Una Luna y Tres Cuartos de Sangre Sucia

95.- El festín de la victoria.

Mientras Ruthen pasa tiempo con su amiga 10, el rubio sigue buscando la soda favorita de su alfa, lleva cerca de 5 puestos y en ninguno la venden.

-¿Qué nadie aquí trajo soda de toronja? -Pregunta al aire.

-Yo sé donde venden soda de toronja. – Una voz femenina y familiar hace que el rubio voltee. -Ve al primer puesto de golosinas y postres del segundo pasillo.

-Hola, Raquel. -Se rasca detrás de la cabeza. -Es un poco raro verte cuando...

-¿Cuándo mataste a una Raquel hace apenas una hora? -Pregunta la morena que va custodiada por un omega de pelea, una chica rubia de ojos verdes.

-Sí, algo así. –Arregla el cabello en afro de su pequeña. – Di hola, Astrid –Le toma la manita para que salude, la pequeña hasta sonríe

-Awwwww. -Contiene sus lágrimas mientras su corazón da un vuelco. -La jóven primogénita es... es... hermosa.

-Gracias por notarlo, también es valiente y muy vivaz. -Le aprieta las mejillas porque le da consquillas provocando que se ría un poco más enfrente de los omegas que le miran con ternura.

-Pude notar lo valiente. –Señala hacia la cicatriz que lleva en la cara. –Un pequeño cachorro con herida de bala... no se ve seguido.

-Su alfa está ansioso porque aprenda... el oficio del clan. -Ya se imagina a Merlina llevando a Astrid a todos lados para enseñarle a asesinar normies, ocular cadáveres, comprar cosas ilegales... si... todo un Addams.

-Señora, ya es hora. -Le susurra a la morena quien pone una cara triste. –Bueno, Kent, espero la suerte siga bendiciendo a tu clan.

-Igualmente Raquel, despídete Astrid. – La pequeña le ofrece una mirada de ojos miel a Raquel quien en silencio le vuelve a mandar una bendición para que su camino siga colmado de suerte en tanto la pequeña juguetea en su kanguro agarrando uno de los dedos de Kent.

-Astrid es un bello nombre. -Comenta la ojimarron dando vuelta y siguiendo su camino.

-Me sorprendió que le consiguiera un hogar pero... que se convirtiera en primogénita de un clan... -Susurra el omega que le sigue por detrás.

-Quién le consiguió el hogar fuiste tú, Susan.-Da una ligera mirada cómplice a la rubia quien se sonroja y posa sus ojos en el suelo. –Te mandaron para asegurarte que hiciera "el trabajo" es gracias a ti que puede vivir libre y sin reclamaciones. -Si su esposo se hubiese enterado de donde quedo su cachorro "defectuoso" seguro que la mata a ella, luego armaba un escándalo gigantesco para que le regresaran su propiedad y matarlo con sus propias manos.

-Como negarle a un cachorro la posibilidad de vivir... como negartela a ti... -De pensar que la chica muriera se le retuercen las tripas.

Susan es un omega de pelea y "amiga secreta" de la señora Raquel, actual esposa de su hermanastro. Desde que la conoció fue un "sentimiento profano a primera vista" se alegro de que le ordenarán vigilarla en todo momento pues así la ayudo a ella y su cachorro.

Después de ese breve encuentro Kent se dirige a donde le han indicado, encontrando por fin las sodas de Toronja y Fresa que tanto necesitaba, las compra casi cacheteando con su dinero al alfa mal modiento que prácticamente escupe cuando cobra y feliz regresa con su manada.

-¿Ruthen? -Pregunta la morena cuando solo llega el rubio y su cría.

-Se encontró con una amiga, los dejé platicar. -Se sienta a lado de su hermana. – Espero que no le moleste, Bossu.