One Shots ☯ Teen Wolf

24. Jackson Whittemore

- No puedo creer que aceptaras - me dijo Malia.

-Es la única manera de tenerlo junto a mi - le dije mientras cerraba el casillero.

-Hay otras manera, que no son acostarte con él...

-Y que me use como un trapo lo sé, pero nadie más lo puede saber - dije y empecé a andar, no era mi culpa que me hubiera enamorado del más hijo de puta de mi escuela.

-¿Lo sabe Lyds?

- Si y no, sabe que me gusta, lo acepta y eso pero no sabe que me estoy acostando con él - le expliqué cansada esperando un reproche.

-No lo digo porque este celosa, porque está con Stiles, pero es tu hermana - Lydia y yo nos llevamos 9 meses exactos por lo tanto somos del mismo año.

-Mira deja de darme el sermón Malia, me voy a seguir acostando con él quieras o no - dije poniéndome delante suya.

-¿Con quién te vas a seguir acostando? - esa voz, esa voz que hace que mis bragas se empapen.

-Con nadie de tu incumbencia Whittemore, ¿por qué alguna sugerencia?

-Varias pero en primer puesto - se acercó a mi oído, Malia me miraba con odio, sabía que él me utilizaba y que yo no hacía nada a cambio - estoy yo te veo está noche - y se fue, como hace siempre.

Esa noche pasó lo de siempre, nos acostamos, un aquí te pillo aquí te mató, nada de tocar, penetración en varias ocasiones y hasta luego Lucas, nunca me quedaba, sabía que si yo no me iba él me echaría.

-¿Otra vez? - preguntó Malia colocándose a mi lado.

-Sabes la respuesta no me hagas sentir peor - dije hagachando la cabeza, me empezaba a hartar de ser un trapo de usar y tirar.

Un chico se me acercó y me dio su teléfono - Llámame cuando  Whittemore te deje tranquila - No me creía lo que acababa de pasar, yo no era una cualquiera.

Corrí al salón de Jackson -Jackson Whittemore, Jackson - gritaba por todo el pasillo, me daba igual todo en ese momento ese jugador de Lacrosse se iba a enterar de que se había equivocado.

-Que te pasa pequeña Martín.

-Leyla, ¿que te ha pasado? - me preguntó mi hermana al verme con las lágrimas corriendo por las mejillas.

-Que sepas Whittemore que no soy tu puta personal y menos la de tu amigos - le dije, su rostro cambio y se puso pálido, si mi hermana se enteraba tendría problemas al igual que yo.

-¿De que habla mi hermana Jackson? - preguntó mi hermana acercándose a mi.

-De nada, ¿Leyla a que te refieres?

-A que el hecho de que me acostara contigo era porque me llevas gustando desde que te conocí no porque sea una cualquiera, pero claro el capitán de Lacrosse no tiene sentimientos como para darse cuenta de eso - lo solté y aunque me arrepentiria, no lo quería seguir guardando.

-¿Jackson has usado a mi hermana de follamiga?

-Noooo - gritó, cuando consiguió salir del shock -Jamás haría eso - se rasco la nuca, seguramente recordando todas las noches que nos habíamos acostado -Solo nos acostamos.

-Eso es ser una follamiga - gritó Lydia - Eres un imbécil, te dije que no te metiera con mi hermana, pero nada.

-Déjalo yo acepté Lyds - dije acercandome a ella.

- No lo defiendas, no hay nada que defender, ambos habéis sido unos infantiles, Jackson por acostarse contigo y usarte sólo para follar y tú por creer que un tiempo se enamoraria de ti - el profesor entró en la clase interrumpiendo el discurso de mi hermana.

-Todos a sus puestos - habló y yo salí de la clase y empecé a correr a mi casa.

Me faltaba una cuadra para llegar a mi casa, a mi hogar cuando me choque con alguien.

-Auch - dije sobandome la cabeza.

-Leyla perdón- dijo una voz familiar, miré hacía arriba encontrandome con unos ojos verdes - ¿Estas bien?

- Si, gracias Derek, no te había visto - dije sonriendo, este hombre era capaz de intimidarte con cualquier cosa que hiciera.

- Estas segura, tienes los ojos hinchados, por no decir que tú rimmel está totalmente corrido - llevé rápidamente mis manos a mis ojos, pero cuando me frote, me acordé que esa mañana no me había puesto rimmel.

- No llevo rimmel - le dije riendo.

-Ya pero quería que sonrieras - no pensaba que Derek Hale fuera agradable.

- Me sorprendes Hale, te esperaba más sourwolf - dije empujando su hombro, aunque evidentemente no sirvió de mucho.

-Y tu me ofendes, a veces soy agradable y cuando una joven se choca conmigo y encima viene llorando, me sale el instinto paternal digo yo - me empecé a reír todavía más.

- ¿Tu instinto paternal?, no soy tan chica - dije haciendo me la ofendida.

-Ni yo tan joven - alzó una de sus cejas haciéndome reír.

- No superas los 25.

-Y tu no superas los 14 - mi boca formó una O.

-Eso sí ha dolido, tengo 16 - dije posando una de mis manos en mi pecho y empezando a reír.

-Ya estás riendo mi trabajo ha resultado positivo.

-Gracias sourwolf- dije sonriendo.

-Vamos a mi loft tengo helado y pelis, y ya de paso me cuentas quien demonios te ha hecho llorar.

Ese día lo pasé hablando con Derek en su loft, Malia llegó y se unió a la charla, sobre las 10, mi hermana llegó atacada buscandome, increíblemente Jackson iba con ella.

-Leyla vamos a casa - dijo cuando Derek volvió a su puesto al lado mía en el sillón.

-Deja que se quede aquí, estará Malia también, prometo no violarla - dijo Derek y miró a Jackson.

-Yo no he violado a nadie, ella aceptó gustosamente - dijo adelantando a mi hermana.

- Ese tema lo dejamos aparte, Leyla tenemos que hablar, vamos a casa - me dijo - Por favor - sus ojos también estaban rojos, se había asustado de no encontrarme.

-Vale, mañana vuelvo sourwolf- le dije a Derek, y le di una abrazo.

-Cuidate pequeña - dijo depositando un beso en mi cabeza.

-Te quiero amiga - dijo Malia abrazandome.

-Mañana irás a la escuela - dijo mi hermana.

- No pienso ir, menos desde que todo el mundo piensa que soy la puta de turno - dije con las lágrimas a flor de piel.

-Ya he hablado con todos, nadie piensa eso- dijo Jackson.

-¿Y qué piensan? - indage.

- Que eres mi novia y por eso me acuesto contigo, te lo iba a pedir ayer, pero me daba miedo de que no me aceptaras- dijo agachando la cabeza.

-Tienes una extraña manera de mostrar sus sentimientos - dijo Derek.

-Y tu una extraña manera de sacarme la novia - dijo Jackson y sus ojos tornaron verdes.

-Nadie tiene maneras extrañas, Jackson te quiero y me alegro que me lo hayas "pedido", y Derek para, prometo que si me hace daño te lo cuento - Jackson se acercó.

-Te quiero y eso me da miedo, no quiero hacerte daño.

- No lo harás - le dije y lo besé, lo besé por primera vez.