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—¿Papá? ¿Estás despierto?

Gu Zi jugueteó con un mechón del cabello de Qi Rong mientras observaba el semblante pálido del fantasma. El niño estaba recostado sobre el pecho de su padre, una de las pocas cosas que le gustaba de ser un niño nuevamente. Si se ponía realmente sincero… a estas alturas del partido apestaba ser un niño: tenía el conocimiento de dos vidas y a la gente le costaba hablar de cosas serias con él solo por su apariencia de infante; porque ni la edad tenía: si sumaba los cincuenta años de su primera vida y los veinte de la segunda, tendría más de setenta años… y si agregaba los años que pasó siendo un ave fénix que no podía transformarse, tendría muchos más.

El niño reprimió un escalofrío, sepultando esa información en lo profundo de su mente. Era mucho mejor si no contaba los años, definitivamente. Su único alivio era que Qi Rong sí se lo tomaba en serio, lo cuidaba como si fuera un infante, pero tomaba sus opiniones en serio como si hablara con un adulto al que le tuviera respeto, por eso le gustaba hablar de todo con él.

—¿Papá?
—¿Qué quieres? —preguntó Qi Rong soltando un gruñido, para después abrir los ojos.
—Lang-yifu está investigando sobre lo sucedido con la caída de Xian Le —dijo Gu Zi—. ¿Lo dije bien?
—Sí, lo dijiste bien —dijo Qi Rong—. ¿Cómo sabes eso?

Gu Zi se encogió de hombros y añadió:

—Papá, creo que deberías hablar con Lang-yifu.
—¿Sobre qué? —replicó Qi Rong.
—Sobre lo que pasó antes.
—¿Para qué? No va a cambiar nada.
—Pero Lang-yifu merece saber, así cómo tú lo merecías. Y es tu deber decirle todo así como Gege chatarra te dijo todo a ti.

Qi Rong chasqueó la lengua con disgusto, y aunque sabía que su hijo tenía razón no pudo evitar replicar:

—¿Tú qué vas a saber? Eres un mocoso.
—Tengo 75 años —replicó Gu Zi haciendo un puchero.
—Lo dicho, eres un mocoso.

πππππ

El día siguiente le trajo una sorpresa inesperada a Qi Rong. Cuando abrió los ojos, vio a un adolescente de unos quince años encima suyo, y de no ser porque se le había advertido del crecimiento acelerado de su hijo lo habría aventado lejos presa del espanto.

¡Pero no esperaba un cambio tan abrupto! La noche anterior había estado hablando con una bolita de cuatro años y entre ese momento y este su bolita había crecido. Menos mal pudo vivir su segunda infancia, así que no tenía nada que añorar.

—Tienes urgencia por crecer, ¿no es así? —preguntó Qi Rong con una risa leve.

El fantasma había pasado la noche fingiendo dormir cuando en realidad estaba pensando en lo que Gu Zi le dijo. Sabía que debía enfrentar a Lang QianQiu del mismo modo en que Xie Lian lo había enfrentado a él, pero existía la posibilidad de que Lang QianQiu no le creyera y… esto era algo muy personal para Qi Rong y temía que el enojo por la incredulidad del dios le llevara a atacarlo por ser un idiota. Gu Zi se movió un poco, y el Supremo supo qué podía hacer, por lo que cuando se vio libre del aplastantemente cómodo peso de su hijo llamó al dios y ambos se encontraron frente a la tumba de Ye HuangFei.

Qi Rong estaba dejando un ramo de flores en el sepulcro cuando Lang QianQiu llegó al lugar. El dios observó con recelo al fantasma y preguntó:

—¿Para qué me llamaste aquí?
—Cuando estaba viva, le prometí que no mentiría estando frente a ella —dijo Qi Rong, volteando hacia Lang QianQiu—. Ese juramento sigue igual frente a su tumba. Te traje aquí porque quiero decirte algo y quiero, necesito que me creas, por Gu Zi.
—¿Qué es?
—Voy a contarte porqué odié tan profundamente a Yong An.

❁❁❁❁❁

Agarren los pañuelos, que el capítulo siguiente se va a poner sad. Ya que no hay muchas pistas sobre lo que pasó con Qi Rong cuando lo raptó la gente de Yong An, pues voy a inventar un montón de cosas (?)

Celebremos que finalmente pude actualizar a una hora decente, por favor JAJAJAJAJAJAJAJAJAJA

Ahora, una cuestión. ¿Les gustan las interacciones de Qi Rong y Lang QianQiu hasta ahora? Porque realmente no soy muy buena escribiendo romance así que... Acepto sugerencias C:

Criando un fénixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora