{Narras Tú}
—¿Debo preocuparme? – preguntó y me sentí enternecida.
—No, claro que no – le sonreí.
Me pegué a su brazo y él besó mi frente.
Nos estacionamos sobre la calle frente a la casa de Sofía.
Escuché las puertas traseras abrirse y al instante la chillona voz de mi amiga.
—¡_____! – me abrazó desde atrás casi ahorcándome.
—Hola chicos – dije dándole un beso en la mejilla a cada uno luego de estirarme hacia los asientos de atrás.
Volví a mi lugar y escuché todo el viaje parlotear a Sofi.
Christopher me miraba divertido.
—¿Qué hay con Johann? – le pregunté a mi amiga interrumpiéndola.
—¡Shhh! – me calló ella.
—Está dormido, Sofía – puse los ojos en blanco.
—No importa, eso te lo contaré cuando lleguemos, y más que obvio, sin Christopher presente.
El nombrado nos miró ofendido.
—¿No confían en mi?
—Sí, pero conozco a los hombres, y sé que se cuentan absolutamente todo, así que prefiero que no escuches – ambos reímos.
—Las mujeres también hablan de esas cosas. Son peores que los hombres – se defendió Christopher.
Y así es como empezó un largo debate-pelea acerca de porqué las mujeres son más confiables que los hombres y viceversa.
Envidiaba a Johann, profundamente dormido y sin escuchar la sarta de estupideces que decían mi mejor amiga y mi novio.
A medida que nos alejábamos del pueblo, el sueño volvía a apoderarse de mi cuerpo.
{Narra Christopher}
Luego de pasar la mejor noche de mi vida, aquí me encontraba.
Con el amor de mi vida dulcemente dormida a mi lado, su charlatana mejor amiga atrás, y un tipo del que en algún momento sentí celos, casi muerto.
—¿Cómo la han pasado anoche? – preguntó Sofía desde el asiento trasero.
Si _____ hubiera estado despierta, probablemente se habría sonrojado.
Sonreí.
—Ha sido... Genial – suspiré con la vista en el camino.
—Lo imaginé, no te imaginas lo loca que está _____ por ti – dijo ella.
Volví a sonreír aún más contento. Yo también lo estaba. Potencialmente loco por ella, por su cuerpo, por sus besos, y por esa ternura que destilaba de ella, sin siquiera darse cuenta.
La amaba, y ahora era mía. Absolutamente mía.
{Narras Tú}
Me desperté aproximadamente una hora después.
Christopher estaba estacionándose en el aparcamiento de un camping.
Había una caseta con tejas rojas, y paredes blancas.
El lugar estaba situada en medio del bosque, en una zona estratégica.
Christopher besó mis párpados y yo me acurruqué contra su hombro.
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Enamorada de un Mujeriego | Christopher Vélez
Fanfictie...y entonces descubrió que sin amor, todos los besos saben a lo mismo...