Con solo 5 minutos.

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La luz termina y ahora Merlina se encuentra admirando el paisaje nocturno de una cuidad... de cabeza.

-¿Dónde mierdas estoy ahora? -Pregunta en voz alta colocando sus manos en la cara y sintiendo una especie de goma gelatinosa fría.

"En nuestro escondite favorito esperando la cena."

-¿Qué? -La morena mira hacia los lados pero no hay nadie, luego se observa las manos, tiene un traje de lo que supone es latex negro que cubre desde sus dedos hasta el cuello.

"Escucho a una señorita gritar, vamos."

La voz lúgubre sale de su traje y todo su cuerpo se mueve en contra de su voluntad, desde el rascacielos cae en picada y se balancea con una cuerda pegajosa y negra que sale de sus muñecas hasta llegar a un callejón, donde un hombre de 40 años ha acorralado a una chica de unos 15 años y le intenta quitar el vestido.

-¡Déjeme tranquila! -Grita la chica pero a causa de la música estridente que suena de uno de los departamentos de arriba, no la pueden escuchar.

-Vamos preciosa, si con esa minifalda me lo estabas pidiendo a gritos, no mientas. -El viejo está metiendo la mano por debajo de la falda.

-¡Quieto ahí, sucio mono lampiño! -Dice Merlina pero siente que no fue ella la que pensó esta frase. -¿Qué eres y qué haces en mi cuerpo? -Gruñe la chica ahora intentando quitarse el traje que solo se expande y vuelve a pegarse a su piel.

"¿De verdad, Merlina, vamos a tener de nuevo esta discusión?"

El viejo al ver al monstruo de negro, empuja a la niña e intenta correr pero una telaraña lo envuelve y lo deja pegado en la pared, segundos después una mujer encampuchada con traje blanco, calentadores arcoiris, chamarra con diferentes tonos de rosa, con la capucha que lleva orejitas puntiagudas, un simbolo en el pecho entre lobo y araña, entra a escena.

-Parece que Venom se está peleando con el mismo, tuvo suerte, señor pervertido. -Su melodiosa voz hace que Merlina la descubra de inmediato.

-¡No hice nada, sáquenme de aquí! -Exige el hombre pegado en la pared.

-Pues mire, yo no apoyo a que Venom coma cerebros humanos, pero por mi experiencia diré que solo busca pedofilos, asesinos seriales y pacientes con enfermedades en fase terminal y usted señor... -Le señala de arriba para abajo. -Entra perfectamente en la primera categoría.

-Eni... -Antes de que pueda terminar de hablar, la chica le lanza una telaraña a la boca.

-Shhhh.... -Saca un móvil que tiene línea directa al capitán de los policías para avisarle que tiene un pedófilo atrapado en la pared y a una chica que necesita asistencia psicológica.

-No tengo tiempo para esto. -Musita la morena al quitarse la telaraña y salir del callejón con solo un brinco.

-¡Oye espera! -Chilla la chica de leotardo blanco.

-Gracias, Spiderwolf. -Dice la jóven salvada. -Puedes irte, yo espero a los policías.

-¿Estás segura?

-Aunque me hubiera gustado que Venom se comiera a este cerdo... -Le mira con desprecio. -Pero tu trabajo es mantenerla a raya.

-Ja,ja,ja, sí, un poco sí. -Se rasca detrás de la nuca. -Bueno, muchas gracias por tu cooperación.

En tanto, Merlina sigue discutiendo con el spandex negro que le recubre el cuerpo, entre las calles de la cuidad, busca erratica una pista, lo que sea que le lleve a la ubicación de la maldición, hasta que su cuerpo se vuelve a mover por si solo y la obliga a quedarse quieta en una azotea.

Una Luna y Tres Cuartos de Sangre SuciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora