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—¿Que paso entre ustedes?— Theo lo mira burlón.

Demian muerde sus labios, mientras se tira en la reposera.

Adela dibuja en la mesa del living, por lo cuál los chicos la pueden ver desde dónde estan...

—¿Qué?— Rueda los ojos...

Theo muerde su labio inferior. —Te conozco más de lo que te gustaría que te conociera y entre ustedes dos ayer pasó algo...— Habla divertido y con autosuficiencia...

—Soy un caballero, Theodore y no tengo porque responder eso...— Sisea.

Theo suelta una carcajada. —Hace mas de diez años vivimos juntos...— Acota. 

—¿Y eso qué?— Murmura.

—Tenías fiebre a la mañana y volviste echo un leon... Sos demasiado obvio... Más cuándo se trata de ella, a las tres horas me pediste que compre su casa...— Levanta las cejas entrecerrando sus ojos.

Demian hace una mueca incomoda con sus labios, mientras que niega con la cabeza, ante la intensidad de su mejor amigo de seguir preguntando. —Nos besamos, nada más que eso... Pero por supuesto, qué besarla no es novedad para mí porque ya sabes que lo hice con anterioridad...— Levanta los hombros restandole importancia.

Theo sonríe cómo un pequeño gatito. —¿Te gustó?— Mete en su mano un puñado de papas fritas, mirando las olas ir y venir a lo lejos.

—Bastante... Me sorprendí, por eso te digo que la isla me pone de mal humor muchas veces...— Moja sus labios y se lleva su botella a los labios. 

—¿Por qué lo haces?— Suelta.

Demian niega con la cabeza rodeando los ojos. —Porque se me canto en ese momento comerle la boca... Estaba caliente... Y ella estaba con su diminuta bikini. ¿Qué podría ponerse algo más grande, no?— Levanta sus hombros acomodando su gorra y mirando a su amigo...

—No juegues con ella...— Eleva una ceja en tono amenazante.

Demian le hace un gesto de "qué hambre" con sus labios y sonríe... —No digas pavadas, Theo.— Murmura bajo.

—Esta vulnerable, y ni siquiera debes saber lo que estás haciendo con ella...— Niega con la cabeza levantando ambas cejas.

—¿Sabes porqué la volví a besar?— Traga saliva, poniéndose serio...

Theo niega, tomando una lata de cerveza y abriéndola... —Iluminame porque estoy bastante perdido...— Hace una mueca de costado moviendo su mano mojada, gracias a qué había salpicado y tomando un sorbo.

—Porque no me cuestiona el echo de que la bese, o no me pide explicaciones después de hacerlo, lo hacemos y después podemos hablar de granito y hormigo cómo si no acabara de pasar nada... O simplemente volver a nuestras peleas...— Mueve su cabeza pensativo.

—Carajos.— Susurra entre risas el ojigris.

Demian sube sus hombros. —Me gusta eso... No me pregunta por qué lo hice...— Murmura relamiendo sus labios...

—Están cómodos los dos...— Sonríe de costado, mirando a su amigo que le devuelve una mueca con su rostro sin saber que responder.

—No lo sé.— Se muestra ofuscado.

—O no se animan a cuestionar lo que están haciendo porque les gusta... Si se lo llevan a cuestionar por un minuto van a dejar de hacerlo porque se van a dar cuenta que están haciendo algo que ninguno de ustedes dos deseas...— Levanta los hombros apretando sus labios. 

—Menos mal que a la psicología no te dedicaste...— Sisea, tomando el paquete de papas fritas. —Porque si me psicólogo se entera que me estás diciendo esto te sacan la matricula...— Suelta una carcajada ante la cara de aburrimiento que pone Theo.

EL PROTECTORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora