Emisaria De La Diosa Del Mal 2

Agotada

—¡Alto! —guardias entraron por la puerta apuntando sus armas; los miré y quedaron inconscientes.

El cuerpo humano es curioso. La persona promedio puede soportar hasta un minuto sin respirar, pero si respira aunque sea una bocanada de aire en un ambiente sin suficiente oxígeno, podría quedar en coma.

La magia de viento era muy conveniente.

—Jazz ¿dónde estamos?

—En la punta de la pirámide. Los demás están luchando abajo.

Caminé hacia la pared, acumulé todo mi mana en mi guante y disparé.

La pared voló y besé a Jazmín, dejandole apenas suficiente mana para que no quedara inconsciente.

—Tomen la información que puedan —tras ordenar a los androides que venían con Jazmín, saqué mi moto del inventario y bajé por la pirámide a toda velocidad mientras disparaba con Jazmín aferrada a mi cintura.

Los robots aéreos iban cayendo como moscas y mi atención se fijó en un coloso en el suelo que no dejaba de destruir.

"¿El robot siendo rodeado? Ya veo, si lo activaron".

Disparé y disparé para quitarle enemigos. Había robots que incluso le superaban en tamaño, pero...

¿Qué pasaba con esas estadísticas?

Aún cuando habían llegado enemigos que lo superaban en nivel, seguía siendo el más fuerte del lugar. Sus atributos eran una locura.

Al notarme, los robots comenzaron a disparar hacia mí y luego de que varios cayeron, finalmente golpearon mi moto.

Jazmín y yo saltamos mientras el vehículo explotaba.

[Transformación]

Me convertí en un enorme basilisco que cayó sobre un robot y Jazmín descansaba en mi lomo.

Corté con mis garras una y otra y otra vez sin fallar hasta que salté al siguiente enemigo y lancé a Jazz hacia un agujero en la pared dónde se cubrían los demás; ella no moriría por eso.

La ira tenía muchos Buffs en realidad. Mi habilidad "Sadismo" no aumentaba el daño al doble si golpeaba sin fallar; lo hacia al triple. Así que, tras recuperar mi forma, comencé a correr de robot en Robot bajo la cobertura del "R.O.S.E", golpeando sin detenerme a comprobar si los había dañado; sólo estaba acumulando potencia.

Llegó un momento en que cada enemigo explotaba por el sólo roce de mis puños y frente a mí, se detuvo un robot bastante singular.

[Robot de supresión de batallones 23d22

Lvl 300]

Lo golpeé y fue todo. La falta de agilidad de los autómatas y su gran tamaño eran su debilidad.

Mis camaradas parecían haberse encontrado con más guardias en el pasillo.

—Ayudalos —ordené al robot y éste corrió hacia ellos.

Usé la joya de Rose para volverme en tipo agilidad. Inesperadamente, la cola gatuna salió del traje cibernetico que usaba.

Me movía más rápido que antes y acababa con cada robot, cyborg o humano en tierra de un golpe.

Finalmente, tras acumular suficiente poder, ataqué el suelo y éste cedió. Toda la calle frente al edificio cayó; eso nos ganaría tiempo.

Entré al edificio con mis camaradas y el "R.O.S.E" era imparable entre los estrechos pasillos, abatiendo soldados sin cesar, pero una duda no estaba clara ¿de dónde salían tantos?