Una Luna y Tres Cuartos de Sangre Sucia

Espejitos y Luna

-No podría ni atreverme a soñar tan alto. -Es la respuesta de Ruthen quien mantienen pegada la vista al suelo, incapaz de mirar al Alfa que le ha hecho tal propuesta.

-Es un gigantesco sí. -Comenta Enid. -Es un poco raro, pero a su manera acepto tu propuesta.

-¿Eso es suficiente, Bosu? -Pregunta el rubio a sabiendas de que su Alfa prefiere hablar las cosas de frente.

-No. -Dice cortante, a lo que los lobos se encogen un poquito. -No arriesgaré mi vida en una pelea absurda. -Se levanta. -Si quieres ser parte de mi manada dilo, o si quieres quedarte con Fredd es tu decisión. -La chica se levanta y comienza a caminar.

-Pero si dijo que sí. -Chilla la rubia.

-¿Crees qué es un juego? ¿Qué le estoy pidiendo que me ayude en una reta de hockey la próxima semana? -Pregunta Merlina con mala cara, a lo que su esposa infla las mejillas. -No voy a aceptar a alguien que no puede hablar por sí mismo. -Ni siquiera se voltea a ver al muchacho que se ha levantado del tronco donde estaba apoyado. -Nos vamos. -Los chicos caminaron un rato más por el bosque, a paso lento mientras Enid seguía enojada porque Merlina no era paciente con su hermano mayor.

-Bosu tiene razón. -Comenta Kent, a lo que su hermana le mira con sorpresa.

-Traidor, deberías apoyarme. -Menea la cabeza en desaprobación.

-Pero Ruthen no dijo "sí" ¿no te has dado cuenta? Bosu nos pregunto a todos directamente si queríamos pertenecer a su manada.

-Y dijimos que sí. -Contesta Eugene. -Le miramos a los ojos y ¡aceptamos el paquete de ser parte de esta tripulación pirata!

-¿Tripulación pirata? -Enid ladea la cabeza.

-Cosa de Zumbadoras. -Kent sigue con su explicación.–Ser parte de la manada principal del séptimo clan es mucha responsabilidad, Bosu no aceptará a nadie que no tenga las agallas de pertenecer.

-A Ruthen no le dieron nunca la oportunidad de aceptar algo por él mismo. -Dice oliendo el aire, el peli ocre se ha quedado muy atrás.

-A ustedes tampoco. -Señala la ojinegro. -Y aquí están tomando sus decisiones. -Si algo le llamó la atención de Enid, fue que no tenía miedo de ser ella misma aún cuando iba contra corriente.

Los últimos días antes de la luna llena pasaron rápidamente para la manada Addams mientras ensayaban y preparaban su estrategia para la lucha por territorio, fueron desde su modo de comunicación, casos posibles y casos imposibles, hasta cuánta agua puede tomar Merlina y luego orinar cada tantos árboles para marcar un territorio, lo tenían todo bajo control.

-¿Ya vas a hablarme o seguimos fingiendo que no estás ahí? -Pregunta Merlina hacia el extenso bosque cuando estaba orinando un árbol.

-No me encuentro en las mejores condiciones... -Contesta Ruthen.

-Lo sé, hueles a sangre. -No tiene el olfato de Enid, pero es bastante parecido. -Aún así sigues rondando la periferia de mi territorio.

-No sé a dónde mas ir -Comenta con una voz apagada.

-¿A dónde quieres ir?

-... -El chico no tiene una respuesta.

-En ese caso... -Se da media vuelta para seguir orinando otros árboles, es un trabajo más difícil de lo que uno creería.

-... Espera... -Dice en un susurro pero luego se vuelve a quedar callado.

-Que molesto. -Suspira la morena caminando hasta donde el lobo se encuentra escondido.