Femir (No hay Emir sin Feriha)

Celosa

Al día siguiente, Emir y Sarp tuvieron que hacer un viaje de negocios, pero regresaron la mañana del día en que habían acordado ir al Hills.
Durante este tiempo, Emir y Feriha hablaron con frecuencia por llamadas de voz y mensajes. La verdad es que pasar un par de días lejos de él, la hizo se da cuenta que ya no podría vivir sin él.
Feriha había preparado un desayuno con todo lo imaginable, Ahmet, Hakan y Maral estaban jugando en el salón mientras su mamá fue a darse una ducha, despues se puso un vestidito romántico y le gustó de cómo se vía en el espejo.
Cuando ella estaba bajando las escaleras, Emir llegó a casa.
Emir: hola familia - dijo entrando en el salón.
Ahmet, Hakan y Maral: ¡papá!, te extrañé demasiado - dije cada uno corriendo para abrazarlo.
Ellos se saludaron como solían hacer, con besos tiernos en las mejillas y abrazos apretados.
Hakan: ¿como estuvo el viaje?
Emir: su tío Sarp y yo resolvimos todo lo que habíamos planeado.
Maral: ¿y qué hiciste durante tu tiempo libre? - preguntó con curiosidad.
Emir: no tuvimos mucho tiempo libre pero junto con su tío vimos un poco de la ciudad y el resto del tiempo libre descansamos en el hotel.
Ahmet: ¿es cierto que en el punto turístico principal de ahí está cerca del aeropuerto donde los aviones sobrevuelan a pocos metros de las cabezas de las personas? - preguntó queriendo saber detalles porque le encanta la aviación.
Emir: sí, cuando los aviones sobrevuelan allí, da la sensación de que caerá sobre tu cabeza.
Hakan: papá, ¿el señor y el tío Sarp tuvieron el coraje de ir allí?
Emir: sí, cariño... al principio da un poco de miedo, en realidad pero luego tuve un subidón de adrenalina y me encantó.
Ahmet: papá, ¿hiciste un vídeo?
Emir: sí, se lo mostraré a todos más tarde.
Maral: papi, ¿cuando regreses allá, podríamos ir todos, ¿no es así?
Emir: me parece una idea fantástica, princesa.
Feriha: niños dejen que su papá respire un poco, acaba de llegar a casa después del viaje, necesita descansar - dijo mirando a los tres y luego a Emir - hola, cariño - dijo abrazándolo.
Emir: hola princesa, te extrañé mucho - dijo abrazándola.
Feriha: tambien te extrañé demasiado - los dos cruzaron miradas apasionada - ahora vamos a desayunar, ¿sí?
Emir: de hecho, tengo mucha hambre - dijo mientras caminaban hacia la mesa - wow, todo parece muy rico.
Feriha: lo hice... ya sabes, para darte la bienvenida - dijo ella, sonriendo tímidamente.
Emir: gracias, mi amor, no te necesitaba tanto - dijo él, abrazándola y besando su mejilla y luego la miró fijamente por algún tiempo.