Una Luna y Tres Cuartos de Sangre Sucia

En un Bosque de la China una Niña se Perdió.

Merlina está dando de vueltas como león encerrado en su garage con las llaves del Camaro en la mano pero Eugene no se ha presentado, pasada una media hora está harta de esperar y piensa ir a buscarlo pero el moreno aparece con su mochila colmena.

-Llegas tarde. -Le mira con mala cara.

-Lo siento pero tenía que pasar primero con la jefa. -Había quedado de ir con ella después de desayunar.

-¿Te escapaste de ella?

-No soy tan rápido. -Sonríe nervioso, se mueve un poco y la vieja está detrás de él.

-Tengo curiosidad de su potencial mágico. -Le da unas palmaditas al hombro del muchacho.-Úsalo de batería tanto como puedas. -Mira a su nieta. -Y quiero un informe detallado de todos los experimentos que hagan.

-Que fastidio. -No tiene ganas de hacerlo.

-Muy detallado el informe... -En un segundo ya se encontraba respirando en la cara a su nieta quien no tiene más opción que asentir.–Te estás llevando a mi experimento más importante, no lo pierdas. -Amenaza la bruja con su mirada a la jovencita.

-Lo regresaré a la casa. -Promete la morena tragando un poco de saliva.

-Muy bien, en ese caso los dejo salir de campamento. -Vuelve a reírse – Diviértanse hasta morir.

-Lo siento tuve que contarle a donde íbamos a ir y todo, porque no me dejaba salir del laboratorio.

-¿Te das cuenta que eres su experimento? Ya no eres ni una persona.

-Eso dice ahora, pero luego seré un gran brujo. -Levanta un puño . -Mi camino ninja acaba de comenzar.

-Pues metete al carro, experimento ninja.

-¿Me dejarás manejar? -Vuelve a preguntar.

-¿Al menos sabes cuál es el freno y como meter las velocidades?

-¿El freno es el pedal largo, no?

-... Hoy solo serás la batería del carro. -Se va al asiento del conductor.

-Un día de estos tendré mi propio vehículo mágico y será genial. -Suspiró, entrando al asiento del copiloto.

-Pon la mano en la palanca de velocidades.

-¿Para?

-No la escuchaste, vamos a probar tu potencial mágico. -El moreno coloca su mano y de inmediato siente como le va absorbiendo la magia. -¿Qué tan rápido podrás ir?

Arrancan el automóvil y salen convertidos en luz pura, a Merlina le cuesta llevar el control sin terminar estampados en algún poste de luz cuando están alcanzando altura.

-¡Suelta la palanca! -Grita, cuándo apenas llevan unos 5 minutos de viaje. -Nos acabamos de pasar como 8 condados.

-¿Tanto? -El chico está un poco mareado.

-Más que trabajar tu potencial, tenemos que trabajar tu control del mismo. -Suspiró -A todos ustedes les tengo que enseñar autocontrol. -Recordando a sus lobos que andan dando vueltas en el bosque.

Los rubios se salieron solo con lo que llevaban puesto, por suerte el pantalón de Kent tenía dinero del que les regalo Merlina y pudieron comprar un boleto de autobús que los llevará al bosque de la interestatal. Kent está mirando muy triste por la ventana, no para de suspirar y escribir "Eugene" con corazones alrededor en el cristal con su dedo índice.

-Quizá sí fue muy dramático con el asunto de la marca. -Aún está llorando un poco. -Nunca le explique a Eugene lo importante que es para mi.

-Todo pasó muy rápido. -Hasta Merlina se enojó con ellos, al recordar su tono de voz tan grueso y enérgico le dan ganas de hacerse un ovillo. -Tenía mucho tiempo que no me hablaba así.