Lena sabe la verdad de Kara, Lex se lo contó antes de que ella lo matara. Se enfada con Kara por descubrir que la amistad que tenían no era real, pero una carta escrita de puño y letra de ella, da respuesta a algunas cosas y el enfado se convierte...
Era el día más esperado para la familia Zor-El, la hija mayor de Zor-El y Alura, se iba a casar con otra kriptoniana permaneciente de la familia Ra. Era la única que se iba a casar con otra persona de su raza y por el rito kriptoniano.
Lara estaba en su habitación, llevaba un uniforme militar con su escudo en el pecho, era de color rojo vino con las costuras doradas y las botas negras, no llevaba capa.
Kara entró y la vio mirarse en el espejo.
—Te pareces tanto a la tía Astra. —en sus ojos se podían ver un poco de tristeza, pero se recuperó enseguida.
—Se me hace raro ir así.
—Culpa a Lena, no quería que a tu boda fueras con el traje de combate, a mi no me dejó llevarlo.
—Eso lo entiendo, pero...
—Lara estás espectacular, no le des más vueltas.
— ¿Cómo se ve Rachel?
—No lo sé, no he ido a verla todavía, pero seguro que se ve fabulosa, su vestido de novia es kriptoniano, lleva su escudo en el pecho, creo que hace mucho tiempo que no llevaba ropa de Argo. —explicó Kara.
—Hoy más que nunca debe de extrañar a sus padres.
—Como tú a papá.
—Sí, pero al menos está mamá, a ella no le queda nadie que represente su familia.
—Voy a ver cómo van ¿de acuerdo?
—Si.
Kara se marchó dejándola sola de nuevo.
En la habitación de huéspedes que había al otro lado de la casa, estaban Santana, Brittany y Quinn con Rachel, la estaban arreglando.
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(En medio de su pecho estaba el escudo de su familia, el símbolo del infinito)
—Perfecta, Lara se morirá al verte. —dijo Santana.
— ¿Un Kriptoniano puede morir de un ataque? —preguntó Brittany.
—No. —dijo Rachel.
—Pues algo le da seguro. —dijo Santana.
—Haber, no sabemos cómo son las bodas kriptonianas, pero las bodas humanas hay una tradición con la novia. Lo azul es la liga que te ha dejado Brittany. —dijo Quinn.
— ¿Eso cuenta también como prestado? —preguntó Brittany.
—Sí, pero deja para las demás, no te acapares todo. —dijo Santana.
—Lo nuevo es el vestido por cortesía de los robots esos de Lara. —dijo Quinn.
—Kelex, se llaman Kelex. —dijo Rachel aguantando la risa.
—Pues eso, lo viejo te lo doy yo. —dijo Quinn, le entregó un colgante que le había entregado su madre.
—Yo daré lo prestado. —dijo Santana entregándole los pendientes que llevó en su boda.
