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PAT METHENY EN PANDEMIA
1. Me entero esta semana que finalmente los conciertos agendados de Pat Metheny en Chile el año pasado y que se suspendieron producto de yasabe quién, se realizarían los días viernes 3 de diciembre de 2021 (fecha original del 16 de abril 2020) y sábado 4 de diciembre de 2021 (fecha original del 17 de abril 2020), siempre en el Teatro Caupolicán.
2. Invierno, año 1985, no tengo nada claro, pero tengo mis oídos atentos. Por la radio suena una música que no he escuchado antes y que me cautiva de improviso. Hay algo diferente en ella. No es rock, pero casi. No es clásica, pero se oyen virtuosos. No es pop, pero se escuchan coritos. Es jazz tal vez, pero no hay exceso de saxos ni de bajos. ¿Qué diablos es? – pienso – mientras preparo un ensayo de matemáticas de la PAA.
3. Tiempo después mi hermano me regala un cassette, sí un cassette, una caja pequeña, rectangular dónde antes la gente grababa música, y que trae un programa de radio – La hora Cero, de Radio Concierto – con un especial de un tal Pat Metheny Group – ¡es la misma música! - y dónde presentan su nuevo disco First Circle ganador, me entero, del Grammy a la Mejor Interpretación de Jazz Fusión en 1985. Antes de continuar con esta lectura, lo primero que deberías hacer es escuchar inmediatamente First Circle, un tema de una belleza tan extrema cómo lo es en su complejidad rítmica, sin duda una imprescindible y extraordinaria canción e intentar seguir la introducción inicial que es con aplausos. A continuación dejarse llevar por el inconfundible timbre de voz de Pedro Aznar, con esa fonética mágica que pareciese te invita por caminos de color y de una intensidad expresiva difícil de igualar. Luego entra en escena la guitarra acústica de Pat, con un rasgueo aparentemente sencillo pero de muchísima profundidad y que permite la lenta introducción del piano y las percusiones todo en un ambiente armonioso y sutil pero en un crescendo continuo, hasta llegar al primer momento climático de la canción donde pareciese que todo va a estallar. Entonces llega la pausa necesaria y las aguas se aquietan y es el momento del gran Lyle Mays, que lamentablemente falleció el año pasado , que junto con Pat conformaron unas de las duplas creativas más extraordinarias de la música contemporánea, para darnos una poderosísima secuencia de, virtuosismo, belleza musical y emoción en un sublime solo de piano, con una percusión de fondo que simplemente acompaña el caminar del grupo cómo si se tratara de un viaje sonoro hasta ir nuevamente escalando a la cumbre en un nuevo clímax musical donde ya cada músico; Steve Rodby en contrabajo, Paul Wertico en batería, y ni que decir Pat están prácticamente desatados, en una especie de trance hipnótico, acompañados hasta la nota final por la vocalización extraordinaria de Aznar.
4. Leo que los gustos personales son las nuevas ideologías. Si entiendo bien quiere decir que tu forma de ver al mundo estaría supeditada a lo que tu amas o rechazas en forma visceral. Pues bien tengo que decirlo: me encanta la música de Pat Metheny (así como detesto la ¿música? de Maná). A lo largo de más de treinta años tengo registrados en mi disco duro, infinidad de estupendos momentos al alero del sonido Metheny, tengo innumerables canciones fetiches que toco y toco una y otra vez sin asomo de culpa y que me invitan a diferentes estados de ánimo y como si esto fuera poco me da su cuota de orgullo ver cómo mi hijo disfruta también con su música e incluso imita los gestos y poses cuando toca su guitarra.
5. Si la música es compañía, además de emoción, recuerdo y divertimento, diré por último que el sonido Metheny ha sido un fiel compañero hasta el día de hoy .Curiosamente no he podido ir nunca ha ninguno de los tres recitales -creo- , que ha hecho Metheny en Chile por eso me hacía tanta ilusión el concierto del año pasado. No importa. Ya lo veré. Sin embargo lo he tenido cerca cada vez que lo he buscado, que es mucho más de lo que podría decir de mucha gente. Y estoy seguro además que su música perdurará, ajena a las modas pasajeras, alejada de los puristas, innovando con más o menos resultados, pero siempre invitándote a una búsqueda sonora de excepcional belleza y calidad interpretativa.
