Al día siguiente, Rin despertó un poco distraída, recordó el sueño muy particular que tuvo el tiempo que cayó enferma. En ese sueño habló con sus padres y su hermano. Ellos parecían estar molestos o decepcionados con ella. Desde la noche cuando los bandidos atacaron la aldea del pintor Takao y sus pequeños hermanos, se ha cruzado la mayoría de las noches con su familia en sueños. Quería saber si había alguna razón especial para que su mente no los haya dejado de lado en todo ese tiempo. Y, con el sueño que tuvo estos últimos días mientras estaba inconsciente, lo descubrió. Tenía que ver a sus padres nuevamente.
Sesshomaru estaba en una esquina de la cabaña pensando en los eventos ocurridos el día anterior, casi comete un gran error al casi besar a Rin. Por más que él quisiera hacerlo no debía, no debía hacerle pensar cosas que no eran y menos cuando faltaba tan poco tiempo para que se separasen. Pero, aún así, en el corazón del frío Sesshomaru un sentimiento de felicidad se hizo presente, porque Rin parecía sentir un cariño especial y diferente por él, también quería besarlo. Aunque no quisiera admitirlo y pensara que era inaceptable creerlo, la idea de que ella pudiera estar enamorada de él llenaba su pecho de un sentimiento nuevo. A veces la miraba solo para lograr entender si alguien como Rin pudiera enamorarse de un ser como él. Parecía imposible.
- Señor Sesshomaru - lo llamó Rin con dulzura en su voz. Realmente le gustaba escuchar su nombre ser pronunciado por ella.
- ¿Qué ocurre? - preguntó con voz suave el demonio. Rin quería mirarlo a los ojos pero aún se sentía muy avergonzada por el casi beso del día anterior. Su corazón aún no podía procesarlo.
- ¿Recuerda aquel día que perdí mi bolso? - preguntó un tanto nerviosa.
- Lo recuerdo... - respondió Sesshomaru, las imágenes de Rin exhausta luego de esos acontecimientos volvieron a su memoria. Después de ese día ella parecía afectada.
- Ese día, verá.... hubo algo que no le conté... - confesó, Sesshomaru la miró intrigado.
- ¿En serio? que novedad... - dijo algo molesto. Rin hizo un leve puchero.
- ¡Señor Sesshomaru, no empiece por favor! - pidió. Suspiró exhausta y decidió continuar - Ese día cuando vi que atacaban a Takao... recordé todo lo que pasó la noche que murieron mis padres. - Sesshomaru la miró con más atención. - Hay noches que es difícil dormir porque me encuentro con ellos en sueños, es como si buscaran algo de mi... -
Sesshomaru entendió al instante que esa fue la verdadera razón por la que ella no dormía los días después de ese incidente.
- Esta bien si no quieres contarme cosas que no quieres recordar - dijo el demonio - pero... por qué decirlo ahora ¿Tienes algo en mente, Rin? - cuestionó. Rin le sonrió de manera nostálgica.
- Sí... Quiero visitar sus tumbas. Pasaron muchos años desde la última vez que los vi. - Sesshomaru estaba atento a las expresiones de Rin.
- Entonces iremos una vez que te recuperes por completo - decidió, Rin le sonrió.
- Esta bien. -
Sesshomaru pensó la situación, la aldea en la que Rin vivió hace años estaba en un camino alejado a la ruta más rápida que debía seguir para llegar a la aldea de Inuyasha. No podían desviarse y perder más tiempo cuando sabía que soldados lo estaban buscando. Pensó entonces en una solución, pero Rin no se había recuperado por completo todavía. Tal vez solo debía ser cuidadoso.
- Rin - la llamó de forma seria. Rin lo miró.
- ¿Pasa algo, Señor Sesshomaru? -
- Antes del amanecer, iremos a la tumba de tus padres - le informó. Rin se sorprendió.
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Un año de primavera
RomanceSeis años han pasado desde que Rin y Sesshomaru se separaron para que ella pudiera elegir el camino que desee, continuar viviendo con humanos o finalmente regresar a sus viajes con el gran demonio. Sin embargo, Rin aún no ha tomado una decisión. Est...