¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
ROLES Y PANDEMIA
Esta es una distinción que aprendí en mi formación como lifecoach y que quiero compartir. Se viene un nuevo año y puede ser una buena aproximación para visualizar cómo nos comportamos en diferentes situaciones relacionales y ver si podemos hacer algo al respecto.
Tiene que ver con la actitud con la cual encaras la vida. Con aquellos escenarios que ocurren cotidianamente y la forma y la decisión con la cual los enfrentamos e incluso desafiamos si nos son adversos.
Imagina que estás invitado o invitada a una fiesta o a un asado o a una reunión, con gente que no conoces o que ubicas vagamente. Imagina además que dentro de tu lista imaginaria de buenos propósitos para el año 2022 escribiste que querías ser mucho más sociable, querías ampliar tu círculo de amistades, agrandar tu network, o incluso encontrar pareja o tan solo aprender a divertirte más o conocer gente entretenida y positiva para tu vida.
Así como tal vez te detengas algo para ver con que ropa asistirás a ese asado o a esa fiesta o a esa reunión quiero que le des una vuelta al personaje con el cual pretendes ir...
Estas son las alternativas.
Ir de turista: vas y aprovechas de sacar y tomarte fotos, intercambias algunas palabras de buena crianza con la gente que te cruzas, siempre con la cara amable, mientras observas y pareces escuchar lo que las personas conversan e incluso es posible que puedas reír con ellas, incluso fingidamente. Recorres el lugar y comentas sobre lo bonita de la casa, lo rico que quedó el asado, o lo delicioso del picoteo, bebes cerveza o vino, y a una hora prudente te regresas a tu hotel o a tu casa que es lo mismo.
Puedes ir de analista: con una mirada crítica sobre todo, observando el decorado del lugar, o como viste tal o cual persona, fijándote en el tipo de carne o ensaladas que hay y opinando, sin que nadie te lo pregunte cómo es la preparación ideal. También sacas conclusiones de las conversaciones que se dan, si tal pareja se lleva bien o no y cuando hablas intentas tocar temas profundos para probar el tipo de personas que son y vean lo inteligente que eres y vas preguntando a qué se dedican o de qué colegio provienen o si tienen el esquema completo de vacunas puestos y hablas de los peligros de Ómicron y de las razones de por qué es peligroso salir al extranjero en esta época de pandemia y sentencias que lo mejor será veranear en Chile.
También puedes ir de periodista: tomando nota de todo, cómo esta vestida la gente, los tipos de vinos que hay, o indagando sobre los colegios o jardines infantiles de los chicos y haciendo una pequeña encuesta de cuál es el mejor. Hablas de actualidad, de política, de la crisis climática, de la identidad de género, del dólar a $860, con argumentos muy fundados y sin espacio para el humor, también puede que tomes nota mental de los modelos de autos que estaban en la entrada. Y también te da por preguntar por quienes creen que serán los integrantes del futuro gabinete, señalando obviamente tus favoritos o intentas hacer un ranking de series preferidas y argumentas muy seriamente por qué no te gusta Emily en Paris.
Finalmente tu opción puede ser que quieras ir de protagonista: así que escogerás minuciosamente una ropa adecuada que te haga sentir bien y cómodo (a). Cuando llegas saludas a todos presentándote por tu nombre mirando en todo momento a los ojos, preguntando amablemente como se llaman e intentarás recordarlo. Tu postura será erguida, y tendrás un sincero interés en cada una de las conversaciones en las cuales participes, sin espacio para juzgar, y harás preguntas con el intimo deseo de conocer más a la persona prestando atención a las emociones de los demás pero, sobre todo atento a las tuyas y actuando en concordancia, conectándote en todo momento con el aquí y ahora. Además tendrás claro tu objetivo e irás resuelto (a) a buscarlo sin titubear y sabrás adaptarte a cada situación fluidamente. Y siempre con buen humor.
Pues bien, la próxima vez que vayas a un lugar, participes de un curso, un taller, o integres una reunión, pregúntate antes de salir cual va ser el papel que vas a querer desempeñar; el de un simple espectador o comentarista de la realidad o el del gran protagonista de la película de tu vida, aquel que tiene una estupenda gestión de sus emociones, claridad de propósitos y objetivos y absoluto control y decisión sobre sus actos.
