Femir (No hay Emir sin Feriha)

Luna de miel de Emir y Feriha - Parte II

20 días después...
Habían visitado muchos otros lugares:

El Empire State Building, un gran icono de Nueva York, que ya ha sido retratado en numerosas películas y series. Subieron hasta el 86° piso, donde se tiene un mirador a cielo abierto y con una vista maravillosa de Manhattan. Subieron hasta el 102° pero el mirador en el último piso es cerrado y la vista es muy perjudicada porque el vidrio se empañan. El más contradictorio fue que la mejor vista del Empire State Building fue de la cima de otro edificio: el Rockefeller Center, el Top of the Rock, además de ver el Central Park. Al final de la tarde, observaron la puesta del sol de arriba del edificio y luego la ciudad se iluminó hacia la noche.

El Times Square representa el bullicio de la ciudad y marca el encuentro de dos importantes vías de la ciudad, Broadway y la 7ª Avenida. Caminaron por la multitud y sacaron muchas fotos de todos los ángulos, alrededor de las muchas pantallas en los edificios con propagandas y tiendas famosas. Cruzaron el puente del Brooklyn en bicicleta, fue una experiencia inolvidable. Se aprovecharon el escenario de fondo para garantizar hermosas fotos. Caminaron lentamente y apreciaron ese gran símbolo de la ciudad en un tour guiado que cuenta toda la historia de ese gigantesco puente que une Manhattan a Brooklyn. Y aprovecharon para disfrutar del crepúsculo, una visión fantástica.

Fueron a la cima del One World Trade Center, donde se encuentra uno de los miradores más apasionantes de Nueva York conocido como One World Observatory. La experiencia de subir en el One World Observatory fue escalofriante y pudieron garantizar excelentes fotos del One World Trade Center al caminar por las calles del barrio Lower Manhattan donde se encuentra el edificio.
Visitaron el High Line Park, el parque suspendido de Nueva York. Construido sobre antiguas líneas de trenes que cortan la ciudad, el parque es diferente de cualquier otro parque del mundo. Fue una experiencia muy agradable en la que se dieron varios besos, caminaron de la mano y cambiaron varias caricias y juras de amor.

Entraron en la Grand Central Station en Nueva York, fue de perder el aliento. Estación que ya ha sido escenarios de cientos de películas, series y shows de televisión. Allí encontraron miles de neoyorquinos y cientos de turistas. Un lugar que esconde varios secretos, curiosidad y atracciones.
Andaron en el Bondinho de Roosevelt, un medio de transporte entre Manhattan y Roosevelt Island. De la que tuvieron una hermosa vista de Manhattan y una experiencia típica de Nueva York.
Visitaron el Museo de Historia Natural de Nueva York, sacaron una tradicional foto delante del gran dinosaurio y visitaron a todos los personajes de las exposiciones. Durante el paseo fue imposible no recordar las escenas de la película "Una noche en el Museo".

Disfrutaron de un paseo en un autobús turístico (los famosos Hop-On Hop-Off), de esa forma pudieron ver todos los principales puntos turísticos de la ciudad.
Asistieron a un juego de los New York Knicks. Fue un partido emocionante para Emir que es fan y buen jugador de baloncesto. Se sentaron en un buen lugar, en el que podían apreciar todo de cerca.
Asistieron al Fantasma de la Ópera, uno de los musicales más populares de Broadway.
Hicieron compras en el outlet de Woodbury. Un paraíso de las compras, donde hay tiendas outlet de casi todas las marcas famosas.
Caminaron por las calles del distrito financiero de Nueva York. Wall Street, que fue muy retratada en varias series y películas de Hollywood.
Cruzaron el puente de Brooklyn, fueron al Parque del Puente de Brooklyn (Brooklyn Bridge Park) donde disfrutaron de una experiencia nostálgica al caminar en el antiguo carrusel que ya hace historia entre los puntos turísticos de Nueva York, el Carrusel de Jane (Jane's Carousel). Pedalaron sobre el Manhattan Bridge y consiguieron la foto tan típica de una tarjeta postal.

En el último día en Nueva York hicieron un paseo en helicóptero sobre Manhattan. Fue una experiencia inolvidable e inspiradora, ve Manhattan de arriba, lo que les recordó cuando Emir hizo la sorpresa a Feriha de sobrevolar Estambul.