Punzadas

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     —Dans, Dans —llamaba una dulce voz desde ningún lado, perdida en todas partes—. Aquí, justo aquí.

     —¿Dónde...? Oh... —esbozó una sonrisa triste al verla. El corazón se le rompió en mil pedazos.

     ¿Lo lograste?

     —Sí...

     —¿A qué costo?

     —Todo lo perdí...

     —¿Y qué era ese todo?

     —Lo eras tú... Helena.

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     —Era de esperarse —suspiró Obi Wan, cruzado de brazos, mientras miraba las grabaciones de seguridad proyectadas en holograma dentro de la cámara de reuniones del Consejo—. No podríamos mantenerlo encerrado para siempre, pero... ¿era necesario desactivar la mitad de los protocolos de seguridad? Quisiera que me recuerden por qué lo dejamos ir.

     —El maestro Quinlan siempre ha... diferido de las formas tradicionales de la Orden —agregó la maestra Luminara—. El maestro Windu considera que el mejor método para hacerlo regresar al Lado Luminoso es dejar que él mismo encuentre su catarsis, que... encuentre su camino por sí mismo.

     —No podemos decirle qué hacer —continuó el maestro Ki-Adi-Mundi—. Es un maestro jedi en toda regla, de él depende su destino.

     —Sí... pero me preocupa lo que ese destino pueda llegar a hacer —Obi Wan se acercó al holoproyector en el centro, presionó un par de botones del panel y el holograma cambió de repente. La secuencia del pequeño encontronazo que Quinlan Vos tuvo con Dans Ryder apareció frente a los ojos de todos—. No quisiéramos tener otro caso de... asesinato, aquí en el Templo.

     —Si hubiera dado la alarma entonces nada hubiera salido como lo pensaba el Consejo —señaló la maestra Luminara—. Simplemente se encontró en el momento equivocado, en el lugar equivocado y con la persona equivocada.

     —Pero con sus habilidades pudo escapar —continuó Ki-Adi-Mundi—. Eso es motivo de alivio; y tengo entendido que el teniente Ryder se encuentra con licencia médica.

     —Así es —corroboró Obi Wan—, estará fuera del frente por lo menos una semana, luego regresará a su designación. Ha demostrado tener una gran capacidad de liderazgo y comando, la campaña en Felucia fue exitosa gracias a la captura del Puesto 7, que en realidad era una base de operaciones separatista altamente vital para el control del sistema.

     —Y quien llevó a cabo la captura de dicho puesto fue el teniente en cuestión —dedujo Ki-Adi-Mundi—. Parece que no nos equivocamos con él.

     —No hay que apresurar las cosas, maestro Mundi —dijo la maestra Luminara—, el joven aún se encuentra en prueba. Ya veremos si su capacidad se acerca, al menos, a la de un soldado clon entrenado.

     —Yo estoy más que convencido que sí —dijo Obi Wan con una corta sonrisa—. Supongo que la campaña en Felucia le hace meritorio de una aprobación, ¿verdad maestro Plo?

     Plo Koon asintió con serenidad.

     —El teniente Dans Ryder es un gran añadido a nuestras fuerzas, bajo sus órdenes, maestro Kenobi, estoy seguro que tendremos muchos más buenos resultados.

     —Mantengo mi postura que esto es demasiado apresurado —volvió a decir Luminara.

     —Pero cuenta con la venia del supremo canciller —recordó Plo Koon.

Entre Estrellas: A Star Wars Fan History IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora