el invierno y las cosechas no parecían ser ventajosas, los pobladores siempre conservaban una energía y actitud positivas. Kagome llevaba en una cesta unas hierbas medicinales para preparar una pasta que ayudase a un enfermo. Se detuvo un momento para ver el cielo, era brillante por los rayos del sol. Tal vez eran los últimos rastros del verano. El fuerte calor había desaparecido casi por completo. Ya se sentía el frío.
- Será mejor prepararse ya para el invierno... - dijo mientras volteaba a ver su pequeña cabaña que compartía con Inuyasha desde que se casaron. Pensó en su esposo. ¿Dónde estaba él?
- Oye Kagome, tengo hambre ¿Qué hay para comer? - la voz del hanyo apareció de repente detrás de ella sorprendiéndola un poco.
- Inuyasha... casi me das un gran susto... - se quejó la mujer. - Aún es temprano para almorzar. Pero... - Kagome se puso a pensar mientras Inuyasha la miraba con atención - Supongo que yo también tengo algo de hambre... ¡Ya sé!¿Por qué no traes un par de peces? Cocinaré algo ahora - dijo con una sonrisa. El hanyo se emocionó.
- Verás que los traeré en un segundo, Kagome - dijo con decisión. Estuvo a punto de voltear e irse con prisa pero sintió algo, energía demoniaca. Se detuvo. Kagome también sintió lo mismo. Los dos miraron para diferentes lados con gestos de peligro en sus rostros. - ¿También sientes eso? - preguntó. Kagome asintió.
- Sí... es un poder Yokai muy grande... pero... no logro identificar de dónde viene... - dijo la sacerdotisa. Siguió buscando con la mirada hasta que ese poder desapareció. Fue extraño. Fue un poder demasiado grande, por un segundo pensó que estaban a punto de ser atacados. Inuyasha desenvainó a colmillo de acero pero ese poder se fue por completo.
- Maldición...¿Qué fue eso? - preguntó con molestia el Hanyo. Kagome lo miró preocupada.
- No lo sé pero... ese poder... ¿No te pareció familiar? - cuestionó la humana. Inuyasha la miró atentamente. ¿Familiar...?
Muy cerca a la aldea de Inuyasha el príncipe primogénito del norte, Heika, se encontraba levitando en los aires mientras miraba con atención al hanyo de atuendo rojo. Le tomó demasiado días pero al fin... Había encontrado al segundo hijo de Inu no Taisho. El mitad bestia llamado Inuyasha.
Tenía una fama bastante grande en el este. Se sorprendió por ello. No solo eso. Había escuchado sus hazañas, su poder y la derrota de un tal Naraku que parecía ser muy poderoso. Heika se puso a pensar ¿Como Murakami nunca se enteró de eso si pasaba en sus mismas tierras? ¿Realmente no sabía de la existencia de Inuyasha? Era extraño...
El príncipe miró con más atención a Inuyasha y a la mujer con la que caminaba. Era una sacerdotisa, humana evidentemente ¿Era su esposa o algo similar? Probablemente sí. Al parecer a ese hanyo también le gustaban las humanas. Si tan solo la rama principal se enterara... sería un desastre. Por ahora solo tenía la misión de confirmarle a su padre de la existencia de ese mitad bestia. No podía creerlo a pesar que lo veía. El hijo de alguien como Inu no Taisho vivía en una aldea pobre. Era un campesino...Heika detuvo una carcajada que estuvo cerca de salir. Se aclaró la garganta. Tenía que mantenerse serio. Ya tenía la ubicación del hermano de Sesshomaru. Solo debía decirle a su padre y él terminaría por matarlo.
ESTÁS LEYENDO
Un año de primavera
RomanceSeis años han pasado desde que Rin y Sesshomaru se separaron para que ella pudiera elegir el camino que desee, continuar viviendo con humanos o finalmente regresar a sus viajes con el gran demonio. Sin embargo, Rin aún no ha tomado una decisión. Est...