63

90 23 0
                                    

Tres días después, cerca de diez cultivadores de Moling Su se presentaron ante Qi Rong.

—Papá... —dijo Gu Zi con tono de advertencia.

—No te preocupes —dijo Qi Rong—. Este ancestro lo tiene todo bajo control.

Bueno, en realidad Mo Ran era quien lo tenía bajo control, pero esos son detalles. El fantasma se acercó a uno de ellos y dijo:

—Habla. ¿Cuántas personas hay?

—Cerca de 300 —dijo el hombre—. La mayoría son sectas extranjeras que buscan encontrar a Luo BingHe y Wei WuXian.

—Entonces... ¿podemos encargarnos de ellos? —preguntó Luo BingHe.

—No —dijo Shen QingQiu—. Eso sería contraproducente.

—¿Cuál es el plan de Su SiChuan? —preguntó Gu Zi.

Fue otro de los cultivadores el que respondió:

—Reclamar al fénix para robar su inmortalidad.

Gu Zi palideció, y Qi Rong recordó que él no sabía nada. El joven tragó saliva y apretó los puños, tratando de calmarse, y preguntó:

—¿Entonces no le interesan los gemelos?

—Piensa usarlos como medio de presión para el fénix.

—¿Cuándo piensan atacar? —preguntó Shen QingQiu.

Qi Rong no alcanzó a escuchar la respuesta: Gu Zi había salido corriendo y el Supremo fue tras él. Cuando finalmente lo alcanzó, Gu Zi le gritó:

—¡Me mentiste!

—¿Cómo te mentí? —preguntó Qi Rong.

—¡Tú lo sabías y no me dijiste!

—Eso no es mentir.

¡En serio! No era mentir, era omitir información. Gu Zi pateó el suelo con fuerza, gritando:

—¡Es lo mismo! ¿Por qué no me lo dijiste? ¡Tengo derecho a saber!

—Gu Zi...

—¡Ya no soy un niño!

Gu Zi comenzó a llorar. Qi Rong se acercó a él y lo abrazó, considerando una señal de buena suerte que el chico no lo empujara a la mierda y acarició su cabello. Después de unos momentos, Gu Zi se aferró a Qi Rong y se echó a llorar desconsolado.

—Oye, sé que no eres un niño —dijo Qi Rong—. Este ancestro lo sabe, ¿bien?

—¿Por qué no me dijiste? —preguntó Gu Zi.

—Porque no quiero estresarte. Tú tienes demasiadas cosas de qué ocuparte, deja que tu fabuloso padre se encargue de esto, ¿de acuerdo? No dejaré que te hagan nada.

❁❁❁❁❁

Algo cortito, pero bonito. Ahí disculpen la ausencia de la semana pasada, pero el trabajo estuvo fatal y no me sentía anímicamente bien, pero aquí estamos para seguir dándole con todo /._./

Criando un fénixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora