Destinadas (Supercorp)

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Ya por la noche en Nacional City, todos estaban reunidos en la oficina de J'onn, solo faltaba James y Kelly que había ido a por él para cenar juntos y después reunirse con los amigos.

James no sospechaba nada, estaba a gusto con su hermana y eso lo calmaba por dentro.

Cuando llegaron le dijeron a James que se sentara en la silla, ya que era el único sitio libre.

Así lo hizo y Brainy apareció por detrás y le puso unas esposas en las muñecas para atarlo a la silla.

— ¿Pero qué haces Brainy?—preguntó tratando de librarse.

—Lo siento hermano, pero esto es una intervención. Tu comportamiento es detestable y todos los que te queremos estamos aquí para recuperarte. —explicó Kelly.

— ¿Por qué me hacéis esto? yo estoy bien.

—No lo estás James, lo que ha sucedido hoy, ha sido el cúmulo de todo lo que has aguantado estos meses. Siempre te preguntamos cómo estabas y siempre ibas con evasivas y diciendo que estabas bien cuando en realidad no lo estás. —dijo Kara.

— ¿Qué te pasa hermano? —preguntó Kelly, se notaba en su voz la preocupación.

—Después de que Lex me disparará y que Lena me salvará, empecé a sentirme solo y a la vez importante porque todos estabais pendientes de mí. Cuando ese suero empezó a afectarme mentalmente me lo extrajisteis sí, pero mis miedos y mis traumas que tanto trabajo me costó guardar y tratar de olvidar, volvieron y se quedaron. Ni siquiera el psicólogo me ayudaba, solo me daba medicación para la depresión y poder dormir, pero eso lo que hacía era que no pudiera despertar de mis pesadillas. Al ver que todos hacéis vuestra vida, traté de pasar desapercibido, pero mi rabia y mi dolor se iban acumulando más y más...

—Hasta que has explotado pagándolo contra una persona inocente despidiéndolo. —dijo Kara.

—Sí. —miró al suelo.

— ¿Sabes porque te sientes solo? —preguntó Kara. James no dijo nada, solo la miró. —porque te alejaste de nosotros. James yo he pasado por un trauma hace meses, por eso estuve cuatro meses de baja, no quería ver a nadie. Pero un día sin importar lo que yo quería, aparecieron en mi puerta Alex y Lena y desde entonces he luchado para mejorar como persona y superar todo lo que sucedió el año pasado.

—Ya te lo dije tiempo atrás James, sabemos que en el pasado has sufrido mucho, pero tienes que entender que todos hemos sufrido lo nuestro y que nos apoyamos los unos a los otros. No eres especial. —explicó Nia.

—Nos contaste tus traumas y entendimos porque estabas tan silencioso. Hasta me culpé por inyectarte el suero cuando contaste que todo salió a la luz por culpa de la cura. No sabía que podía hacerte daño de ese modo, solo quería salvarte la vida, porque me importas, eres mi amigo y aún recordaba el tiempo que estuvimos juntos y no iba a permitir que murieras. Pero este comportamiento tan errático es preocupante. Kara dice que te pasas el día serio y cuando se te habla no contestas, estás como ido y después saltas con esos berrinches. No te entendemos, pero queremos hacerlo. —explicó Lena.

—Jajajajajajaja ¡No me hagas reír Lena! —todos se sorprendieron por esa reacción. —Nunca os he importado, siempre estabais más por Kara. Kara esto, Kara aquello. ¡Sí sé que perdió su mundo y a su familia y que! —miró a Kara y destilaba odio en su mirada. — ¡Supéralo de una vez!

— ¡James! —gritó Alex.

— ¡Y tu Alex, que estás con mi hermana y no has sido capaz de contarle sobre Kara! ¡La que no ha dicho nada sobre su anterior relación fallida porque Maggie huyó! ¡Buabuabua, mi prometida me ha dejado porque no quiere tener hijos, buabuabua! —Alex no dijo nada solo miró hacia otro lado cerrando los puños con fuerza.