One Shots ☯ Teen Wolf

38. Theo Raeken* {CELO}

Maratón 5/6

Había estado lloviendo todo el día, ni se me pasaba por la mente salir, pero algo me decía que tenía que salir, que había algo fuera que me llamaba.

Por la tarde, vi una silueta fuera entre los árboles, salí fuera al ver quien era, Theo estaba fuera, mojandose.

-¡Theo! - grite desde el porche, salió corriendo hacía él bosque, corrí tras él, otra vez esa sensación, en un momento lo perdí de vista, miraba por todos lados.

No estaba, no había nadie, volví andando hacía mi casa, temblaba de frío, como no veía bien, pise un agujero y me torci el tobillo, empecé a llorar por la frustración.

-¡Ayuda! - grité al ver que no me podía mover.

Vi una silueta acercarse, me cogió, no supe más nada, me quedé dormida por el frío.

Escuché el sonido del agua a un lado de mí, estaba en mi cama, ¿cómo había llegado a mi cama?

Abrí los ojos y pude ver a Theo con un paño mojado en las manos.

-¿Me has rescatado? - asintió - ¿Por qué huiste?

-Porque no debería estar aquí, no quiero hacer cosas que te perjudiquen - dijo poniendo el paño en mi cabeza.

-¿Como qué? - vi temblar su mano y sus ojos se pusieron amarillos.

-Estoy en celo, sabes lo que es el celo, pues tu eres mi mate y eso me está matando, porque mi lobo quiere hacerte mía, pero yo, el humano sabe que estás con otro - dijo agachando la cabeza, claro que sabía lo que era el celo.

Mi mano fue a su mejilla y la acaricie - ¿Desde cuándo lo sabes?

-Desde que te conocí, desde hace 3 años - sus manos temblaban, se estaba controlando y mucho, estaba luchando porque su lobo no lo posellera, pero si soy sincera, yo quería que eso pasará.

-Theo, yo... rompí con Stefan hace una semana, nadie lo sabe de la manada, pero me ha estado poniendo los cuernos durante los últimos 3 años, lo siento - dije al borde de las lágrimas - siento tanto que hayas tenido que pasar ese dolor porque yo estaba ciega - no pude acabar porque me besó, no puedo decir que nunca haya imaginado este momento, porque si lo había hecho y superaba las expectativas.

La ropa empezó a volar por el cuarto, cualquier impedimento que hubiera para que nuestras pieles se rozaran volaba por los aires - Deja a tu lobo que controle, no pasará nada - dije antes de notar como los ojos de Theo se ponían amarillos y como sus gestos eran más bruscos, entró en mi de una estocada, quería marcarme como suya quería borrar cualquier rastro de Stefan y yo también quería que eso pasará.

Sus embestidas daban en un punto que me enloquecia, nuestros labios se desgastarian con la fuerza de como nos besabamos, cuando un cosquilleo se hizo presente en mi vientre bajo, supe que el orgasmo estaba por llegar, ambos llegamos juntos al éxtasis, Theo me mordió para que ya nadie más pudiera quitar el puesto que tantos años había estado esperando.

- Te quiero Theo - susurre como pude con todavía la sensación del orgasmo y la mordida.