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—Sé de alguien que conoce el lamento fantasmal.

Qi Rong enarcó una ceja con escepticismo, mirando a Luo BingHe.

—¿No había dicho Murong Chuyi que el único que conocía esa técnica era Jiang Qulian? —inqurió.
—Jiang Qulian le enseñó a alguien antes de morir, durante el tiempo que estuvo fuera del inframundo —dijo Shen QingQiu.
—¿Y podemos fiarnos de esta persona?
—Sí. De hecho, vienen en camino.

El Supremo notó el plural, pero prefirió no preguntar más al respecto. Lo importante era que podría perfeccionar su lamento fantasmal para que le fuera útil. Luo BingHe ladeó la cabeza, con una sonrisa socarrona, y preguntó:

—¿Cómo va la evacuación?
—Perfectamente.

Qi Rong había aprovechado algunas noches para entrar en los sueños de la gente del pueblo. Toda esta gente lo adoraba y lo respetaba, por lo que le fue sencillo convencerlos de irse. Lan WangJi y Wei WuXian se habían encargado de la evacuación, mientras que Lang QianQiu ayudó en la reubicación de las personas en un pueblo cercano, para que pudieran regresar con prontitud cuando todo esto terminará.

Todo estaba listo, solo debían esperar el momento en que la secta Su moviera el trasero.

πππππ

Los visitantes mencionados por Luo BingHe y Shen QingQiu llegaron al atardecer. Qi Rong se encontraba midiendo la energía interior de Gu Zi junto a Lang QianQiu cuando escuchó a Wei WuXian exclamar ruidosamente:

—¡Mo Er-Ge!
—Tenemos visitas —dijo Gu Zi, sus ojos brillaron de alegría con la perspectiva de conocer nuevas personas, y Qi Rong se alegró de que su bolita de carne siguiera siendo un niño abierto a seguir conociendo gente.

El fantasma y el dios soltaron al adolescencia, y los tres salieron a ver de quién se trataba. Shen QingQiu señaló a cada uno, presentándolos.

—Este es mi shidi, Shang QingHua —dijo, señalando a un hombre castaño de túnicas azules—. Y este es su esposo, Mobei-Jun —añadió, señalando a un demonio pálido vestido de negro.
—¿Este es el fénix? —preguntó Shang QingHua señalando a Gu Zi, acercándose cuando recibió una respuesta afirmativa—. ¡Es adorable!

Shang QingHua apretó las mejillas de Gu Zi, que replicó:

—No soy adorable.
—Todos los adolescentes lo son.

Mobei-Jun se acercó a Luo BingHe y preguntó:

—¿Quién necesita aprender el lamento fantasmal?
—Yo —intervino Qi Rong antes de que Luo BingHe dijera nada.

Sin embargo, y para sorpresa de todos, alguien más intervino:

—¿Qué sabes sobre el lamento fantasmal?

Mo Xi, acompañado por Murong Chuyi, había llegado en el momento justo. Mobei-Jun miró a ambos, y dijo:

—Es una larga historia. Si tienen tiempo, la contaré.

Qi Rong resopló, escupiendo en el suelo.

—Carajo —dijo, resignado ante la idea de escuchar una historia de mierda que no le importaba nada pero que de todas formas tendría que oír—. Entren a la maldita casa.

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Mini teatro

Qi Rong: ¿No podían haber llegado después? ¡Ahora tengo que aguantar otra historia de origen que me vale mierda!
Mo Xi: Las cosas pasan por algo.
Murong Chuyi: Nosotros solo somos instrumentos de relleno, una disculpa.

JAJAJAJAJAJAJAJAJA ay XD

Miren, el MoShang es de mis shipps favoritas (no sé por qué, no pregunten, solo gocénlo), así que no meterlos cuando el crossover de este arco contiene SAVE iba a ser un insulto para mí :P

Futura alerta de spoiler: en el siguiente capítulo abarcaremos cosas importantes de la novela Impermanencia. Si alguien no la ha leído y quiere leer, les recomiendo no ver el capítulo de la siguiente semana.

Criando un fénixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora