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—Creo que quiere juntarnos...— Comenta Luna mirando a Adela con una sonrisa.

Mientras que Theo le ofrece un trago de su mesa vip, y ella acepta amablemente...

Tuvo que subir, ya que Demian le informo lo sucedió con Adela...

Incluso, estaba, un poco preocupado, pero al verla tranquila con sus amigos, no quiso ir a meter más fichas sobre el tema...

—Creo que no es mala idea...— Sonríe amable...

Aunque cada vez que hablaba con ella la imagen de Elena volaba a su cabeza, lo peor es qué le parecía un completo cliché que ambas fueran rubias.

—Me gusta la gente que tenga las cosas en claro, y vos pareces ser esa clase de persona...— Bebé de su vaso...

Luna mira hacía abajo, se encuentran apoyados casi en la baranda, un poco alejados de los chicos para poder hablar... —No puedo ser de otra manera...— Indica bebiendo de su sorbete.

Theo sonríe, y luego gira su cabeza hacia dónde Adela se encuentra.

—Cuídala... Ella es importante para todos nosotros...— Pide mirándolo a los ojos.

—Como ustedes lo son para ella... Lo intento... Hoy en día ella es importante para mi... No de la manera qué la mayoría piensa...— Explica sincero juntando sus cejas tiernamente.

—Adela no es una persona con la cuál se puede jugar... Tarde o temprano van a darse cuenta lo rota que esta por dentro... Y de lo mucho que sufrió en su vida...— Suspira, aún, sin quitarle la vista de sus ojos... 

Theo sonríe. —Lo se.— Suelta

—Solo... Necesita amor... Como todos...— Sonríe sabía...

—Mientras esté a mi lado, no voy a dejar que eso pase, pero yo no seré quién le de eso... Sin dudas...— Bromea.

—Se que no sos como él...— Señalando con la cabeza a Demian, que se encuentra bebiendo con una rubia a su lado...

Theo esboza una sonrisa. —¿Que te hace pensar eso? Vivo las veinticuatro horas del día con él, y trabajo a su par todos los días desde hace muchísimos años.— sonríe con orgullo...

—Tus ojos...— Responde Luna sin pensarlo.

Theo alza sus cejas y luego niega con la cabeza. —¿Que?— Murmura parpadeando.

—La manera en la que miras a la gente habla de vos.— Agrega.

Él no sabe que hacer o responder, ella parece ser interesante, de la misma forma que Elena no deja de aparece en su cabeza una y otra vez. Y es por eso que su mente es un nido de palabras yendo y viniendo.

—¿Si te invito a cenar o almorzar un día, aceptas?— Cuestiona apretando sus labios, a la espera de la respuesta...

Luna sonrie de costado y parpadeo. —Yo no sirvo para ser chica de una noche... Así que te agradezco tu interés, pero creo qué no saldrá nada bueno de eso.— Comenta sin nota de enojo en su voz, al contrario pura calma...

—¿Yo dije que lo fueras?— Se burla, arqueando sus cejas.

Dándose cuenta de que Luna no es cómo Elena, por más que quiera compararla con ella.

Elena conoce todo de él y eso es lo qué la hace especial.

—Se la vida que llevas, y que en este instante sólo me podes dar eso...—  Argumenta.

Theo abre los ojos, y luego sonríe asintiendo con la cabeza... 

—Pero me gustaría en algún momento almorzar con vos... No ahora.— Responde finalmente.

EL PROTECTORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora