Una semana después al fin llegaron a su destino, Rachel sonrió de felicidad al ver su planeta, no pensó en él en mucho tiempo, pero al verlo de nuevo se sentía en casa.
Entraron en la atmósfera del planeta, cuando vieron tierra entre las nubes, Lara aminoró la velocidad y aterrizó en un valle plano rodeado por un río y bosque.
Apagó los motores y después se quitó el cinturón, Rachel hizo lo mismo y las dos salieron de la nave.
—Aquí es donde está Argo. —dijo Rachel.
—Bien. —picó de palmas y volvió a la nave, buscó por ella algo que les sirviera para excavar.
En una de las paredes había una pala de viaje, esas que se encogen el mango, ataca con cintas de velcro.
La cogió y volvió al exterior, miró hacia el cielo, directo al sol, cerró los ojos e inspiró profundamente, después expiró el aire contenido y cuando sintió que sus fuerzas volvían a ella, ya que ese sol también era amarillo y le otorgaba a los kriptonianos sus poderes. Se alejó un poco de la nave y de Rachel y empezó acabar, haciendo un gran círculo, cuando terminó empezó a extraer toda la tierra, necesitaba alcanzar varios metros de profundidad para encajar la ciudad en el suelo.
Usó la súper velocidad pero aún y así tardó varias horas en terminarlo. Cuando lo consiguió se la veía algo cansada, Rachel le entregó una botella de agua y se la bebió entera.
Lara volvió a la nave y guardó la pala que parecía más un manojo de metal, después cogió la ciudad que había guardado con mucho cuidado y levitó hasta el centro del agujero, dejó la "bola" y volvió a la nave, cogió el arma y le cambió la función, ahora en vez de encoger, agrandará la ciudad. Se mantuvo en el aire y disparó el arma contra la Bola; creció y creció hasta que ocupó todo el agujero, cuando terminó, le dio el arma a Rachel y entró en la ciudad, fue directa al edificio del consejo, fue al sótano bajando las escaleras, después abrió una puerta de metal y entró, parecía que estuviera en el interior de una cueva, pero en realidad era el centro de control de los propulsores que mantenían la ciudad a flote y de la cúpula. Bajó todas las palancas para apagar los motores y el ordenador.
—Después de cientos de años ya va siendo hora que descanses. —dijo Lara mientras acariciaba la consola.
Salió de allí cerrando de nuevo la puerta, la selló para que nadie entrara en ella, nunca.
Cuando salió al exterior, vio a la gente mirar al cielo no entendían nada, a ella se le ocurrió decir algo. Fue al interior del edificio y salió por el balcón presidencial, ahí había un micrófono y un botón para encender los altavoces.
—Ciudadanos de Argo, mi nombre es Lara Zor-El, hija del director del gremio de ciencias Zor-El y de la jueza Alura Zor-El, hermana de Kara Zor-El. Me comunicó con todos ustedes, aquí y ahora porque he cumplido con una promesa que mi familia hizo cuando nuestro mundo estaba a punto del exterminio. Soy una de las personas que fue separada de su familia a los 10 años, cuando el Gran Consejo creó esa nueva Ley donde los primogénitos debían colaborar con la milicia. Cuando me gradué me mandaron junto con todos mis compañeros, a hacer una misión de exploración. Estuvimos meses buscando un planeta, no sabíamos para qué, pero eran nuestras órdenes, cuando lo encontramos, mis compañeros soldados aniquilaron a sangre fría a todos los científicos menos a mí, no me encontraba con ellos. Cuando supe que estaba pasando, hui, cogí una lanzadera y me alejé. El Gran Consejo dijo a todo el mundo que nos atacó una nave enemiga; como única superviviente les puedo decir que no es verdad, fue la milicia kriptoniana quién atacó mi nave, todos murieron ya que no tenía escudos. El Gran consejo sabía perfectamente que Kriptón iba a desaparecer, por eso creo todo ese plan. Yo encontré este planeta, ellos querían dejarnos atrás y venir aquí para vivir, dejar que todos los kriptonianos murieran excepto ellos y sus familias.
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Destinadas (Supercorp)
RomanceLena sabe la verdad de Kara, Lex se lo contó antes de que ella lo matara. Se enfada con Kara por descubrir que la amistad que tenían no era real, pero una carta escrita de puño y letra de ella, da respuesta a algunas cosas y el enfado se convierte...