EL PROTECTOR

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—¿Qué hace acá?— Ella frunce sus labios y aprieta sus puños tomando su cartera con su peor cara.

Su cuerpo comienza a temblar cuándo lo ve ingresar al estudió, en dónde ella está, hace no más de veinte minutos, realizando las primeras fotos para la campaña de Burberry, habían llegado a un rápido acuerdo y la castaña aseguraba que sería de gran ayuda para la imagen de la empresa, ya que las fotos eran cuidadas, con excelentes profesionales y la ropa era de gran Vanguardia...

Por lo que no tuvo mucho que pensar realmente...

Pero todo su cuerpo se congela cuándo ve ingresar al culpable de sus lágrimas y de sentirse tan sucia...

Además quién no se pondría así al verlo, con todo su imponente cuerpo, su perfecto traje, e incluso todo en el es perfección, salvo qué Adela lo conoce, y se da el lujo de decir que lo conoce lo suficientemente bien como para asegurar que no es perfecto, y saca de lado absolutamente el detalle de las drogas, de su doble profesión y de lo apasionado que es por matar gente

Adela se basa en algo mucho más profundo, lo poco que él cumple sus palabras, lo rápido que alguien se aburre, o incluso, se da por vencido, aúnque, quizás simplemente nunca fue nada para él, cómo para ella sí, pero, ahí está el punto, de jugar con alguien que se encuentra tan devastada que va a terminar sediendole su corazón, a alguien que claro no lo merece, y que no lo va a cuidar cómo prometió, y que no tenga palabra para ella, es más que suficiente para sacarle ese mote de perfecto que le dan en los periódicos y revistas de chimentos...

Alza su barbilla y mira a Mark, quien está detrás de las cámaras, él se levanta y estrecha manos con sus compañeros de trabajo.

Pero se mantiene a una prudente distancia de la castaña, por si a ella se le ocurre salir de allí a las corridas, cosa que nadie pasa por alto, y por eso mismo Tyler se encuentra vigilando el auto, al igual, que dos custodios más de Demian en sus camionetas frente al estudio...

Demian sonríe de costado y relame sus labios a penas la ve...

Se acerca lentamente a ella, y todos en la producción se silencia y ven la escena, los editores y los fotógrafos se quedan con la boca abierta al ver a Demian Maloy, quién claro, no pasa desapercibido en ningun lado.

Él simplemente mira su reloj pulsera antes de pararse frente a ella, abre sus párpados y sus pestañas naturales y tan claras casi tocan sus cejas.

Adela no pierde ni un sólo movimiento de su rostro, Gio y Seth esperan detrás de él, casi que sin respirar de la tensión que se puede palpar inmediatamente.

Ella suelta el aire contenido en sus pulmones, que por supuesto ni idea tiene de que esta conteniendo la respiración hasta tal punto, y aprieta, una vez más, sus labios sin decir una sola palabra...

—Se adelantó la junta... Te vine a buscar porqué tu inoperante empleado no te lo habrá dicho, Wood y cómo sabras no estamos para perder el tiempo.— Alza sus cejas cómo si estuviera aburrido.

Rueda los ojos acomodando la manga de su carísimo traje italiano, al mismo tiempo, que está conteniendo todo lo que su cuerpo quiere soltar, y si no suena asqueroso y prepotente para con ella no podrá ocultar por mucho más tiempo lo que le esta ocurriendo con su cuerpo...

Se le hace muy difícil poner ese tono frente a Adela, la necesidad de tenerla frente a él, sólo para él, poder besarla sin siquiera tener que pedirle permiso, o tomarla entre sus brazos parece tan lejana que eso lo hace enfurecer.

Adela traga saliva sin poder decir una sola palabra, por miedo a quebrarse, aprovecha el silencio y mira a su alrededor, dónde los fotógrafos están viendo las fotos en las que ella acaba de posar y preparando su segundo vestuario.