Autor.
¡Y nuevo capítulo!
¡Traído a ustedes por maker-00
¡Disfruten porque será el último!
Ok no...
Verdad que los asusté?
Jajaja, besos, mis seguidores de Rose.
Tan fresco.
El agua de los manantiales submarinos es la mejor; Rose fue muy considerada en colocar el templo en una caverna con uno de estos, más aún, con uno junto a mi habitación; aunque es un poco incómodo bañarse en una cueva, pero supongo que podré hacer mis modificaciones después, estamos en el templo al fin y al cabo.
Igual me siento tan relajada que no puedo evitar bostezar mientras me estiro.
—Vaya, esos sonidos que haces son casi adorables —menciona Eris con la toalla en los hombros.
—¿Qué puedo decir? esas sirenas saben cómo dar un masaje —respondo mientras me miro en el gran espejo de mi habitación, tocando mi cabello ¿Por qué todas las sirenas lo tienen tan largo?—. Aunque aún no entiendo la fascinación general por las sirenas.
—¿Será que son hermosas?
—De la cintura para arriba —reconozco, pero vamos, la mitad inferior es totalmente anfibia, si quieres cogerte a una sirena, es porque quieres cogerte a un pescado.
Eris,secandose el cabello, se limita a hacer una mueca y yo pienso que tal vez para este lugar debería adoptar un atuendo más marino que de costumbre.
—No tengo cómo refutar eso —responde finalmente mientras se acerca—. ¿Me das mi ropa?
—¿Verdad? es extraño que la gente siquiera lo considere... y sólo si me das un beso.
—Es más extraño saber que tienes tus límites... considerando que a veces tú misma eres una sirena —besa mi mejilla, dejando la leve sensación fría, yo quería en los labios.
Me encojo de hombros y tomo su maleta de mi inventario antes de entregársela.
—Aunque no sé porqué te urgía tanto bañarte sabiendo que te iban a asistir —comienza a escoger, o más bien a tomar lo primero que ve mientras no dejo de posar en el espejo.
De verdad, ¿por qué todas las sirenas tienen el pelo tan largo y tan bonito? ¿No lo daña el agua de mar?
—Porque me urgía quitarme toda la sal que me quedó en el cabello tras venir hacia acá, se sentía raro.
—Eso fue casi femenino de tu parte —se coloca un top, sus bragas típicas sin chiste y sigue con sus shorts.
—No me molestes, sabes que no lo soy —si, ya llevo demasiado tiempo viéndome igual—. ¿Crees me vería bien si dejo crecer mi cabello?
Eris aprieta los labios, se coloca su blusa corta y parece querer decir algo, pero abandona la idea y sale de la habitación sin decir nada.
Me encojo de hombros y comienzo a mover mis parámetros.
Veamos...
Altura, uno punto sesenta y tres cm...
Ojos...
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Emisaria De La Diosa Del Mal 2
FantasíaContinuación desde el episodio 74 de la historia original.