Cuando Armando llegó a la prepa, fue directo a las bancas de la cafetería, donde se encontraba Diego, estaba sentado y viendo su celular.
—Hola chaparro —le sonrió y guardó su celular.
—Hola. ¿No fuiste por Alexis? —se sentó enfrente de él.
—No, se me hizo tarde, así que les mandé un uber, a él y a Josué.
—Ah... Oye, ¿te puedo preguntar algo?
—Lo que quieras —le miró con atención.
—¿A ti no te molesta que Alexis y Josué pasen tanto tiempo juntos y se lleven tan bien?
—Para nada. ¿Por qué me tendría qué molestar?
—Porque son amigos, ambos son gays, son lindos y viven juntos.
—Yo confío mucho en mi novio. Además, ellos solo son mejores amigos, chaparro.
—Pero Josué y yo también fuimos mejores amigos, y Alexis y tú también.
—Sí, pero es distinto; a ti te gustaba Josué desde que lo conociste y a él también le gustabas, aunque se haya tardado en darse cuenta. Y Alexis y yo también nos gustamos desde que nos vimos. Tranquilo, Josué te ama a ti, Alexis me ama a mí, y de eso estoy muy seguro. Tú también deberías de estar seguro de que eres al único al que Josué quiere, chaparro.
—Pues sí, supongo que tienes razón —dijo, no muy seguro.
—A ver, ¿quién es tu mejor amigo?
—Tú —sonrió.
—Y tú eres el mío, chaparro. —le sonrió—. Mira, tú eres lindo, tanto de forma de ser como físicamente, y yo creo que no estoy tan feo, ja, ja —rio un poco— A veces nos abrazamos, reímos, decimos que nos queremos y nos llevamos bien, y no por eso ya nos gustamos, ¿o sí?
Armando sonrió, pero no contestó e intentó no hacer contacto visual con él.
—Espera, ¿yo te gusto? —prreguntó con confusión y asombro.
—Actualmente no, pero cuando te conocí pues... es que eres muy guapo, Diego, ja, ja.
—¿Entonces te gustaba?
—¿No era obvio? —lo miró.
—Lo llegué a pensar por un momento, pero como estabas tan clavado con Josué, pensé que tal vez solo era mi imaginación o algo.
—Yo siempre amé a Josué, eso nunca estuvo en dudas, pero cuando te vi sí me quedé de: “¡Oh por Dios, qué hombre tan hermoso!”. ¿Sabes cómo? Ja, ja —rio, nervioso.
—Sí, sí sé cómo, ja, ja —también se rio.
—Pero no te preocupes, lo que sentí por ti solo fue algo fugaz, una impresión que tuve al verte, pero actualmente ya no me gustas. Yo amo a mi gatito, solo a él —sonrió feliz.
—Y yo amo a mi tomatito —sonrió igual.
—Y eso yo lo sospechaba, y tú lo negabas, ¿recuerdas?
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Tú y yo contra el mundo y contra todo (Libro #1)©✔
Teen FictionCuatro adolescentes con diferentes vidas y diferentes personalidades van a tener que enfrentarse con su familia, con la sociedad y con el mundo entero con tal de defender su amor, y así demostrar que no están equivocados, sino enamorados. ¿Podrán lo...