Denle mucho amor a esta parte también por favor.... UuCuatro días después... (24 días)
Seiwa continuaba leyendo, anotaba en un pergamino lo que le parecía importante. Aún escribir era molesto. Podía caminar mejor que antes, sus brazos ya no flaqueaban. Todo parecía ir bien. ¿Era eso dominar el youki? No había hecho más que quedarse en esa habitación. Ni bien recupere su libre movilidad regresará a entrenar. Pero hasta eso... necesitaba seguir buscando... una solución...
- ¡Buenos días! - La puerta de su habitación se abrió repentinamente. Seiwa volteó encontrándose ahí a su hermano, eso lo sorprendió. Al fin regresó después de irse repentinamente días atrás, llevaba algo en su espalda, parecía ser una lanza o algo similar cubierto por telas. Eso le llamó la atención pero Heika no estaba solo. Yukiji apareció detrás de él. Seina, Mie y Sentaro también. Todos comenzaron a acercarse a él pero la atención de Seiwa se quedó en Mie, ella solo cambiaba el agua del día anterior. Aún sentía algo de remordimiento al verla, la forma en que la trató ese día... Probablemente solo quería desquitarse con alguien y lo hizo con ella. Fue injusto actuar así, debía disculparse.
- ¿Qué estás leyendo? - preguntó Seina mientras se sentaba al lado de una pequeña mesa. Sentaro se mantuvo de pie a su lado, callado. Seiwa dejó su libro para darle mayor atención a su familia . -
- Algo sobre el youki y técnicas de inmovilidad - contestó. Seina se extrañó por eso. Por alguna razón Seiwa comenzó a leer ese tipo de libros y otros sobre sellos. Le parecía extraño pero no quería entrometerse demás. Le calmaba ver que su hermano ya no estaba molesto pero... ahora... desde hace días parecía totalmente decaído... triste... su gesto siempre parecía desolado. Ella no podía sentir algo en su pecho a pesar que lo veía así de triste. No lo entendía ¿Por qué su hermano estaba así? ¿El saber que tenía el youki de su padre lo habrá afectado tanto? ¿Qué lo tenía acongojado de esa forma?
- Vinimos a ver como estabas. - le habló Yukiji a su cuñado -
- Me alegra ver que has mejorado mucho... - añadió Heika. El inuyokai mayor se agachó para hablar con su hermano cara a cara - Seiwa, Yukiji me explicó lo ocurrido en el sur. Dejaste tu arma ahí, es demasiado posible que a estas alturas alguien no la haya destruido. Y por decir alguien me refiero al idiota de Tadateru. Pero no te preocupes... - Heika hablaba con mucha seguridad - ¿Crees que yo dejará a mi hermano menor desprotegido sin un arma al nivel de su poder? - cuestionó. Seiwa creyó que tenía que responder pero antes de que hablara Heika se adelantó - ¡Yukiji! - el inuyokai estiró su mano a su esposa. - ¡Llegó la hora de la presentación! - Heika se puso de pie, llevó para atrás su frondoso cabello mientras Yukiji se llevaba lo que parecía ser una lanza. Un ambiente dramático se alzó al rededor de todos...
- Por muchos años - Heika comenzó a contar como si se tratara de un misterio - ...hemos utilizado lanzas y naginatas como símbolo de nuestra familia, peleamos con ellas, se volvieron nuestras compañeras... - decía dramáticamente. El ambiente se sintió como algún tipo de espectáculo. - Y ahora... tienes el honor de haber perdido tu arma en una fiera batalla. Por eso... te mereces ¡Esto! - exclamó. Heika se hizo a un lado mostrando a su esposa sosteniendo una lanza de mango azul. Heika lo tomó en sus manos mientras Yukiji se quedaba a su costado - Fabricada por el herrero de nuestra familia, de los mejores trabajos de Gozen.... - decía. Seina veía con cierta molestia el espectáculo de Heika, Sentaro estaba entretenido aunque no lo demostraba. - ...Miles de almas de yokais inferiores fueron encerradas en él. Usaron el rubí para concentrar youki y absorbieron la esencia del zafiro para teñirlo... - Seiwa sonrió levemente al ver todo el escándalo que hacía Heika pero entendía el detalle. Le había conseguido un arma nueva. Era... muy similar a su arma anterior. Solo... el filo era un poco más grande y curveado. - ¡Pero no eso es todo! fue forjada en base a ¡Dos! plumas de Sukaku en ella. Un núcleo más grande que el de cualquiera. Esto... mi querido hermano menor... ¡Es tu nueva arma! - exclamó extendiéndole la lanza de mango azul. Yukiji estaba a su lado moviendo sus manos como si terminara de presentar. - Bien... - Seiwa miró a Heika extrañado. -Intenta usarla - le pidió.
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Un año de primavera
RomanceSeis años han pasado desde que Rin y Sesshomaru se separaron para que ella pudiera elegir el camino que desee, continuar viviendo con humanos o finalmente regresar a sus viajes con el gran demonio. Sin embargo, Rin aún no ha tomado una decisión. Est...